Con pasos agigantados, Hinds toma revancha en el amor y experimentan con nuevos ambientes sin perder su identidad.

Sin dejar lo juvenil de lado, Hinds retrata su paso por la industria musical resaltando su experiencia en el amor y lo que conlleva estar de gira por el mundo. Demuestra que ya no es solo una gang girl que surgió de la escena madrileña, esta vez son mujeres que buscan destacar por sus ritmos, letras y energía en su nuevo álbum The Prettiest Curse.

Amber y Ade son las protagonistas pues guían las melodías y ritmos que dan paso a las vocales de Ana y Carlota quienes se arriesgan combinando versos en inglés y español. Así destacan las partes importantes de la canción. Atascado de ruido, euforia y adrenalina; una producción que pesa gracias al trabajo de Jennifer Decilveo que no deja a un lado el garage rock con el que Hinds creció, sino que busca adecuarlo a un happy y dream pop, sin embargo, pueden llegar a incomodar en el transcurso.

El tema que abre el álbum “Good Bad Times” guiará el resto de las canciones, en la que el bajo marca el paso y un groove apenas perceptible. En “Just Like Kids (Miau)” el ritmo más juguetón tiene un trasfondo que critican a la industria y comentarios que han perseguido a las chicas desde el inicio de su proyecto. Esto se encuentra oculto por una tarola enérgica acompañada arreglos que remontan al garage del que Hinds nos enamoró.

“Riding Solo” un tema opaco y denso en el retoman el sonido al que estaban acostumbradas y que sirve para aligerar el paso al ritmo. El deseo y desesperación para estar siempre con la persona ideal se ve reflejada en las voces saturadas en “Boy”. Después de la adrenalina llega, en “Come Back and Love Me”, una balada que vale la pena destacar gracias a la guitara española de estilo bossanova. La voz aguda y desgarradora de Carlota retrata con exactitud aquel amor que no puede ser, pero nos aferramos.

“Burn” retoma la energía, con una guitarra enérgica y brillosa, con momentos que la motivan a despertar de la fantasía amorosa y adentrarnos a un mundo en el que los sentimientos se dejan a un lado. Lo pesado regresa en “Take Me Back” que sube la tonalidad hasta ser un tema difícil de comprender, ya que cada uno de los elementos de la canción van progresando sin entenderse uno con el otro.

La proporción de los elementos en “The Play” lo colocan como el mejor; un tema veloz en donde los sonidos necesitan de la saturación. El bombo da fuerza a la combinación de percusiones que permite jugar en la canción con momentos hay locura y excitación como suele suceder en los juegos en los que tratamos de encontrar una versión den nosotros.

En “Waiting For You” una guitarra acústica nos remonta a una escena lounge y con un bajo más pronunciado resultan la canción más pop del álbum. Los cambios de tono entre verso y verso anuncian el final. “This Moment Forever” un cierre melancólico que deja la sensación de una segunda pues el camino no ha terminado y con una sutil guitarra nos dejan pesando ¿cuál es el momento?.

The Prettiest Curse, puede tener opiniones dividas, en algunos temas se reinventan y experimentan para dar paso a una instrumentación más fuerte y sólida. En otros no recuerda a Leave Me Alone, su primer álbum, y lo cual llega a cansar, pero es el perfecto balance de lo aprendido hasta el momento.