Red Hot Chili Peppers en el Palacio de los Deportes

Mexifornication: Red Hot, hermano, ya eres mexicano.

El rugido de los vendedores ambulantes en los alrededores del Palacio de los Deportes abarcaba todo el espacio en un intento de vender el tan preciado recuerdo del evento. La euforia de la gente era palpable, y es que cómo no sentirse emocionado si la banda de rock estadounidense Red Hot Chili Pepppers presentaba su nuevo material The Getaway en nuestro país.

Nunca me había tocado estar en la parte de arriba en el Palacio, y desde las alturas la vista es muy diferente a lo que se vive abajo, así que tuve la oportunidad de ver a 21 mil personas moverse, contonearse y acomodarse para ver a sus ídolos. El lugar estaba lleno, la gente estaba preparada y la noche nos dio la bienvenida.

Después de un jam idílico y bien ejecutado, los golpes en la batería de Chad Smith, el bajeo de Michael “Flea” Balzary y la guitarra de Josh Klinghoffer hicieron estallar al público en lo que Anthony Kiedis coronó con su voz como “Around The World”.

“Hola México” salió de la garganta del vocal y la gente vitoreó con aplausos y gritos al vocalista de la banda californiana para darle paso a los acordes casi bíblicos de la guitarra de “Snow”. La magia comenzó a través de nuestros ojos, unas luces colgadas del techo empezaron a bajar, moverse y hacer formas curvilíneas. Destellos amarillos y morados caían como aguacero sobre las cabezas de los asistentes y todos quedamos boquiabiertos.

“Scar Tissue” siguió para hacer cantar a todos y la guitarra de Josh Klinghoffer se convirtió en la protagonista del momento. “Dark Necessities”, canción de su último álbum, sonó y los celulares iluminaron, mientras que el bajo y la batería le daban el toque final.

Nada se respeta más que el amor de las bandas por su público, y los Red Hot se han ganado el amor del público mexicano con su música, actitud y cariño. “Gracias México. Tienen mucho amor y un gran corazón, estamos con ustedes siempre. Gracias por todo lo que nos han dado estos años. We love your fucking country!”, dijo Anthony.

“The Adventures of Rain Dance Maggie” y el bajeo sublime de Flea hicieron su trabajo y todos bailaron. "Encore”, “Blood Sugar” y “Go Robot” continuaron con el espectáculo audiovisual en el que los bajos resaltaban la dualidad entre los sonidos agudos y graves, entre el cielo y el infierno.

Llegó “Californication” y los acordes de la guitarra y la batería comenzaron a trazar el camino. Anthony cantó y todos corearon: “First born unicorn, Hard core soft porn. Dream of Californication”.

Un poco de jazz y progresivo en una interpretación sin límites, ni latitud, con “What is soul”. En el escenario Flea saltaba, Josh headbangeaba, Kiedis, sin playera, corría de un extremo al otro y Chad golpeaba la batería con una fuerza bestial. Es impresionante cómo los años no han pasado por sus almas y me siento afortunada de haber tenido la oportunidad de verlos en vivo así, tan eternos.

El bajo implotó nuestros cerebros y el cover de Stevie Wonder, “Higher Ground”, prendió todo a nuestro alrededor. Pocos pueden hacer buenos covers y ellos lo lograron con este clásico de los 70. “Under The Bridge” comenzó y unió a todos frente a una banda que hizo latir nuestros corazones y corear como hermanos.

“By The Way” y sus movimientos sonoros nos atraparon y todos saltamos; en alma, en cuerpo, todos hicimos slam, y vivimos el momento.

El momento emotivo de la noche llegó y la banda nos regaló imágenes de los rescatistas, de la hermandad y solidaridad de los mexicanos, de Frida, la perrita rescatista; y para culminar, nuestra bandera brilló y muchos soltamos lágrimas porque duele, aún duele. “México, México” nuevamente fue el grito más fuerte, más orgulloso.

La noche se despedía de nosotros con “Goodbye Angels” y “Give it away”, un cierre perfecto.

