Temas de frustración, miedo, confusión, dudas, arrepentimiento y todos los matices intermedios en lo nuevo de Cloud Nothings.
Después sus álbumes de poppy, la banda de indie rock Cloud Nothings vuelve con su mismo toque a sacar el palo del bolso.
El año pasado, la banda sacó el álbum de verano rico en melodías llamado, The Black Hole Understands, creado durante la fase inicial de la pandemia a través del intercambio de datos, que sacó a relucir sus inicios del power-pop. Más adelante, lanzó la contraparte titulada, Life Is Only One Event, que se publicó a principios de diciembre como un recordatorio del entendimiento del agujero negro que vale la pena escuchar.
Su nuevo material, The Shadow I Remember, marca un regreso múltiple para la banda de Cleveland, Ohio. Regresando a grabar juntos en el estudio, de vuelta al ritmo “emo” atrevido. El tono de guitarra distorsionado suena con un pequeño piano para poner en marcha “Oslo”, no solo es un destacado en el récord de los once temas, sino un abridor que sostiene la puerta con una energía y emoción que no muchos crean. “Nothing Without You”, es una canción compleja y emocional, lo que se siente como una sencilla rola de enamoramiento, con sus guitarras alegremente difusas, dejan ver cómo el cuarteto quita la máscara de las pistas de amor prototípicas, y ofrece una visión realista de las relaciones.
El cantautor de la agrupación, Dylan Baldi, profundiza en ideas de paralizantes dudas sobre sí mismo y sus crisis existenciales, entregado con una intensidad emocional que se presta perfectamente a la crudeza del disco y la ferocidad de su producción. Hay aspectos destacados en “Only Light”, con su sonido duro y listo, con una melodía distorsionada que hace frente a algunos de sus trabajos más emocionantes hasta la fecha. Por otro lado, ritmos muy rutinarios están en “It’s Love”, “A Longer Moon” y “Sound Of Alarm”, que son pistas que te dejan preguntando si el mantra podría aplicarse al enfoque musical en algunos casos.
“The Spirit Of”, se eleva con un optimismo emocional, mientras que otras canciones como “Open Rain” o “Am I Something”, se canalizan en tonos más emos. “Nara” suena y fluye como una ola perfectamente capturada. Por útlimo, “The Room It Was”, nos recuerda que, incluso después de 10 años en el juego, hay suficiente fuerza y entusiasmo detrás de esta banda para desviar la decepción general.
The Shadow I Remember, resume perfectamente todo lo que la banda hace tan bien e insinúa lo que podría suceder en un futuro. Este álbum tiene algunas de sus letras más instrospectivas. Cloud Nothings, entregó una producción que muestra una combinación intrigante de frescura y comodidad.
