YOB — Our Raw Heart

Our Raw Heart: Debes conocer el infierno para surcar sus dolorosos caminos.

Imagina que un día simplemente no puedes despertar, que tu cuerpo totalmente bloqueado no responde ante los impulsos de tu mente, que nada funciona como debería, y que estás condenado a nunca volver a ser el mismo. Te sientes perdido, buscas la absolución y el remedio final, la luz al final del túnel, el perdón de todos aquellos a los que les hiciste mal, tus plegarias por una última oportunidad para decirle a esa persona lo que ya no pudiste volver a ver se difuminan ante el destino final. Pero de pronto todo vuelve a una aparente normalidad como el golpe a la guitarra que da inicio a “Ablaze”, vuelves a arder, el bloqueo se disipa, y como las brasas ardiendo el rojo vivo te devuelve la vida, la sangre vuelve a circular como el delicado y furioso arpegio, el corazón comienza a reaccionar como la batería y su ritmo ideal, las voces en tu cabeza comienzan a tomar sentido de nuevo: “Shining dreams of what we are, sown in fields of stars, blaze in the heart of the beyond”.

Mike Scheidt trasfigura el dolor de una diverticulitis y el penoso vía crucis que lo mantuvo al borde de la muerte en la tónica de Our Raw Heart, material discográfico que coloca a YOB como banda fundamental del doom metal. El material lírico mayormente escrito en la convalecencia del vocalista y guitarrista nos pone un poco en perspectiva: un brazo mutilado por las aplicaciones intravenosas, un débil ánimo que se rescata asimismo de venenos ancestrales, los gritos que aflorarían en el proceso de grabación como catarsis, la influencia gutural del black metal, el ánimo corrosivo del cabalgar de una batería, Black Sabbath como alta causa, los riffs que convulsionan, la oscuridad como preludio a un amanecer gris.

Foto James Rexroad

“In Reveire” y su ascendente feedback con el ligero golpeteo al bajo que parece ecualizarse al tono de una travesía dantesca, lagunas mentales, neuronas tratando de recordar buenos tiempos que de golpe se disipan ante el estruendo de las seis cuerdas en bajo tono, recordando la experimentación ambiental del álbum Clearing the Path to Ascend y desbocando una nueva furia que la ansiedad por vivir provoca. Piezas de larga duración para situaciones extremas, cambios de ritmo como el ánimo que sube y baja, los ecos de frases que retumban en la mente a modo de arrepentimiento constante. “Lungs Reach” y su ánimo instrumental denso que fuga en gritos de absoluto sufrimiento, los demonios siguen acechando, los niños siguen enjaulados y nadie hace nada por liberarlos.

“Beauty in Falling Leaves” como la divina gloria de una Magdalena mohosa reposando en Père-Lachaise, el coqueteo con el post rock, la calma aparente que se enrosca cual corona de espinas en nuestras piernas hasta alcanzar la psique, los corazones que nos llevaron un día a casa y después nos abandonaron, pero aún así, seguimos buscando, analizando, añorando la belleza que el mundo de repente nos trae en el caer de las hojas en un día lluvioso, en el flotar de las nubes grises que nos condenan, en los charcos de agua negra donde no podemos reflejarnos.

“Original Face” y su evocación a Moonspell, el grito que desboca en el guitarreo constante que serpentea con el bajo, y para el gran final el tema que da título a un disco atizado por atmósferas decadentes, pero esperanzadoras. No puedes salir del infierno sin antes conocerlo, cual síndrome post traumático, YOB nos arrastra en el fango para después darnos un báculo para sostenernos, sortear el camino, hacerle caso a nuestro furioso corazón, resolver los misterios, saludar a los cuervos, reunificarnos, y que las luces de antorchas dispuestas para nuestro bien iluminen el camino a un bienestar que siempre difuso tendremos que alcanzar de cualquier modo.

Sierra León — Hipersomnia, Pt. 1 EP

Un sueño musical entre sombras y neblina.