Todos fuimos parte de la historia una vez más, y yo solo recordé a la niña de 8 años que conoció a los Red Hot por la playera de su primo y ahora los vio en vivo.

The White Stripes lanzará tres de sus discos en cassette

La banda no para con la celebración de su vigésimo aniversario, ahora sacará sus primeros tres discos en formato cassette.

Hace exactamente una semana recibíamos la increíble noticia de un paquete de lujo nombrado Vault Package #34 con tres presentaciones en vivo de los extintos The White Stripes en Detroit. Ahora Third Man Records (casa discográfica de Jack White), autorizó la remasterización y el lanzamiento del homónimo The White Stripes de 1999, De Stijl del 2000 y White Blood Cells del 2001. Este lanzamiento se tiene previsto en formato cassette para el 14 de octubre del presente año.

El arribo de los tres materiales se tiene previsto para el Cassette Store Daycelebración creada en 2013 por algunos sellos independientes en Gran BretañaDicho evento se extendió por todo el mundo, donde países como Estados Unidos, Japón, Francia y China han decidido unirse y celebrar al emblemático formato. La banda ha jugado con la nostalgia de sus fans, anunciado además del paquete de lujo, el streaming de su primer concierto y el relanzamiento de Icky Tump en una edición especial.

Se lanzarán los cassettes en dos distintos formatos. Los records de The White Stripes que se impriman en cassette blanco, serán exclusivamente para el evento del próximo sábado en los Estados Unidos, mientras que las versiones posteriores para su venta en general, se harán en cassette negro y se publicarán en un futuro próximo.

Lo que más se destaca del Cassette Store Day, ha sido la gran manera de promocionar el talento sin firma en alguna disquera y crear un lugar para la música underground. Cualquiera que sea el género, la música circula a través de eventos en tiendas de discos, programas de radio y conciertos en el día.

Bandas y artistas como Motörhead, Ramones, Julian Casablancas, Pixies, The Flaming Lips y Courtney Barnett han estado inmersos en la celebración, promocionando alguna de sus placas en cassette.

 

 

Nuevo tema de Squeeze

Squeeze prepara su retorno con "Patchouli".

Hace unas semanas la banda de Londres anunció su regreso y confirmó todos los detalles sobre su próximo disco. Esta noticia fue algo impactante para muchos, ya que son unos grandes referentes del new wave y no habían lanzado nada nuevo desde hace 17 años. El grupo ha mantenido una buena racha de adelantos y no piensan detenerse, pues esta mañana revelaron su más reciente sencillo, el cuarto desde principios de septiembre.

Lo nuevo de Squeeze lleva el nombre de "Patchouli" y se une a "Happy Days", "Cradle To The Grave" e "Innocence In Paradise". Este cuenta con un sonido muy suave y algunos elementos de bluegrass, muy alejado a lo que la agrupación nos tiene acostumbrados. Sin embargo, destacan los sintetizadores al final de la canción.

Sobre este álbum se ha comentado demasiado, pero la mayoría de los comentarios apuntan a que los viejos fans estarán encantados y los seguidores más jóvenes serán atraídos por su sonido.

The Knowledge, el nuevo disco de Squeeze, saldrá el próximo 10 de noviembre a través de Love Records, el propio sello discográfico de la banda. La edición especial en formato de vinilo llegará a las tiendas el 10 de noviembre.

Puedes escuchar "Patchouli" justo aquí:

Shamir estrena el visual de "Straight Boy"

Una letra melancólica y un clip contestatario nos muestra la nueva era de Shamir.

El próximo 3 de noviembre, el cantante y compositor estadounidense Shamir estrenará su LP Revelations, editado bajo el sello Father/Daughter. De este material discográfico hoy nos presenta un avance titulado "Straight Boy", un track en el que destaca la guitarra y los sintetizadores.

En este videoclip dirigido por Ryan Carpenter podemos ver al originario de Las Vegas tocando la guitarra con un fondo blanco mientras ,al paso de los minutos, es sustituido por un chico blanco. Este video cobra sentido gracias a la letra: "Can someone tell me why, I always seem to let these straight boys ruin my life?".

