Corona SunSets: La mejor fiesta de verano, con la mejor buena vibra en Acapulco.

A lo lejos, desde la ventana del hotel, veía un tremendo espacio con muchos detalles de decoración y el aparente majestuoso escenario en forma sol resplandeciente que más noche se llenaría de muchos colores. Mi curiosidad por todo lo que íbamos a vivir en el festival de la cerveza mexicana 100% producida en México, era grande.

En punto de las 5, la música comenzó con el set de Holy Ghost!, que iniciaba la increíble tarde soleada, con el nuevo track de Justice y de ahí no paro con la excelente selección del dúo que continuó durante casi dos horas.

Al inicio había poca gente, pero ya se percibía con la mejor de las actitudes. Varios lucían sus playeras decoradas por ellas mismos con los emblemas del festival –el sol que vistió la noche, la palabra SUNSETS, el logo de Corona–, otros con los tatuajes dorados del solecito y pintura con palabras por todo el cuerpo. La alegría de la gente que iba llegando poco a poco para llenar el lugar por completo, era evidente.

La botella edición especial del festival era la cerveza a la venta en el lugar a la orilla de la playa del hotel Princess, siempre hubo y bien fría. Así que la fiesta siguió con Jack Novak, que no paro de saltar detrás de los decks con el público más abundante, que le regresaba la eterna y bella sonrisa que mostró durante todo su set. La gente no paró de bailar.

Había una zona de foodtrucks y establecimientos, del lado derecho del escenario, para comer pizza, tacos de pastor, tostadas de mariscos, tacos gober, todo muy rico. Yo disfruté unas deliciosas tostadas de marisco, bien fresco. Las filas de la chela comenzaban a notarse largas pero la atención del personal del Princess siempre fue amable y ágil para servirlas.

Cuando de repente miré a mi alrededor, me di cuenta que el lugar estaba repleto de gente, el público era muchísimo. Decidí subirme a la selfie tower donde realmente vi el mar de gente que estabamos en el lugar. El escenario se seguía viendo espectacular desde lo alto y Capital Cities ya estaba en él. Con la energía que los caracteriza e interpretando sus éxitos como “Safe and Sound”, “Kangaroo Court”, “Origami” y haciendo interesantes covers a “Remember the Time” de Michael Jackson, y “September” de Earth Wind and Fire. Tenían al público entero bailando, aplaudiendo y muy atentos al show.

El atardecer fue espectacular pues no había nube alguna que arruinara disfrutar el ocultamiento del sol, la noche cayó e inició un breve performance de una especie de ninfas que bailaron con música tribal. Aún faltaban más horas de baile con Route 94 y Bakermat.

Los actos siguieron la noche, mientras fui recorriendo el festival que lucía hermoso de noche, con los foquitos y la increíble decoración de telas, espejos, atrapa sueños y mucho más detalles. La mayoría de las personas estaban con una increíble actitud y aún con tanta que había, podías accesar hasta el frente del escenario.

El joven inglés, Route 94, inició su set con temas más chillouteros para después irse a algo más house y dance, sin olvidar incluir su éxito “My Love” que todo el público ovacionó. Posterior a él, y para cerrar la noche con un poco más de dos horas de set, el holandés Bakermat apareció en el escenario, acompañado en algunos tracks con un saxofonista que acompañaba las canciones en vivo. “Teach Me”, “One Day” y muchas más se escucharon en aquel set que cerraba la noche.

Finalmente, en punto de las 23:45 H la última canción finalizó con el estallido de fuegos artificiales que realmente hacían que el escenario fuera la estrella de la noche. La gente poco a poco abandonó el lugar, cosa que era un poco complicada pues el tráfico de la salida se congestionó demasiado, sin embargo, la bailada y la buena vibra de toda esa tarde, había valido mucho la pena.