Es fácil caer en simplezas y líneas gastadas al tratar de reseñar un álbum, usar aquellas frases que tanto se leen en revistas especializadas o apenas hablar de obviedades como el sonido de una canción u otra. Incluso yo lo he hecho. Afortunadamente Hipersomnia, Pt. 1 despertó en mí una fuerza que no reconocía como mía desde hace tiempo, me hizo escucharlo más de diez veces y sentarme en el sofá sin luces, tan solo con el EP en repeat. Hay algo único en esas seis canciones que provocan que el ritmo cardiaco se acelere y parezca que el aire falta a mi alrededor. Es como despertar en medio de un sueño musical entre sombras y neblina sin saber en dónde estoy.

Como precaución he de decir que no es un trabajo que mueva tan fácil a quien lo escucha en una primera visita, pero si te quedas lo suficiente te engancha por completo. “Delta” es el corte encargado de abrir el viaje, es una canción que más bien parece el intro de un álbum largo (y es que hay que tener en cuenta que este EP es solo una de las dos partes que conforman Hipersomnia, Pt. 1). Una pieza atmosférica que bajo capas de sintetizadores y efectos sonoros esconden un llamado en el que Manuel Castellón nos grita “¡Despierta!”. Una hipnotizante entrada a un pasaje onírico en el que nos vemos inmersos antes de que si quiera podamos reaccionar y del cuál no querremos irnos. Para cuando tomamos consciencia del lugar en el que estamos “Alma Trémula” llega de golpe y, de un salto, nos hace correr en busca de la persona que nos traicionó, aquella que rompió nuestro corazón y que nos da la espalda solo después de vernos en el suelo. El disco gira en torno a la historia de Macario, el héroe de nuestro cuento oscuro que tiene un referente directo en la película de Roberto Gavaldón, pero no solo eso… es como un Dante bajando a las profundidades del infierno y sus círculos, caminando por un purgatorio, siempre de la mano de Virgilio.

El shock que “Alma Trémula” genera en el oído con la guitarra de Juan y el bajo al unísono galopando sobre una batería que no tiene pudor es una muestra magistral del largo recorrido de Sierra León a través de su trayectoria y una canción que, al menos a mí, me devuelve esa ira y pasión que no sentía desde hace tiempo con una banda nacional. Termina para dar paso al tercer track del material: “Lucía”, con el cuál apela al lado más oscuro de la banda y detalla los sentimientos de contradicción, esperanza y desolación, que se generan después de una ruptura cruda y dolorosa. Los sintetizadores de Seiji junto con el bajo de Mario se combinan al final del track en una simbiosis que mantienen la esencia difusa.

La segunda mitad del EP inicia con “Sombras”, uno de los sencillos del material y quizá la canción mejor lograda de esta primera entrega. De manera curiosa es la luz entre la oscuridad. Un corte en el que la atmósfera musical es densa y se percibe pesada, pero que sin embargo logra equilibrar lo crudo de los tracks anteriores y lo artificial del resto. “Lacerado” es una montaña rusa de emociones, una que inicia subiendo y subiendo, cada riff y cada nota yendo hacia arriba, para después caer en picada para terminar flotando entre una guitarra acústica y sintetizadores y al final regresar al ascenso.

“Hipersomnia” cierra el círculo perfecto: una composición instrumental que está cargada de secuenciadores, loops y cajas de ritmos. La voz de Manuel se escucha por encima de todo, pero en el fondo nos mantiene atados un beat que se mezcla con la batería de Kenji. Y después sentimos que una mano nos jala desde arriba, y el resto de la canción es un viaje ascendente gracias al cual salimos a la superficie para respirar de nuevo, para despertar de esta pesadilla que no es pesadilla, de este sueño que se siente más real que la misma realidad y sentimos como “…gira el corazón, pierdo la razón”.

