Ciudad: CDMX

#BESTIA2016 Cine Concierto: El hombre de la cámara

#BESTIA2016 Cine Concierto: El hombre de la cámara. El ojo cinéfilo que todo lo ve.

Como en su edición pasada, Bestia Festival incluye dentro de sus actividades un perfecto matrimonio entre la música y el séptimo arte, a través del cine concierto en donde se invita a artistas de vanguardia a musicalizar alguna obra cinematográfica clásica. Con la diferencia de que en esta ocasión se incluyen dos cine conciertos, el primero de ellos celebrado justamente en una sede la cual en años recientes se ha caracterizado por fungir como un santuario para las nuevas corrientes y tendencias: la Cineteca Nacional.

En la Sala 3 de esa institución, la noche del viernes se proyectó El hombre de la cámara (Chelovek s kino-apparatom, Unión Soviética, 1929), clásico de la cinematografía rusa y uno de los bastiones más importantes del cine vanguardista y experimental, así como el trabajo más representativo del cineasta Denís Abrámovich Káufman, mejor conocido por el seudónimo de Dziga Vértov.

Para musicalizarla, se contó con la composición original y la interpretación en vivo de Julian Bonequi (especialista en la improvisación y quien cuenta con una vasta experiencia y publicaciones a nivel internacional desde principios de los noventa); Dora Bartilotti (Licenciada en Diseño y Comunicación Visual en la Facultad de Artes y Diseño de la UNAM e integrante del colectivo mexicano transdisciplinario #FFFF) y Fernando Vigeras (autoridad en lo referente a prácticas sonoras experimentales y formas de creación vinculadas a la libre improvisación y el arte sonoro), quienes armados con variados instrumentos de percusión y electrónicos, se dieron a la tarea de crear un inusual soundtrack para una película muy sui generis.

Después de los tres llamados de rigor, los músicos se colocaron en sus respectivos lugares donde su equipo e instrumentos ya se encontraban dispuestos. Se apagaron las luces, y tras un breve anuncio del otro cine concierto (que se llevará a cabo el domingo próximo) y en cuanto aparecieron los primeros créditos del filme en pantalla, dio inicio su ejecución.

En íntima concordancia con este documental, el trío ofreció una sucesión de sonidos en cascada y variopintos, que en su conjunto creaban una atmósfera propicia para el torrente de imágenes con el cual Vertov captaba todos los aspectos de un país ya inexistente, de una utopía histórica. Así, mientras una serie de discordancias y sonidos estridentes acentuaba el trajín imparable de una ciudad con sus vehículos y gente yendo aprisa hacia algún lado; unos sutiles cantos femeninos fondeaban escenas de esparcimiento en la playa, como cantos de sensuales sirenas invitando a relajarse y entregarse a un solaz descanso.

Como si de un ojo incansable se tratase, la lente de Vertov capta de modo exhaustivo todos los aspectos de lo cotidiano en su nación sin que nada escape a su meticuloso escrutinio, y a través de un complejo collage construye, sin textos ni explicaciones de por medio, un mosaico completo de la vida y la sociedad de esos años, con sus esplendores y miserias, su vida vertiginosa y sus remansos de paz, sus catástrofes y sus momentos divertidos, pero sobre todo, registra los anhelos e ideales de un pueblo ensoñando un futuro mejor. Y en un peculiar juego de espejos, vemos como estas imágenes son proyectadas a un público en un cine que las ve del mismo modo que de forma simultánea les vemos a ellos. El cine dentro del cine.

Conforme el largometraje llegaba a su clímax, igualmente la ejecución del ensamble alcanzaba un paroxismo sonoro, incrementando el volumen a niveles casi ensordecedores, y en la recta final, en la pantalla apareció una gigantesca lente a través de la cual un gran ojo miraba a la concurrencia. Era el ojo del cine que todo lo ve, todo lo analiza y del que nada se escapa.

De este modo concluyó el cine concierto, así como el segundo día de actividades de Bestia Festival.

Devendra Banhart en El Plaza Condesa

Devendra Banhart: El juglar, el loco apasionado.