"Se trata de lo frustrante que fue para mí tener toda mi identidad recogida a una edad temprana, solo para ver a los hombres blancos rectos utilizarlo como una opción estética. El video muestra de manera inequívoca el proceso de blanqueo y el repudio de los queer y gente de color que fue pionera", declaró Shamir en comunicado de prensa.

Dale play a este metraje:

Junto a este estreno, Shamir anunció que emprenderá una gira por Estados Unidos en esta temporada invernal, checa las fechas a continuación:

Mira el nuevo clip de Exploded View

El proyecto que nació en México: Exploded View regresó al estudio y tiene un nuevo EP en puerta, sencillo y video.

Exploded View es una de esas bandas que se gestan improvisadamente. Su peculiar historia se resume en que Anika, su vocalista, visitó México para su presentación en un festival y el entendimiento y la vibra con sus músicos de soporte —todos mexicanos— fue tal que decidieron juntarse a improvisar un material que fue grabado y que se convirtió en su álbum homónimo debut del 2016.

Tras este experimento único de tesituras melancólicas, la también periodista política, decidió este año regresar al estudio junto a Hugo QuezadaAmon Melgarejo y Martin Thulin. De esas sesiones nace su próximo EP Summer Came Early; trabajo de cuatro tracks. El tema (del mismo nombre) que da apertura al disco es un corte tranquilo guiado por un riff que no por repetitivo se torna soso y cuenta además con el video oficial —dirigido por William Markarian-Martin— que te dejamos a continuación.

El EP —que al igual que su disco debut, fue grabado bajo el sello Sacred Bones Records estará disponible el 10 de noviembre. Te dejamos el arte de Summer Came Earlyasí como sus temas y el enlace para que puedas adquirirlo en preventa.

Summer Came Early EP.

Tracklist:

1. "Summer Came Early"
2. "Forever Free"
3. "Mirror of the Madman"
4. "You Got a Problem Son"

Julian Casablancas estrena temas con The Voidz

Ya podemos escuchar algo de lo nuevo de Julian Casablancas +  The Voidz.

Hace tiempo el estadounidense anunció que estaba grabando su siguiente material con su The Voidz, todo ante los rumores de un nuevo disco de The Strokes, además de que ya comenzaron su gira por Norte y Sudamérica. Ahora, la banda del neoyorquino ha revelado tres de los temas que estarán en su próximo álbum.

Este estreno se dio en un show secreto que dieron en Los Ángeles, donde presentaron las canciones: "Wink", "We're Where We Were" y "Coul As A Ghoul". Aunque aún no hay detalles sobre el proyecto de Julian Casablancas, ya está confirmado y se sabe que saldrá en otoño o a principios del próximo año, pues han estado trabajando en el desde mediados del 2015.

A pesar de que la revelación de estos temas fue algo precipitado, los seguidores del cantante esperan que las versiones de estudio lleguen en los próximos días, así como más estrenos durante sus próximos shows en America Latina.

Puedes escuchar todas las canciones justo aquí:

Fechas de Julian Casablancas + The Voidz:

  • 12 de oct. Bogotá, Colombia
  • 14 de oct. Santiago, Chile
  • 16 de oct. Barranco, Perú
  • 18 de oct. São Paulo, Brasil
  • 19 de oct. Río de Janeiro, Brasil
  • 21 de oct. Buenos Aires, Argentina
  • 22 de oct. Córdoba, Argentina
  • 25 de oct. Buenos Aires, Argentina

"Vicio", el nuevo clip de Camilo Séptimo

Visiones alteradas, atracción y desenfreno en el nuevo videoclip de Camilo Séptimo.

Guitarra eléctrica con teclados vibrantes dan paso a la propuesta "Quiéreme, aunque sea un poquito quiéreme". Así comienza "Vicio" sencillo incluido en el primer álbum de larga duración de los mexicanos Camilo Séptimo, mismos que ya nos habían presentado su propuesta musical en el EP Maya (2014) y con una lista de singles entre los que destacan "Eres" "Miénteme" y "Ser Humano", sencillos que formaron su primer largo titulado Oleos (2017). Su música expresa situaciones reales trabajadas bajo un rock pop eléctrico, con efectos cuidados en todos sus temas y detalles que maximizan cada propuesta. Su lírica varía entre amor, desamor, dependencia, introspección y la imperfección humana.