Sin duda es su mejor trabajo hasta la fecha, es el proyecto más denso y en el que me parece que lograr una cohesión que siempre es difícil de conseguir. Espero la segunda parte con un ansia enorme y agradezco de corazón el que un disco como este sea posible.

Kamasi Washington estrena EP

Un EP sorpresa en el interior del nuevo disco de Kamasi Washington.

El pasado 22 de junio a través de Young Turks, el músico angelino Kamasi Washington estrenó su obra maestra Heaven And Earth, un disco doble que también nos sorprendió con un gran secreto: ¡un EP en su interior!. La noticia fue revelada a través de las redes sociales por los primeros fans que adquirieron esta producción discográfica en formato vinilo y descubrieron que al abrir el empaque se encontraba este nuevo EP.

 

Días más tarde, el propio Kamasi Washington y sus músicos revelaron el misterio en un video publicado en sus redes sociales y demostraron cómo se tiene que abrir el empaque para poder disfrutar de este EP sorpresa llamado The Choice.

Mira el video aquí:

Con cinco tracks adicionales –entre ellos un cover de Carol King The Choice tiene una duración de 40 minutos y complementa las 2 H. y media de Heaven And EarthAunque en un principio solo estaba disponible a través de Apple Music, ya puedes escucharlo en todos los servicios de streaming.

Dale play a continuación:

C. Tangana estrena el clip "Bien duro"

Dale play al videoclip del madrileño que la está rompiendo en el género urbano.

Desde que lanzó Ídolo, C. Tangana se ha ganado al público español y mexicano con sus líricas y su ritmo. En esta ocasión ha compartido su nuevo sencillo "Bien duro", tema que contó con la producción de DVLP, popular en el círculo mainstream gracias a sus trabajos con Lil Wayne, Nicki Minaj, J Balvin y Eminem.

La canción de estilo tropical house nos habla de una noche loca llena de sudor y mucho baile, misma que busca crear una conexión entre Miami y España para demostrar que está dispuesto a comerse el mundo de la música urbana.

El visual bajo el formato Kodak Film estuvo a cargo de Roger González y la producción de Sauvage. En el metraje podemos ver la historia del español y una chica con la que sostiene una discusión y tiene un final inesperado.

Chécalo a continuación:

Antón Álvarez, mejor conocido como C. Tangana tuvo un espectacular show el pasado 3 de febrero en SALA, donde tocó algunos de sus temas con alta carga de trap y hip hop. Lee nuestra reseña aquí.

En entrevista con Indie Rocks! el cantante español, previo a su presentación en la CDMX, nos reveló por qué no cree en ídolos y qué piensa sobre el capitalismo que vive la industria musical actualmente:

C. Tangana ha estado muy activo en la música y presentó su mixtape Avida Dollars, material que cuenta con rolas producidas por Alizz, The Rudeboyz y Sky. Dale play:

Lana Del Rey comparte demo para el documental de Elvis

Foto Neil Krug/Elvis.com

El tema se creó antes de que se diera a conocer como Lana Del Rey.

Los filmes y documentales sobre figuras de la música siguen en aumento y ahora es el turno de que se de a conocer uno dedicado a Elvis Presley.

Bajo la dirección de Eugene Jarecki se estrenará de manera oficial The King en el que retratarán el impacto que tuvo el también llamado "Rey del rock" en la cultura americana utilizando testimonios de fanáticos y algunos expertos de la música.

Una de las participantes, en la cuestión musical, es Lana Del Rey quien desempolvó uno de sus demos lanzados hace bastantes años bajo el nombre de Sparkler Jump Rope Queen en su cuenta de MySpace. La canción se llama "Elvis" y la dio a conocer en un EP llamado True Blue.

Escucha un extracto a continuación:

El documental ya está en algunas salas de cine, pero en otros sitios se irá estrenando a lo largo de estos meses. Otros de los talentos musicales que aparecen en este filme son  Sigur Rós, Nicki Bluhm and the Gramblers, entre otros.