La noche comenzó temprano en el Plaza Condesa y poco a poco la asistencia fue llenando el recinto. Afuera algunos cuantos despistados buscaban boletos de última hora; adentro los más previsores aseguraban el espacio más próximo al escenario. Se respiraba un ambiente entusiasmado.

Minutos antes de las nueve dos músicos entraron a escena. El primero Gregory Rogove  –voz y cuatro venezolano– , tras él, Todd Dahlhoff en el bajo y otros instrumentos. En un set breve, la música y sus voces se tejieron armoniosas con un sonido casi perfecto que en ocasiones se veía ensombrecido por un murmurar constante (en los lugares grandes hay quienes no saben guardar silencio y simplemente llenan sus momentos de fotos para saber que estuvieron en algún sitio).

Apenas finalizando los primeros temas, Gregory se despojó de sus zapatos y descalzado de toda pretensión  nos invitó al desenfado de la complicidad, regalándonos como despedida una versión de “To The Love Within” tema original de Megapuss, banda que comparte con Banhart. 

La expectativa iba aumentando al paso del tiempo, sobre el escenario cinco islas formadas de diversos instrumentos vaticinaban un sonido gigante. De pronto: luces fuera.

La figura alargada de Devendra fue la primera en pisar el escenario. Con una rosa blanca en la mano se dirigió a nosotros y desató la magia. “Middle Names” de su disco Ape In Pink Marblefue la primera de una larguísima lista de canciones que a lo largo de la noche nos transportaron por un exquisito balancín de emociones.

Le siguieron “Mi Negrita” –cuya letra pareció olvidar en un principio, pero recuperó al instante con la ayuda de una audiencia hipnotizada por su carisma– ; “Golden Girls”  y “Theme for a Taiwanese Woman in Lime Green”, tema en donde algunos tropiezos de Noah Georgeson en la guitarra, rompieron momentáneamente  la concentración de la banda –pequeño imperfecto que pronto se sumió en el olvido tras la sonrisa de Banhart–. Se sumaron“Brindo”, “Saturday Night” y “Daniel” (una de las mejores interpretaciones del set).

En una pausa y su voz nos lanzó el primer hechizo de la noche:  ‘Are you  guys ok? ¿Tranquilos… no tranquilos? No importa cómo estés, solamente importa que estás aquí’. Y así fue, la velada entera las barreras se borraron y la amistad pareció el único estandarte. La banda abandonó el escenario para reglarnos un tiempo en solitario con Banhart. Un tiempo hecho para nosotros, para complacernos: ‘Por fin estamos solos’.

Una a una las peticiones aparecieron aleatorias entre la multitud: “Shabop Shalom”, una estrofa de “Santa Maria de Feira”, otra de “Freely”, una versión reducida de “This Beard Is for Siobhán” . Pedazos de canciones, bosquejos sacados del recuerdo tarareados con sonrisa para hacernos felices. Y nos volvimos locos de contentos, porque es bello que el artista se muestre vulnerable, entregando sin miedo y con genuino cariño lo imperfecto, y es que eso lo regresa a su cualidad de humano acercando a su audiencia sin condiciones, como cuando te sientas en círculo con los amigos y guitarra en mano; simplemente compartes.

En “Quédate Luna” nos vimos arrastrados al sonido de la misma forma emocionada que él se entrega, navegando en el vaivén de un momento que nos perteneció a todos mientras su voz luminosa reiteraba ‘el mundo es tuyo’.

“Good Time Charlie” y “A Sight to Behold” también formaron parte de este bloque en solitario. Los teléfonos poco a poco fueron desapareciendo del panorama.  Devendra fue capaz de lograr complicidad en un espacio tan grande, era notorio el general encantamiento de caras sonrientes y ojos cristalinos (algunos húmedos de nostalgia). Su figura de trovador nos robó el aliento.

“Linda” con su espesa tristeza trajo de vuelta al resto de los músicos, transportándonos al imaginario de una mujer solitaria. Nudo en la garganta. El momento más intenso del concierto.

“Für Hildegard von Bingen”, y “Fancy Man” nos sacudieron la bruma, regresando nuestro cuerpo al movimiento ondulante del baile. Siguieron “Celebration”, “Baby” y una versión más rápida y cruda  de “Long Haired Child” en donde la personalidad de Banhart traslució un poco más de Cave que de Donovan o Cohen.