Ahora la banda estrena visual para "Vicio". “Fue la última canción que compusimos para Óleos. Se con vierte en una canción especial porque se plasmó muy bien la energía que queríamos transmitir a la gente. Del Maya al Óleos se nota la evolución que hemos tenido musicalmente. Además es una de las canciones que más nos gusta tocar en vivo y que nos divierte”, comentó Manuel Mendoza vocalista de la agrupación. Sus letras sinceras y profundas cargadas de sentimientos de todos los colores logran hacer clic instantáneo con quienes las escuchan.

Dirigido por Julio Abad, el visual está protagonizado por una pareja que bajo los efectos de algunas sustancias comparten una noche, las emociones se intensifican bajo el efecto de diversas drogas que alteran la percepción, de esta forma la pareja vive al máximo una velada de desenfreno, fiesta, baile e incitación.

A través de estos años de trayectoria el cuarteto ha evolucionado su sonido creando un vinculo con sus admiradores y nuevos escuchas que se identifican y disfrutan de su música cuidadosamente elaborada y sincera. Camilo Séptimo se presentará en el Teatro Metropólitan el 29 y 30 de octubre.

The Field: 10 años de 'From Here We Go Sublime'

Diez años de conocer el futuro: The Field.

Era año nuevo. 2007. Parece sencillo cambiar de año, no es necesario hacer algo, solo seguir el flujo natural de la vida, mantenerte a salvo y cruzar la línea imaginaria del tiempo. ¡Feliz año nuevo! En algunas empresas no es tan sencillo, los servidores digitales no hacen ese cambio de cifras de manera automática, al final eso es cambiar de año ¿o no?, modificar los números, nada más; los significados que conlleva se lo hemos agregado nosotros, como el mismo hecho de pasar a otro año.

En estos sistemas que no cambian sus datos de la misma forma en que nosotros movemos una hoja del calendario, se generan problemas al interior de los programas digitales –por un simple dígito– ocasionando complicaciones inimaginables hasta que un cuerpo de ingenieros resuelve la contingencia –un número–. Presionar un botón. Clic. Un simple número. Nosotros como individuos tenemos un sistema por el cual nos regimos y una lógica que podemos modificar según sea necesario, pero las computadoras no obedecen hasta que se los indicamos. No piensan por sí solas (al menos no lo han hecho todavía). Ahora los smartphones cambian de manera inmediata de año como lo hacen con el huso horario cuando llegas a otro país. No es necesario ajustarlos. Pero aquella no era la ocasión. No había empresa, no había smartphone así que había que modificar la fecha del celular y de paso ajustar la manecilla del reloj de mano. Tampoco había muchos regalos que abrir, pero tenía el deseo de que fuera un mejor año. Como todos lo tenemos cuando abrimos un cuaderno nuevo y dibujamos un mar de posibilidades. Así que en el renacer del nuevo ciclo coloqué el CD con los 100 mejores tracks de Pitchfork de 2006 que un amigo me había “quemado”. En la canción número 62, mi vida –como la había sentido hasta entonces– cambió. La música, como la había conocido, dejó de serlo. “Over The Ice” puso a girar el mundo más rápido de lo normal. Mi mundo. Cada vez más rápido. Mucho más rápido. Muy rápido. Tan rápido que en mi mente dejé de ver y solo escuché. Un bajo persistente, una pequeña percusión, un zumbido vaporoso apareciendo que la vuelve algo más que una canción electrónica –le otorga un sentido de alucinación–, y una voz repetitiva que no dice nada y podría ser una señal interrumpida o cualquier cosa que suene fuera de este planeta, porque te corta el pensamiento como una droga de efecto inmediato. La canción sigue avanzando, dos voces más sacudirán las neuronas, no dicen nada porque no son palabras y tampoco son coro; son el proceso tecnológico que permite extraer el sonido de una vocal pronunciada –o tal vez menos– y repetirla cien veces para crear un instrumento humano digital. Es una locura porque mientras la voz se repite-repite-repite debajo hay un sonido futurista enloquecido. “Over The Ice" samplea voces de “Under The Ice” de Kate Bush.