Checa el trailer a continuación:

Sessions de Vans: Semifinal II

Laphie se corona como la segunda finalista ante un público no tan conforme.

Con la ley seca de por medio y la lluvia que se ha convertido en una constante estos días, cientos de personas se dieron cita en el Foro Indie Rocks! para apoyar a cuatro bandas en la segunda de cuatro fechas de las semifinales de Sessions by Vans.

Eran las 20 H en punto y ya había una larga fila esperando a que el acceso iniciara. En el interior las bandas hacían su prueba de sonido y los técnicos calibraban los amplificadores y micrófonos para evitar cualquier detalle adverso durante las presentaciones que pudiesen influir de manera negativa en el performance de las agrupaciones que se peleaban un lugar en la final de este concurso organizado por la marca más icónica del skateboarding. Con el reloj marcando 42 minutos pasados de las 20 H, la gente comenzó a entrar en el recinto y podían verse fans de cada una de las cuatro bandas que llevaban playeras con el nombre de sus favoritos o letreros alusivos.

18 minutos después se dio inicio oficial a la noche y Hot Maries saltó al escenario con todo el girl power para hacer que los asistentes saltaran y bailaran al ritmo de sus canciones. Las cuatro chicas que integran la banda lograron quitarnos el tedio y ponernos a mover la cabeza y pies para acompañarlas. Buena ejecución y una propuesta que, a pesar de no ser tan novedosa, penetró en los oídos de las personas ahí reunidas para sacarles una sonrisa y dejarnos un buen sabor de boca con su presentación.

Se acomodaron los instrumentos y después de unos minutos de escuchar los clásicos del indie de los 2000 era el turno de Suite Paranoia, una banda que con ritmos cadenciosos y un vocalista de un protagonismo único logró que varios dejaran prejuicios detrás y se pusieran a bailar y gritar como si la noche fuera eterna. La temperatura subía y la línea de bajo que predominaba nos mantenía moviendo las caderas.

La tercera banda fue Jaibol, una agrupación con una trayectoria corta, pero fructífera y a la que acompañaba la mayoría del público. Los gritos y las porras no se hicieron esperar y cuando estas cesaron, la guitarras estridentes inundaron el lugar. La banda originaria de la CDMX encendió el ambiente y ni una sola persona en el foro se quedó sin saltar. El escuchar a las personas coreando las canciones y gritando frenéticamente me hizo olvidarme por un momento de que estaba en un concurso y sentir que en realidad se trataba del show de una banda ya consolidada.

La banda encargada de cerrar el ciclo de participantes fue Laphie, que también contaba con una gran cantidad de público y que con sintetizadores y rasgueos de guitarra creó una atmósfera ligera y llena de emociones que a varios nos pusieron los vellos de punta. La voz de su vocalista nos llevaba a un estado casi onírico al tiempo que la batería y el bajo nos traían de vuelta a la realidad. Con una ejecución casi perfecta y una presencia avasalladora de cada integrante fue la manera ideal de terminar con esta semifinal.

Era el momento de la noche, la banda invitada: Cardiel, estaba a punto de tomar el escenario y la gente se preparaba para eso. Miembros de las bandas concursantes y el público en general estaban ansiosos de ver al dueto más estridente que existe de aquí a Venezuela. La batería de Samantha Ambrosio estalló al unísono con la guitarra de Miguel Fraino y el público perdió los estribos: headbangueo por parte de algunos y un mosh pit minúsculo por parte de otros. Las playeras desaparecían de los torsos de algunos más comprometidos con la noche y mientras ellos se dejaban llevar por la vertiginosa música de Cardiel como si se encontraran dentro de un bowl y sobre una patineta; algunos otros se llevaban empujones y golpes inesperados. El trash y el punk, combinados con el fuzz y el rock psicodélico de la banda elevó el ritmo cardiaco de cada ente en el Indie Rocks! y así como vino se fue: en un segundo.