“Lover” fue anunciada como la última canción y la despedida se anticipó con las siguientes palabras: ‘No somos representación de los Estados Unidos, no somos una representación de Trump, ustedes son nuestra familia, aunque si tenemos vergüenza… pero más que nada tenemos amor. Gracias por estar aquí esta noche’. El encore corrió a cargo de “Rats” y  “Carmencita”.

Durante más de hora y media Banhart fue de un lado a otro del escenario viéndonos a los ojos, contagiándonos con sus bailecitos extraños como si de niño curioso se tratara; cambiando de piel al instante, transformándose con su alma de juglar, de loco.

Comisario Pantera en el Teatro Metropólitan

Operación sold out, el Comisario Pantera llega al Metroplitan.

Y entonces miles de papeles cayeron sobre los afortunados que lograron comprar boletos –de una fecha sold out– en las primeras filas del Teatro Metropolitan. Esto al momento de sonar “Amiga” que fuera la última canción del setlist de 30 canciones, ¡TREINTA! ¿En qué momento los nativos de Milpa Alta pasaron de las cuatro canciones de su primer EP Como la Vez Primera a este rush de éxito tras éxito? (Entendiendo éxito, no como el hecho de estar en listas top de sencillos, sino la capacidad de hacer cantar a una personas con los ojos cerrados “que seas muy feliz. ¡oh oh!” con todas las fuerzas haciendo su voz una sola con la de Darío Vital, principal responsable de los coros eternos y las miradas profundas).

Pues han pasado apenas seis años desde su formación. Cabe señalar que estas cuatro canciones estuvieron dentro de las que sonaron en las cabezas y las butacas replegadas pues pocos fueron los momentos en que los más de tres mil asistentes estuvieron sentados tras dos encores y el terreno que preparado por los muchachos de Costeraelevaron el entusiasmo del variado público, pues desde parejas a punto del turrón hasta abuelitas con nieta en los brazos bailaron al son de “Él Comi” como llaman de cariño sus fieles seguidores a Comisario Pantera.

Un Piojo aventurado a salir de la parte trasera en ocasiones, una de ellas por tener como baterista invitado a Ángel Sánchez de Enjambre en “Disco Casino”, canción que tenían ya mucho tiempo de no tocar; otro invitado a la fiesta fue Daniel León de Odisseo que hizo lo suyo en “Murasaki”. En contraste a esta euforia, la calma se sintió al sonar “No Hagas Caso de la Gente”, último sencillo y parte de su nuevo disco que saldrá el próximo año, no porque faltara energía sino porque las personas estaban concentradas en asimilar una nueva garra de Él Comi.

Vayamos al inicio, con los murmullos de las personas antes del show, deseando que la banda toque la canción que le dedicó el antiguo ser amado, revivir experiencias a través de canciones y corear la alegría y el dolor al mismo tiempo que los demás. Pocos fueron los que no tenían boleto al momento de hacer la fila para el ingreso pero logré encontrar a una persona que veía sin parar su teléfono pues quien la había invitado no había llegado. Pasó pues con ese más uno que a su servidor le dieron; lo curioso de todo esto es que esta persona trabaja como seguridad en conciertos  lo cual me dejó pensando en que cuando dejemos de ver algo que amamos como un trabajo estaremos perdiendo lo más valioso que tenemos, y como diría la primer canción que sonó el viernes dos de diciembre: “Niña disfruta lo que estás viviendo, la vida se vive sólo una vez”.

Visita el Facebook de Comisario Pantera para seguir todas sus noticias.

Floating Points DJ set en Foro Normandie

Floating Points (DJ Set): Sumersión a un océano de ritmos exquisitos.

Floating Points lleva ya algunos años siendo uno de los DJ's más místicos e infravalorados del mundo. Sus sesiones pinchando discos o en versión live act son de las más aclamadas en festivales europeos y por fin teníamos la oportunidad de presenciar uno de sus DJ Sets en la Ciudad de México.