Unos meses más tarde la disquera alemana Kompakt publicó From Here We Go Sublime, el debut de Axel Willner bajo el seudónimo The Field. El primer sencillo “Over The Ice” lo convirtió en un álbum para esperar. Una obra maestra de la electrónica contemporánea. Este 2017 cumple diez años, un aniversario más de que –por lo menos en mi mente– la música adquirió otro significado. Más allá del trance hipnótico que supone sumergirse en el techno pop minimalista del sueco Willner, su sonido –construido a partir de la repetición, los samplers y el uso de pequeñas partes para formar un todo–, implica imaginar un mundo inagotable, una paradoja auditiva como las que Escher pintaba, una escalera que a medida que subimos se va haciendo interminable. Una ciudad imaginada. Un sonido infinito.

Si la música electrónica era el futuro a principio de la década de los noventa, The Field y su debut son ese futuro que finalmente hemos alcanzado y al que le exigimos nos ofrezca más de todo. La era que imaginábamos está materializada en avances científicos, tecnológicos y sociales.

Sustentabilidad, igualdad, conocimiento, mejores condiciones de vida, transparencia informativa y respuestas satisfactorias ante las incógnitas de cada día. Ello no quiere decir que el mundo sea ideal, pero The Field representa en su sonido un posible futuro que imaginaron generaciones anteriores. Es fuga, es escape y un desapego del entorno. Pero también es la respuesta natural al mundo que agotó los recursos, que excedió sus límites y que dio forma a este sonido nítido y pulcro, bien estructurado, alejado de corrientes dominantes. Su potencia es tanta que no es necesario consumir sustancias alucinantes, solo necesitas ponerte los audífonos y dejar que te conduzca.

The Field aún representa una forma viable y cerebral de construir el sonido. Alejado, afortunadamente, de los dispositivos comerciales como el EDM dejando caer drops para alimentar un movimiento telúrico corporal mecánico. Un sonido atascado de excesos. El futuro, cualquier futuro, debe provenir de la imaginación, la creación y la abstracción. De utopías digitales incorporándose a lo cotidiano. Y eso es From Here We Go Sublime. Ya sea en sus golpeteos y los drones que escapan como gases en “Good Things End” o en los sensuales y veloces beats electrónicos de “The Little Heart Beats So Fast” que revolucionan las neuronas.

Si en San Junipero de la serie británica Black Mirror hay una extensión del placer prolongando la vida y viajando a momentos que anhelamos, en este sonido hay un hedonismo deseo hasta alcanzar un punto máximo de éxtasis, un deleite que inicia en el cerebro y mucho después en el cuerpo.

Mi amor por este álbum no solo se encuentra en sus sonido per se, en las abstracciones vocales, en sus ruidos digitales o las sutiles percusiones, sino en las puertas de la percepción que abrió con cada tema. El beat dejó de ser el punchis punchis repetitivo y aburrido para formar edificios construidos a partir de bloques sonoros, de actos sorpresivos en donde el ritmo da volteretas de 180 grados (“Everyday” en su acto sorpresa) y se arroja hacia un acantilado, o golpea en el cuerpo como un chorro inesperado de agua helada en el rostro.

Desde entonces la música electrónica pasó a ser parte de mi día a día, significó un cambio, un armario de opciones para elegir, soñar, apreciar... y volar. Las guitarras, debo reconocerlo, dejaron de ser tan atractivas, porque el sonido de una tecla generando una vibración (de cualquier índole, drone, whoosh, stinger, Flanger, hum, whipping ) se convirtió en un mantra que le da sentido a mi vida.

Slowdive comparte nuevo video

"Don't Know Why" de Slowdive ya tiene su clip.