La noche llegaba a su fin y los presentadores tenían la tarea más delicada: anunciar a los ganadores. Así, entre zozobra y dedos cruzados Laphie se coronaba finalista entre la sorpresa de varios y el desconcierto de muchos. Sus fans y cercanos celebraban la victoria y yo emprendía el regreso a casa con una anécdota más de cómo la CDMX sigue siendo semillero de la música independiente y de artistas emergentes que algún día llegarán lejos y se convertirán en el soundtrack de toda una generación… porque como dijo aquel gran intelectual: “Imaginémonos cosas chingonas”.

15 de 'Cuatro Caminos' de Café Tacvba

Después de 15 años, Cuatro Caminos sigue siendo el mejor trabajo de la nueva era de una de las bandas mexicanas más importantes de todos los tiempos.

Para hablar de un disco como Cuatro Caminos, habría que hacer un recuento, un contexto. Un trabajo que apareció cuando la banda prácticamente ya lo había logrado todo; un debut contra-corriente para la época en 1992. Re ya había sido descalificado y revalorado como la obra maestra que es. Una Avalancha de Éxitos que en verdad se convirtió en sus éxitos en 1996. Una obra tan valiente, cerebral y pretenciosa que hoy es un trabajo de culto llamado Revés/Yo Soy también sin tanto reflector por el espectro consumista, pero venerado al fin. Eso sin mencionar su temprano MTV Unplugged, su recopilatorio y un también gran recibido Vale Callampa que a varios los hizo conocer a Los Tres de Chile acá en México. ¿Entonces qué seguía? Parece una broma, pero lo único que les faltaba era intentar ser una banda normal, y siendo Café Tacvba, vaya que era una tarea más difícil de lo que se planteaba en el papel. Porque ser una banda de rock en Latinoamérica es difícil, pues casi siempre se cae en moldes y conformismo que son más un golpe de suerte si llegan a salir ilesos de la prueba y que aún si se logra, difícilmente permanecen ahí y esto, para una banda con uno de los estilos más marcados e indelebles en la historia de la música en español, era arriesgar demasiado.

Pero contra cualquier pronóstico, sucedió. Y "Eo" fue una de las maneras más eficaces de demostrarlo, no porque fuera una pieza revolucionaria en su catálogo o algo de esa índole, sino porque de cierto modo era una vuelta a la raíz de la banda; de lenguaje desfachatado, de narración incoherente, de un Albarrán mordaz y divertido ocupando modismos y un doble sentido sano. Era la manera más audaz de presentarse y llevar implícito el salto con batería natural e instrumentación tradicional. Se puede entender que a Café Tacvba, su pasado le sirvió como entera experiencia para dar este salto tan necesario y hacerlo de una manera que más que hacer rock alternativo, tuvo un sonido y lenguaje universal, no es coincidencia, que estos Cuatro Caminos fueron más allá de las fronteras de México y territorio sudamericano, pues de esta placa se hicieron muy favorables reseñas incluso en webs en inglés o la misma Pitchfork.

"Cero y uno" fue otro golpe sobre la mesa para ratificar el paso que, así como la llegada a lo estándar por parte de la banda, llega a su estribillo para hablar en binario resaltando lo que hay más allá de la vista. El sonido cargado, la robustez proporcionada por la batería así como unas guitarras y bajo que suenan un tanto saturadas entraban en sinergia con la rasposa voz de Albarrán dejando ver que él también era universal al micrófono después de durante tanto tiempo haber cantado desde son veracruzano, trío o música disco. Después, tenemos un sencillo tardío, pero que hizo mucho ruido desde la salida de Cuatro Caminos, se consolidó con el lanzamiento del video casi un año después y prácticamente sigue vigente al día de hoy; "Eres" fue la canción que trascendió tiempo y espacio, que a base de ese verbo enuncia el valor sentimental hacia una persona y que además se ejemplifica perfectamente con un video que captura de manera exacta, el contexto de la época en que fue creado. La balada rock alfa por la que será recordada la voz y el papel como compositor de Emmanuel Del Real dentro de la banda y más allá de fans o allegados a la música, porque estamos hablando de una especie de "Wonderwall" en español. Evidentemente en esa línea sería imposible dar otra campanada del tamaño de los singles previos, pero estando ante un trabajo tanto de canciones potencialmente exitosas para frecuencias pop, también lo es ante el análisis y el desafío para incluir cosas todavía más asombrosas; así el caso de "Puntos cardinales", impregnada de ese funky con burbujas electrónicas, con un desenvolvimiento colorido, pero sobre todo, dinámico y ágil.