El evento, realizado el 1 de diciembre de 2016 en el recién re-abierto Foro Normandie estuvo a cargo de las productoras Dynamic Waves y Get Move, esta última celebraba su octavo aniversario y es famosa por haber traído por primera vez a artistas de la talla de Tale Of Us o Dixon por lo que siempre han sido sinónimo de calidad.

El acceso inició a las 23:45 debido a unas pequeñas fallas en el audio y que dieron un poco más de tiempo para que Floating Points dejara todo listo para iniciar a las 00:15 horas. Comenzó su set con música muy diversa, empezando por algo de jazz, para después ir a una breve secuencia de ritmos latinos / afroamericanos, y finalmente terminar la primera hora de su show con varias canciones de rock psicodélico y algo de disco y pop en las cuáles destacó "Feel So Real (Won't Let Go)" de Patrice Rushen.

Un vídeo publicado por Axel Ochoa (@donmorro) el

Para la segunda hora de su sesión le subió un poco el ritmo al asunto y comenzó a pinchar bastante house noventero que comenzó a agitar a los presentes de una manera más ordenada y planificada. Tracks como "Sandman" de Blue Boy fueron parte de la segunda hora que no dejó de lado ritmos disco con tracks como el clásico de los 70 de Candio "Rock & Shuffle (Ah-Ha).

  Un vídeo publicado por Axel Ochoa (@donmorro) el

Para casi el momento de llegar a la tercera hora de show, Floating Points nos deleitó con el track más increíble de la noche: "Future (Kenny Larkin Tension Mix)" de Kevin Saunderson Ft. Inner City. Un track totalmente "Made In Detroit" de tres de las leyendas de la ciudad cuna del Techno. El resto de la noche Floating Points continuó mezclando diversos ritmos y sonidos, creando todo un viaje por su colección musical, y nosotros siendo privilegiados por eso. Para terminar, debo mencionar algo muy importante: Floating Points pinchó toda su sesión con viniles, algo que se agradece, se disfruta y se aplaude a quien lo haga porque es algo bastante complicado y una técnica que cada vez se utiliza menos en el mundo de la música electrónica.

Un vídeo publicado por Axel Ochoa (@donmorro) el

La iluminación del Foro Normandie no estaba apta para tomar fotos durante el DJ set de Floating Points.

Communión en el Foro Indie Rocks!

Pop suavecito para soltar fantasmas.

Alexa Hakin y Diego Suárez parecen haber nacido para realizar música juntos. Su química en el escenario y los temas que componen crean una atmosfera de complicidad y dream pop.

La historia de Communión se remonta a más de una década cuando Alexa tenía 10 años y conoció a Diego. Años después ella fue corista de Bengala en su última gira, justo antes de mudarse a Nueva york para estudiar diseño. Finalmente el Dios del pop los unió en Topetitud (Estudio de Molotov) y ahí la magia no se hizo esperar más. A partir de ese momento el dúo no paró de componer música durante ocho meses, proceso que ellos definen como “hablar, sin tener que hablar”.

“Nos tardamos un rato en presentar el disco. Es esta maldita independencia”, dijo Alexa antes de interpretar “Lejos de la gente”, sencillo que lanzaron en junio de este año.

A finales de abril de este año Communión presentó de manera informal su disco en el Centro Cultural de España en México cuando fueron teloneros de la banda española Dorian, pero necesitaban un show propio en el que pudieran…

Invitaron al escenario a Edi para que tocara el bajo durante “Gusano”, tema que el integrante de Liquits donó al dúo, según lo explicó Diego. Lo cual es evidente pues el ritmo de la melodía tiene el sello característico del trío. Posteriormente acompañó en el mismo instrumento Tito Fuentes de Molotov con el tema “No queda nada”.

Un público pequeño, pero apasionado se desgarró el alma y la garganta coreando a todo pulmón “Explosión”, “Universo”, “Me dejas caer” y “Soltando fantasmas”, tema que forman parte del primer disco de Communión: Soltando fantasmas.

La encargada de abrir el Show fue CocóCecé, una morrita de 19 años originaria de Chihuahua, que se sentía muy orgullosa de a su corta edad poder tocar en el Foro Indie Rocks! Cassandra Balcazar presentó su primer Ep Merópili con canciones como como “Instinto”, “Bestias de ciudad” y “Marginado”, su primer sencillo.