A principios de este año, la banda originaria de Reading hizo un triunfal regreso con su cuarto álbum de estudio, el primero en más de veinte años. Ahora, los británicos vuelven a darnos una sorpresa, tal vez la última de este año, ya que esta mañana acaban de compartir su más reciente video.

Lo nuevo de Slowdive es el audiovisual de "Don't Know Why", uno de los temas que más sobresalieron del disco. Este fue dirigido por Grant Singer, quien ha trabajado con Ariel Pink y The Weeknd, aunque su último proyecto fue con Lorde para la canción de "Green Light". Esto fue lo que dijo Grant sobre el clip. "El video es menos sobre la lógica y más sobre un sentimiento. Es un tríptico de la memoria, cuando estás perdido y abandonado. Slowdive ha sido mi banda favorita desde que era un niño. Decir que hacer este video era surrealista sería un eufemismo. Su música ha sido este regalo que permanece conmigo siempre y mejora con el tiempo. Escuchar su nuevo álbum me dejó sin palabras. Así que tener la oportunidad de hacer algo para ellos es un honor que no doy por sentado".

La trama del video aborda a una pareja y el episodio auto destructivo de la mujer junto a algunas grabaciones en la playa y el campo. Este es una exclusiva de Apple Music y la puedes ver haciendo click justo aquí.

Entrevista con Mexican Jihad de NAAFI

NAAFI: Calidad, constancia y promiscuidad (7 años).

En pleno 2017, hablar de NAAFI en la Ciudad de México parece casi imposible. No porque no cuenten con las virtudes necesarias para sostener todo aquello que han hecho desde hace siete años que se gestó la organización, sino porque las palabras parecen ya haber sido usadas una y otra vez. Tal vez en algún texto editorial o tal vez en alguna entrevista de radio, tal vez en un programa de televisión o tal vez en un periódico o tal vez, incluso, en alguna mampara dentro de algún museo. A estas alturas de la vida no se puede presentar a NAAFI como una extrañeza porque ya están muy lejos de ahí. Más que un fenómeno sui generis, es una familiaridad que hay que terminar de comprender.

Eso parece ser parte del plan maestro a futuro. O por lo menos es lo que imagino cuando leo que “infectar el mainstream” es el siguiente paso para revolucionar el comportamiento de NAAFI. Alberto "Mexican Jihad" Bustamante lo aseguró en una entrevista para esta revista. "Con calidad, constancia y promiscuidad" ha sido que la organización ha triunfado dentro y fuera de este país. La suma de esas tres cosas, aunado a una fiel audiencia que crece conforme avanza el tiempo, ha logrado que NAAFI sea una referencia obligada para la vida nocturna de manera local y para la música electrónica a nivel general.

Puede parecer una exageración, pero los hechos están ahí: han colaborado con gente de todo el mundo, desde Fade to Mind hasta Príncipe Discos, desde Salviatek hasta HiedraH y, además, los han puesto a interactuar con un público nacional que permanece cada vez más sensible y consciente a la agenda social contemporánea y sus irregularidades. Suena profundo y de algún modo reaccionario, pero en realidad Bustamante lo mira desde un punto de vista mucho más humano y natural. “Tirar fronteras es más como un slogan de comercial. Al final se trata de algo más pragmático y a nivel humano, donde nos articulamos a través de relaciones con amigos y personas con las que nos interesa hacer cosas. Ahora trabajamos solo con proyectos que sean capaces de ser recíprocos, no necesariamente mediatizados”.

Esa declaración es una buena forma de comenzar a comprender un poco más sobre lo que NAAFI representa realmente. Contrario a lo que muchos han asegurado y otros más piensan, el discurso o la filosofía de NAAFI no se centra en la rebelión, sino más bien en la libertad. Una que comienza en la inclusión de sus fiestas y que se refleja, también, en la misma manera de operar de la organización.

Para entenderlo mejor pregunto a Alberto sobre NAAFI como sello discográfico, a lo que responde. “Un sello en estos momentos rebasa los formatos tradicionales de publicación. Los shows de radio, mixtapes y proyectos específicos hacen otro tipo de catálogo, se almacenan y se distribuyen con lógicas diferentes”.