Como toda gran obra, Cuatro Caminos también esconde sus tesoros más allá de lo presumible. "Mediodía" es otra de esas canciones que ha prevalecido en la memoria de sus seguidores. Su fragilidad en todas sus aristas y su percepción de la soledad un sábado por la mañana ante la escena de una felicidad a través de la ventana de su intérprete, llevan aún a creer que ante cualquier adversidad emocional, siempre hay cosas afuera para recuperar un poco de fe, especialmente con desborde glorioso en su recta final. La ascendencia ritual de "Hoy es" con ese aire tan Beatle sigue resonando y eferveciendo de manera espiritual y pacíficamente bélica. Con "Encantamiento inútil"Café Tacvba se atrevía a ser el Radiohead más introspectivo y alternativo a través de una voz profunda, piano difuminado y guitarras con batería que por momentos se endurecen enturbiando el entorno. Casi lo mismo se puede decir de una subsecuente "Desperté" y la concluyente "Hola adiós". Evidencia de un Café Tacvba manteniendo la versatilidad, el eclecticismo, incluso en esta formación más convencional y también más limitada, pero así apostaban con inteligencia sus cartas y sabían para dónde iba cada canción. Así, de lo Radiohead, se salta a una "Recuerdo prestado" que es mordaz, que es más infecciosa, que es el corte donde incluso Albarrán tilda su voz haciendo notar más esa rasposa garganta.

Aún con el estatus de clásico que por nada ponemos en tela de juicio, Cuatro Caminos no es el Re del nuevo milenio de Café Tacvba, porque aquí hay canciones que desentonan, que rompen la línea, que se escuchan más como un producto de la inspiración forzada. "Camino y vereda" parece por momentos no soportar su propio peso. "Qué pasará" se llega a cargar demasiado y hasta Albarrán llega a ser molesto. Por otra parte, los platillos de "Tomar el fresco" y su descuadrado ensamble suenan más como una ocurrencia que una composición, además son inexplicables y desatinadas esas palabras que Rubén escupe al micrófono en algunos versos. Sin embargo, ante ese dicho que dicta "la verdadera perfección debe ser imperfecta", parece que aplicarlo a este álbum funciona en el renglón de que sus lados más descompuestos, realzan sus virtudes, y después de 15 años, Cuatro Caminos sigue siendo el mejor trabajo de la nueva era de una de las bandas mexicanas más importantes de todos los tiempos, el punto de quiebre hacia su nuevo estilo que aunque no fueron partícipes del inicio de la ola; al menos como referente en español y en México, tuvieron que aparecer ellos para dictar el camino en varios sentidos, incluso para su propia carrera, que a partir de aquí, refrendó en un punto que siguió dando muchos nuevos éxitos.

Top 12: Los mejores videos de junio

12 videos, 12 años de Indie Rocks!: junio.

El mes de junio culminó y hubo muchos estrenos: sencillos, discos y sobretodo videos. Es por eso que, después de una larga discusión editorial con el equipo de Indie Rocks!, te compartimos una selección especial en nuestro #TopIR con los 12 mejores videos del mes.