Los encargados del baile fueron Big Big Love que a pesar de algunas fallas técnicas con sus sintetizadores lograron prender al público. Su sencillez y dedicación es evidente en el escenario pues ellos armaron y desmontaron sus instrumentos al principio y termino de su presentación.  

Santiago Mijares, vocalista de la banda comentó que para ellos era una noche muy importante pues él fue alumno de piano de Diego, por lo tanto para él era un honor poder compartir el mismo escenario.

Fue una noche de bandas emergentes y pop suavecito hecho para bailar y soltar los fantasmas.

#Aural2016: Colin Stetson, Sarah Neufeld y Anna von Hausswolff en el Lunario

Festival Aural: Una muestra que trasciende el showbiz.

Después de cinco años, el Festival Aural ha transmutado y evolucionado para posicionarse como uno de los espacios de música experimental más esperados de la ciudad; es aclamado por verdaderos melómanos debido a las diversas exploraciones sonoras que propone año con año. Debido a su excelente curaduría, el festival trasciende los eventos masivos del showbiz, para acercarse al público de una forma más íntima e incluyente, ya que podemos disfrutar de presentaciones gratuitas en diversos puntos de la CDMX.

El Festival Aural es reconocido por su excelente programación musical, y esta quinta edición no podría ser la excepción. A lo largo de estos días podremos disfrutar de una valija cargada con una selección ecléctica compuesta por 30 artistas de diversos países –incluyendo México– en donde las diversas propuestas musicales oscilan entre el avant-garde, el post-metal, el noise pop, jazz, y el minimal, entre otros géneros y disidencias auditivas que llegarán como una brisa a nuestros oídos tras la resaca del #CC2016.

El primer día arrancó con las experimentaciones sonoras del estadounidense Aiki Aubrey Lowe, y con la improvisación performática de Okkyung Lee + Andy Lampert (Corea/EU), la noche concluyó de una manera espectacular en el Foro Indie Rocks! con la presentación de Bitchin Bajas (EU) fundada por Cooper Crain, quien nos acercó a la más pura esencia del dronespace, implantando clústers repetitivos en nuestras neuronas hasta dejarnos en una hipnosis colectiva; para dar lugar a una sesión más orgánica y jazzera con el trío argentino Ricarda Cometa, cerrando con los ritmos enérgicos y la psicodelia reverberante de OOIOO.

El segundo día fue uno de los más esperados por el público y los seguidores del Festival Aural, con la presentación del dueto conformado por el saxofonista Colin Stetson y Sarah Neufeld, violinista de Arcade Fire, quienes se apoderaron del escenario por casi una hora, entre jams improvisados y ritmos sincopados, en donde la voz de Sarah se fusionaba con los instrumentos, estableciendo un diálogo etéreo y delirante logrando una perfecta composición con ritmos metálicos y repetitivos, envolviéndonos entre el steampunk, el ambient y el post-rock hasta crear una atmósfera fantasmal y onírica.

La noche concluyó en un mood gótico-dreamy, con la presentación de la multiinstrumentista sueca Anna von Hausswolff, y su característico estilo ethereal noise melódico, con toques de folk y otras mezclas paganas, enganchando plenamente a sus fans con sus vocalizaciones que evocaban a un banshee salido de algún bosque nórdico; entre los temas que tocó destacaron: "Pomperipossa", "Evocation", y "Stranger".

Mañana, los amantes del metal, el post-hardcore, y otros decibeles más duros, podrán escuchar a Godflesh, Simulacrum y Cleric, en el Lunario del Auditorio Nacional en punto de las 9:00pm. La clausura de esta gran muestra, será un aquelarre sonoro que durará todo el día comenzando en punto del mediodía con un concierto gratuito en Casa del Lago, a cargo de Edbrass, Omar Fraire, Sanjuana Vega y Rolando López, y cerrará la noche con broche de oro, con una presentación especial en donde se proyectarán siete cortometrajes del cineasta francés Georges Méliès –algunos jamás presentados en México–, musicalizados  por un ensamble conformado por el tecladista John Medeski, el guitarrista Lee Ranaldo (Sonic Youth), el baterista Kenny Grohowsky (Abraxas) y el bajista Mike Rivard.