Esa libertad está palpable, así como uno puede hacer y deshacer en una de sus fiestas, ellos también lo pueden mientras trabajan. Es una dinámica que los ha llevado a crear fiestas de fin de año de tres días en la playa o exposiciones musicales de arte contemporáneo, así como a lanzar mezclas de una hora en estaciones de radio por internet o crear parafernalia de colección para la posteridad.

También, entre otras cosas, les ha permitido crear Pirata, las compilaciones anuales que no solo hablan del estado musical de sus productores internos y amigos, sino también del contexto en el que se encuentran. Basta voltear a ver sus portadas para darse una idea: el volumen uno como una revelación de la realidad del bootleg, el segundo como su estado de emergencia, el tercero como su poderoso levantamiento y el cuarto como su statement de éxito de la mano de un patrocinio. Alberto dice sobre esto. “El Pirata es un ejercicio primero interno, donde se comparten los edits y bootlegs en privado para probarlos en los sets. Después se publican en un paquete, pero es un lanzamiento que ya tiene un cierto culto alrededor. Sirve para mostrar la 'sensibilidad' que tiene la noche en el momento. La colaboración con Lol-Tun es resultado de un largo historial de objetos que hemos producido bajo el sello. También es síntoma del momento por el que pasamos, donde marcas y agentes creativos forman todo tipo de diálogos y colaboraciones”.

Y después arroja una afirmación más para formar la idea NAAFI correcta en la cabeza. “Siempre hemos tratado de enfatizar la materialidad de la música. Visualizar o hacer evidente los esfuerzos y el contexto en el que se produce y consume la música. Estar en control de nuestras narrativas y dejar un rastro tangible, instrumentalmente político”.

Esos rastros tangibles también han servido para que NAAFI sea todo eso que es actualmente. ¿Qué podría venir después de todo lo que ya hemos visto? Pareciera que lo han intentado todo, pero Alberto todavía tiene algunas ideas bajo la manga para sorprender. “Nos interesa seguir probando formatos. Quizá una publicación impresa, un documental, musicalizar un Netflix, una estación de GTA, etc”.

Y de la misma forma que ellos son inquietos, la audiencia que los ha seguido desde el inicio ha hecho lo propio. Han pasado siete años y no es ningún periodo de tiempo para tomarse a la ligera. Así como la música de cada uno de los proyectos que conforman NAAFI (LAOZutzut, Imaabs, TAYHANAFüete Billëte, OMAARDJ TetrisMexican JihadOly, Kali MutsaDebitFausto BahíaMock The ZumaLechuga ZafiroWasted FatesZakmatic) ha cambiado en todos estos años, la gente que la aprecia también. Alberto lo sabe. “La audiencia va cambiando con el tiempo. Al principio era gente muy cercana a nosotros: amigos diseñadores, periodistas, académicos, comerciantes, gente del mundo del arte, gente rara que no tenía un espacio. La noche se ha diversificado bastante y ahora hay una audiencia mucho más amplia, joven y muchos extranjeros. También estamos más grandes y consientes de que es tiempo de que promotores más jóvenes le entren al quite”.

Después de siete años es claro que NAAFI no se encuentra solo en la oferta musical y cultural de la ciudad (o de México, en todo caso). Alberto dice que es tiempo de que los promotores más jóvenes comiencen a crear una historia propia y a diversificar –todavía– más el panorama actual. ¿Cómo hacerlo? Si de algo ha servido la historia de NAAFI es para arrojar algunas lecciones hacia quien sienta la misma inquietud que ellos hace siete años. Esa familiaridad que ya se siente por ellos, debe ser la misma que brinde la libertad para ver nacer nuevos nombres.

Pero en lo que llegan, todavía hay mucho de NAAFI por disfrutar:

  • ¿Qué cosas nuevas podremos escuchar pronto? “Se viene cosas nuevas de OMAAR, Wasted Fates, Lechuga Zafiro y colaboraciones con vocales”.

 Y con gusto las recibiremos.