Aquí verás “Alien”, el nuevo video de Die Antwoord en el que nos muestran las desventuras por las que pasa un solitario alien y su “amigo”, un insecto luminoso, en una realidad en la que aparentemente los extraterrestres conviven con el resto de humanos de manera no tan incluyente; “Hunnybee” de Unknown Mortal Orchestra, perteneciente a su más reciente álbum de estudio titulado Sex & Food“I Don’t Know” de BADBADNOTGOOD que describe el recorrido por las cinco fases del duelo: negación, enojo, negociación, depresión y aceptación; “Hielo” de Zoé, un audiovisual que destaca por su corte futurista y de ciencia ficción, en el que una misteriosa mujer le relata una historia a un viajero durante su recorrido por el desierto; “Lost My Mind” de Lily Allen el cual se grabó en un set giratorio; “Sólo falta lo mejor” de Adan Jodorowsky grabado como un experimento documental en donde los participantes –que fueron reclutados a través de las redes sociales del cantante– tuvieron la libertad de improvisar y expresar de forma real cada emoción; y muchos muchos más.

Lng/SHT en El Plaza Condesa

Hoy sí llegó…

Hace menos de dos años un mensaje de texto me llegó: “vas a entrevistar a un nuevo raper, se hace llamar Lng/SHT. Total, cumplí. Después de dos horas y media conversando, Gastón –el ex abogado– me confesó sus visiones y metas, sus técnicas y camino; fue allí donde catapulté su instinto. Hoy, 29 de junio, me ha demostrado que su estilo dejará un recuerdo en la historia de la música nacional.

Sold Out

Dos propuestas que cumplen sus propios anhelos dieron la bienvenida a todos los presentes que caminaban a paso ágil para no perder ningún momento; el primer El Plaza Condesa para estas tres propuestas, el primer concierto de los joviales: No Tiene La Vaca al inicio, Chingadazo de Kung Fu en segundo puesto; los estruendos de unas bandas soñadoras y primerizas dejan en alto los nuevos tópicos de nuestra moderna y serena actualidad musical.

Una pantalla en blanco se encendió con las siglas L.N.G.S.H.T., mientras unas escenas que exponían la capital o lo que figuraría un apartamento de soltero, Gastón Espinosa, mejor conocido como Lng/SHT entró. Cat Scratcho abrió su propia pista arrancó su primer show en El Plaza Condesa este 30 de junio. Con “Sin cuenta” a mitad del tema fue derrumbado: “Nunca había salido a un escenario y se me cortará la voz por querer chillar. Hace cinco años dijeron que no llegaría a ningún lado con esto; ¡lo logramos, cabrones! Y con ello arrancó su setlist: “Club de los 27” y “Wachadafunk”, mismo track que interpretó sin playera.

“Mis ojos están en el cielo, mis pies en el piso, no hay pedo, esta noche improviso” y así se descosió con “Francesca Carpinelli”. Minutos después, cató su nuevo tema: “La insoportable levedad del ser”. Una noche emotiva; un trofeo para este ex burócrata que surgió como una apuesta y ahora, está frente a El Plaza completamente lleno, con chicas llorando y chicos explotados. Aquel MC representante de esta nueva ola de rap contemporáneo estaba cumpliendo su anhelo: “¿Alguna vez soñaste con El Plaza?, me preguntaban. Siempre lo soñaba, respondí, pero nunca pensé se cumpliera”, confesaba el intérprete. Y con tanta euforia continuó con “Tanta tinta” feat Sabino y Adrián Salguero. De fondo, Bon Jovi era mezclado para explotar “ROMCOM”. Un chillerío.

“Un Vive Latino, un Lunario, ambos fue un estrés demente. Hoy no quiero ese estrés, hoy es una fiesta, solo quería divertirme con mis mejores amigos”. Y con esa revelación inició “Haciendo dagas”. Tratando de retomar la old school, “Comprendes Mendes” de Control Machete  se reproducía y, sin esperarlo, Fermín IV saltó al escenario para acompañar esta puta fiestota. Sin duda, regresó a los tracks de sus inicios como “Bestia” (olvidando la letra) y “Fresa” cantando a ras de su propio público.