Como podemos notar el #FestivalAural2016 está con todo, y trae propuestas para todos los gustos e inclinaciones musicales y nos demuestra cómo un festival puede tener ese equilibrio entre calidad, interesantes propuestas musicales, buena logística, inclusión y apoyo al talento nacional.

Kurt Vile en El Plaza Condesa

Kurt Vile regresa a México para presentar su sexto album.

El cantante, compositor y multiinstrumentalista Kurt Vile, lanzó B’lieve I’m Going Down, su más reciente álbum de estudio en septiembre del año pasado, un disco con muy buena recepción crítica que nos entregó algunos cortes como “Pretty Pimpin”, “Life Like This” y “I’m an Outlaw”.

Ahora, el originario de Pennsylvania acaba de anunciar que se presentará nuevamente en la Ciudad de México el próximo 4 de febrero de 2017 en El Plaza Condesa ubicado en Av. Juan Escutia 4, en la colonia Condesa.

Los boletos estarán disponibles a través del sistema Ticketmaster a partir del lunes 5 de diciembre y tendrán un precio de $450 en pista, $600 en palco y $700 en balcón.

Ya lo sabes, no te puedes perder de Kurt Vile en vivo, aquí abajo te dejamos Paralellogram, su más reciente EP para que te aprendas todas sus canciones que, junto a los otros éxitos del cantante, sonarán esa noche.

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kurt vile b

Nothing por primera vez en México

Nothing llega a la Ciudad de México para una presentación en el Caradura.

La agrupación originaria de Philadelphia pisa por primera vez nuestro país para promocionar su disco Tired of Tomorrow, el cual lanzaron a principios de este año consiguiendo el aplauso de sus seguidores y de la crítica especializada. Este segundo álbum de estudio los consolidó como uno de los proyectos más sobresalientes dentro del género del shoegaze.

Nothing band 2016

Durante la presentación de Nothing podrán escuchar tanto temas de Guilty Of Everything como del nuevo disco, ambos fueron lanzados a través del sello discográfico Relapse Records consiguiendo atraer la mirada de todos en poco tiempo

Además la banda invitada es No Somos Marineros, un grupo con gran trayectoria dentro de nuestro país, muy recomendables por la energía que proyectan en el escenario. Es probable que toquen, en su mayoría, las canciones de su último álbum llamado Lomas Verdes. Mostrando un estilo más oscuro y reflexivo.

No Somos Marineros 2016

#BESTIA2016: Concierto acústico en la Vasconcelos

#BESTIA2016: Concierto acústico. El Leviatán se levanta.

Debajo de la Mátrix Móvil, la monumental osamenta de ballena concebida por el artista plástico Gabriel Orozco, que cuelga sobre el pasillo principal de la Biblioteca Vasconcelos y se ha vuelto ícono de la misma; se celebró el evento inaugural de la edición 2016 del Bestia Festival.

Al igual que el año pasado, las actividades fueron iniciadas con un concierto acústico. En esta ocasión, se trató de la interpretación de una pieza original del músico experimental norteamericano Jim O’Rourke, intitulada Happy Days, la cual fue reversionada por un grupo de intérpretes conformado por Misha Marks, Bradford Bailey, Iván Cruz, Jacob Wick, Juan Cristóbal Cerrillo y Ramón Del Buey.

A las siete y quince de la noche, y tras una breve introducción y explicación, e iniciando lentamente, con sutiles sonidos de cuerdas, dio principio el recital. La composición original de O’Rourke dura poco más de 47 minutos por lo que la obra exige mucho de quienes la interpretan.

Además del público que asistió específicamente a la presentación (dispuesto en círculos alrededor del escenario), también se encontraban usuarios habituales del recinto, así como empleados y algunas familias que deambulaban por el lugar. Todos ellos presenciaban lo que allí ocurría ya fuera desde los lugares donde estaban trabajando o estudiando, en los pasillos aledaños o bien, desde los pasillos superiores, donde se encuentran los cientos de anaqueles rebosantes de libros. Algunos de pie, otros recargados en una baranda, otros más sentados en algún recoveco… todos atentos al improvisado stage.

