Exhalación de recuerdos y ávida fiesta sonora se vivieron en el segundo día del Tecate Emblema 2023.
Los recuerdos no se pierden, nada se olvida y en ocasiones, basta un olor para evocar un súbito recuerdo, esto es precisamente lo que les sucederá a los asistentes del Tecate Emblema 2023 cuando vuelvan a percibir el olor a petricor —tierra mojada—, el cual fungió como sello oficial en el segundo día de este festival, que en resumidas palabras fue inolvidable. El Autódromo Hermanos Rodríguez fue el punto de encuentro para miles de personas, quienes ávidas se dieron cita en este magno recinto y a pesar de las probabilidades de lluvia, el Sol se mantenía elevado en el cenit. Todo listo y con bebida en mano, era oficial, un día lleno de música y baile había iniciado.
El reloj marcaba las 17:00 horas y el escenario Tecate Stage fue hacedor de magia cuando sobre su templete cobraron vida bocinas, luces y amplificadores, acto seguido, aparece Róisín Murphy, quien desde el primer segundo dejó en shock a los presentes gracias a su icónico look: un vestido verde tornasol con escote en una pierna, mientras que en la cabeza portaba un gorro de pico en color azul klein, mismo que más tarde sería sustituido por diversas prendas y hasta una peluca. Enfundada en icónicos looks, la irlandesa dejó un pedazo del alma en el escenario, especialmente con temas como “Hit Parade”, en colaboración con DJ Koze. Sin embargo, el show de la vocalista de Moloko hizo ebullición cuando regaló a sus fans una nueva versión en electrónica de “Sing It Back”, la cual estrenó con motivo de las casi dos décadas que lleva como solista, al mismo tiempo que minutos después hizo presente su más reciente sencillo “Coocol”, tema escoltado con matices soul.
Más tarde, en el SHEIN stage los “demonios” se congregaron en el spot idílico para un eclipse entre sombras y canciones de reflexión y protesta, se trataba de la española Zahara, artista difícil de describir con adjetivos, pues es por demás una creadora que abarca 360 grados. Desde los primeros minutos, su música influida por grupos como Death Cab for Cutie, Maga o The Smashing Pumpkins te traslada a un terreno elevado en furor y adrenalina gracias a su frenesí y entrega. Su versatilidad es cegadora, pues puso a bailar con mezclas muy de atmósfera rave, al mismo tiempo que colocó a flor de piel las fibras más sensibles de los presentes con profundas canciones como “Olor a mandarinas”, “Guerra y Paz” y “Con las ganas”, pero definitivamente hubo dos protagonistas en su show: 1.- las secuencias oscuras de sintetizadores. 2.- su manera de bailar, pues recordemos que además de dedicarse a la música, Zahara también trabaja en las artes escénicas desde 2014.
Una noche con sabor a memorias
Enfundados en chaquetas de cuero, lentes dosmileros, maquillajes con mucho glitter e impermeable en mano, los presentes tuvieron que enfrentarse a uno de los choques más tristes del festival, por un lado Moenia y por el otro los Black Eyed Peas; fueron estos últimos quienes jalaron a la mayoría de los asistentes, pues se trataba de su regreso a tierra Azteca para dar un show en el que Will.i.am, Apl.de.Ap, Taboo y Alma J. Rey tripulaban una nave de recuerdos a través de icónicas melodías que forman parte del ayer y hoy.
Tras este acto llegó el turno de uno de los proyectos mexicanos más esperados, hablamos de CLUBZ, dúo electro pop oriundo de Monterrey que desde el minuto uno cobijó al público de la carpa SHEIN con un manto tejido por el equilibrio entre lo orgánico de los instrumentos y la fusión de la tecnología. Orlando Fernández y Coco Santos tocaron algunas de las fibras más sensibles al entonar temas clásicos como "Popscuro", "Cáile", "Épocas" y "Templos", pero sin duda el momento de mayor fulgor llegó cuando los amplificadores dieron vida “Cortes modernos”, canción de estreno que formará parte del nuevo material discográfico de esta dupla que se autodescribe como hacedora de un propio género: “pop con garra”.
De regreso al escenario principal, grises nubes merodeaban arriba de la rueda de la fortuna y los stands que durante el día ofrecieron diversas activaciones, juegos y regalos. En el Tecate Stage aún era perceptible el sentimiento de energía que había dejado BEP y con vibras más slow llegó (junto con la lluvia) el turno de Robbie Williams, quien con visuales noventeros y una actitud de completa entrega armó un carrusel de melodías que trasladaron al pasado, tal es el caso de los temas “Angels”, “No Regrets”, “Rock DJ” y “Feel”, los cuales acompañó de anécdotas personales que han suscitado a lo largo de su carrera.
El itinerario seguía su curso y mientras una pequeña luna menguante se movía de posición el final de este festival estaba cada vez más cerca, no sin antes echar un buen meneo y hasta perreo, esto auspiciado por Bizarrap en el KIA stage, espacio que fue testigo de los sonidos y grandes colaboraciones de Gonzalo Julián Conde (BZRP) quien actualmente es considerado uno de los productores discográficos y DJ más reconocidos dentro de la escena urbana. El argentino prendió el baile a pesar de las condiciones climatológicas y es que hasta el más linfático de los presentes se entregó a la pista de baile al escuchar “Quédate, que la noche sin ti duele”, perteneciente al tema Quevedo, cerrando así con ánimos hasta arriba el segundo día en Tecate Emblema 2023.