Como medio tiempo de este inolvidable show, Cat Scratcho se reventó una rutina de scratch auténtica, rítmica y sumamente maestra. Al terminarlo en olajes de aplausos, de fondo Gastón gritaba: “¡Mamá! Graba esto. Aquí esta Margarita”. Nuevamente Sabino retozó a la tarima para juntos impulsar “Me puse pedo”.  Y así, en un hilo de tracks, rondas y rutinas, Lng/SHT agradeció: “Yo me paro aquí en El Plaza para darles las gracias; al chile” y con ello lograr concluir con los éxitos “Llaves, teléfono y cartera” y “El punk rock arruinó mi vida”.

 

Sessions de Vans: Semifinal

Blanco Gitano un digno ganador de la semifinal de Sessions.

Si bien el formato de concurso ha quedado un poco rezagado ya sea por la mala ejecución o porque pocas veces el premio es realmente trascendente, cuando se logra de buena manera es un ejercicio interesante y divertido. No hay que perder de vista que de concursos han salido bandas muy importantes como Molotov, Hong Kong Blood Opera o DLD (segundo lugar del extinto RDB).

Ahora el intento de VANS parece que va por buen camino, luego de una convocatoria y una serie de filtros, las semifinales se asomaron, y esta primera parte de la instancia convocó a una considerable cantidad de gente al Foro Indie Rocks!, cuatro bandas con su respectivo grupo de seguidores.

El formato muy simple, cuatro canciones por banda para conformar al selecto jurado conformado por el productor ganador de un Grammy Camilo Froideval, el periodista y director de WARP, Alejandro Franco y la directora de la Revista Marvin, Cecilia Velasco.

La batalla de jueves por la noche inició cuando saltó al escenario Moli Wave un proyecto que basa su sonido en sintetizadores y que se define a sí mismo como chill wave, una presentación que salió avante pese a la complejidad de inaugurar la noche, cabe mencionar que desde el inicio la gente se mostró comprometida con la causa, y recibió todas las bandas de buena forma.

El turno al bate era ahora para un trío de la CDMX formado por guitarra, bajo y batería, con un sonido agresivo y pegajoso, Manikie subió la energía y con rock and roll se bajó del escenario dejando un buen sabor de boca.

Blanco Gitano fue la siguiente banda y la más ovacionada, además de traer consigo a un nutrido grupo fans logró arrancar ovaciones a gente ajena a ellos, el quinteto de dream pop demostró que suena bastante bien en vivo y que tiene un buen manejo del escenario, y hasta el momento, parecía que había un claro preferido.

El favoritismo despareció cuando al escenario saltó The Wicked Ones un cuarteto de rock con tintes metalosos, que enseñó al jurado ser tremendos ejecutantes con un grupo de fans apoyando muy fuerte, canciones con mucha energía que remontan a veces un poco al glam, la banda bajó del entarimado entre gritos de “otra, otra, otra”.

Las cartas estaban sobre la mesa y solo era cuestión de que el jurado deliberara quién estaría en la siguiente ronda, pero mientras sucedía Tulkas fue el grupo invitado y regaló un show lleno de potencia como es costumbre, los queretanos sonaron de gran manera, y dejaron todo listo para la decisión final.

Con el escenario vació, el foro con gran entrada y el público exigiendo a su ganador, se anunció la decisión final, Blanco Gitano es quien tocará en la final para buscar su lugar el House of Vans, entre euforia de muchas y decepción de otros tantos la decisión estaba tomada, y la primer semifinal llegaba a su fin.

Si bien en una guerra de bandas todos buscan ganar, en realidad no es lo más importante, sino hacer tablas, tener retroalimentación y llegar a más público, así que desde ese punto de vista todas ganaron, aunque eso sí, la guerra sigue.