De a poco, la ejecución del sexteto iría en crescendo, produciendo sonidos ensordecedores que inclusive saturarían el audio local. Tal experiencia excesiva y un verdadero tour de force auditivo no fue resistida por todos, y algunos de los espectadores abandonarían sus asientos o se apartarían del lugar.

Conforme la composición alcanzaba momentos épicos, algunos instrumentos parecían replicar el llamado o rugido de una bestia enorme, dando la impresión de que el colosal esqueleto suspendido sobre el público fuese a cobrar vida, y a empezar a mover sus enormes aletas. Una sensación alucinante.

Gradualmente, las aguas serían de nuevo mansas, y los músicos volverían a los ritmos suaves y sutil melodía de un principio, los cuales irían languideciendo paulatinamente hasta desaparecer. La pieza llegaba a su fin, así como el concierto mismo, seguido de una ovación de aquellos que decidieron quedarse devotamente hasta el final. Así es como el fin marcaba el inicio, y la titánica Bestia no ha hecho más que despertar, para acompañarnos en unos días de prometedoras exploraciones sónicas.

TITÁN en El Plaza Condesa

Foto de portada: Selene Ortiz Tolentino (SOT) / Cortesía

La Dama Fina de Titán nos hizo suyos anoche en El Plaza.

Ocho en punto de la noche, colonia Condesa en total pesar y oscuridad, resaca del tránsito; espectadores de todas edades, estimas y olores, llegaron al venue (drags, señores de edad avanzada, monos araña, pubertos, youtubers).

El aura de concierto mexicano con el característico silbido de “cacaro”, anuncia la euforia y desesperación del público, el ansia del inicio del ritual. El Plaza, recinto de excelente acústica, esparce los murmullos de fans que habían llegado temprano; una intensa luz roja alumbra el escenario decorado con una gran tela tornasol negra, color de metal precioso, donde proyectado se leía TITÁN DAMA FINA. Los ojos del búho desde la altura observan las conversaciones presentes y en réplica, sobre el próximo concierto a asistir, “Lollapalooza, Trópico, Devendra”, se escucha.

La gente empieza a reaccionar con más entusiasmo, comparado a ese tres de diciembre del 2005 en el Lunario del Auditorio Nacional, cuando el TITÁN y María Daniela presentaron disco, con invitados: FACA y Miki Guadamur, noche de aquel sello Nuevos Ricos EMI (creado por Lede y el artista gráfico Carlos A. Morales); esta vez el público se sentía más eufórico, el magno escenario lucía más instrumentos y producción; los clásicos teclados Roland de Emilio; un micro Korg; synth Novation-Bass Station; dos amplificadores Valve Reactor Vox; dos baterías Ludwig Vistalite Series anaranjadas con drum pads Roland, un magnífico Mellotron M4000D; JD-Xi Red Roland; piano vertical Yamaha, bajo Epiphone Jack Casady, MS-20 mini Korg, MPC; los últimos cuales Lede utilizaría para hipnotizar al público, sin olvidar la Les Paul Black Beauty que patearía con su sonido rudo a momentos, y cetáceo en su cadencia final; y no olvidar ese Les Paul Ebony bass, que utilizará Emilio en el penúltimo set.

Son las  nueve con 10, el escenario se oscurece, se escucha una voz del lado izquierdo, es Jay dando comienzo al decir, con una voz sensual, misteriosa: “Agárrense, inicia la noche más oscura”, al ritmo de "Himno".

Oda a la alegría, fragmento del cuarto movimiento (Allegro assai vivace) de la novena de Beethoven, ejecutada por síntesis modular, la cual haría perder la cabeza a Alex DeLarge.

“Estábamos cambiando, cambiando, eso dejando partes de lado agregando loops rítmicos, haciendo que sonara más parecido a como nosotros lo oíamos y haber recibido el ejemplo, el disco más oscuro”, Jay sentado en el mellotron exclama.

¡El Rey del Swing!” Los estrobos se manifiestan a convulsionar,  el público siente que el disco no es nada  comparado a la sensación liveLede explota su voz al gritar: “Ella. Ella echa fuego”.

Mientras Church bailaba completamente poseída, inmolada por luces robóticas, estrobos, ondas sonoras y la intensa vibra del público, él TITÁN había derrumbado el Tártaro, una luz azul iluminaba a Jay en sus cadencias del bajo, memorable taping .

Siobhnan Fahey se adentra al escenario; luces frías, morado, azul y turquesa. Comienza "HelL.A.",  Venus y Bananarama quedan a lo lejos en lo heredado al look de Bleached o Warpaint. Siobhnan y el estilo que habita en ella, evolucionaron a la piel de diva sensual y oscura, estética de de imaginario fílmico Ed Wood. Su voz un poco gastada con suprema  ecualización. El bajo que maneja Acevedo excelso, como el virtuosismo de Jay en la batería, total Coloso destrozando mundanos.

La energía de las baterías, de TITÁN son inigualables en vivo, pero en esta ocasión  superaron expectativas. En  "Apache", Julián Lede con esos ejemplares bajos del MS-20, Acevedo generando los agudos en el microkorg,  para crear,  junto a esas “batacas” duras, unos solos de batería con glitch que trauma a cualquier ingeniero de sonido, por la belleza sonora del error.

"Tchaikovsky"el ejemplo perfecto, de cómo una banda se reinventa en vivo, Ximena Sariñana lo constaba, como parte del público, ondeando la cabeza disfrutando de los titanes  y la vibración de las cuerdas. La potencia de la Black Beauty, opacada por el Jack Casady. El público gritaba: “Te amo Jay”.

El venue a oscuras, el público coreando "P.E.C" y trolleo por parte de la agrupación, que guardó silencio. Segundos después la voz de Acevedo se escucha diciendo “Puta madre, yo iba en en un dragster güey”.

Empezaron los hitos, el público lo agradeció, y se noto cuando la gente empezó a ondear, con una ligera intención de armar slam al sonido del novation de "Odisea 2001", el recinto empieza a retumbar. La gente excitada, Julián echando el solo en "Space chemo",  el blues en el bajo haciendo un guiño a esos 70 Space chemo,  el slam se había armado.

Egyptian Lover entra a escena, "She Likes the Music", moviéndose al rapear como todo un  egyptian soul fucker. En algunos comentarios el público mencionó a burla “es Alejandro Céspedes”.

"Corazón" gritaban los fans. Church se veía asomada en la parte lateral del escenario, y mientras comenzaría ese surf  de antaño pasado por electricidad, "1,2,3,4" y la Dama en la batería se hace notar.

En un momento Bach llegaría con esa tocata y fuga,  "Arahant" comenzaría  y Church seguía poseída. Domesticado el público por el bajo del kick drum. "Dama negra" se haría presente al pendejear a Daniel. Después todo estaría en "Sangre", coloreado por la intensa luz roja y la decepción de la noche en "Dark Rain", pues el supuesto invitado mencionado en redes sociales, Gary Numan, apareció solo como proyección en la tela tornasol. A momentos La Dama parecía cantar, ¿acaso era Gary Numan en su faceta de baterista, escondido tras una máscara de mujer?

"Dama Fina", el final, todos empapados en oscuridad.
La tela tornasol coreaba en subtitulos: “Solo quiero dama fina”.
Abruptamente la agrupación deja de tocar y se retiran con un gracias.
Se escucha  un grito: “Con eso me salen, mejor no hubieran regresado, ¡culeros!”
El público  pedía encore, Sariñana se unía al grito de fan.

Tras regresar la banda, agradecen. Jay presenta a los músicos invitados, agarran los instrumentos, se escucha un pequeño jam que recordaba la vibra del Terror Disco,  y así comenzó el track más esperado de la noche: ¡Corazón!, los  estrobos a tope, Jay en el piano cuadrado, mientras Julián hacía que su guitarra sonara como cetáceos a punto de aparearse; después Jay pasaría a la batería, Emilio al bajo para  montar un solo épico e interminable, que cansaría a Julián Lede a tal grado que desesperado, al estilo de su Majestad Imperial les gritaría le pararan. Abandonó el escenario, al depositar pasiva agresivamente la Belleza Negra  frente al amplificador Vox, después del último remate de Jay, así se despidieron del Plaza con una onda viciada por retroalimentación en la noche más oscura.

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