Top 50: Mejores canciones de 2016

2016 fue un año lleno de buenas canciones y en Indie Rocks! seleccionamos varias que ahora forman parte de nuestro top 50.

Otro año está por terminar y no podemos más que celebrar el que haya estado lleno de conciertos, festivales, nuevos discos, sencillos y mucha mucha música. Desafortunadamente, también fueron 12 meses en los que perdimos a grandes exponentes que dedicaron su amor y pasión hacia esta disciplina artística. Sin embargo, para aquellos que aún estamos aquí, armamos un top 50 con temas que nos causaron alguna emoción este fructífero 2016.

De todos los géneros, en este top creado por el staff de Indie Rocks!, podrás encontrar desde tracks que forman parte de las nuevas producciones discográficas de Bat For Lashes, Blood Orange, Bon Iver, Crystal Castles y Dirty Projectors, hasta sencillos de Empress Of, The Strokes y Massive Attack.

No importa el mood en el que estés, esperamos que con estas recomendaciones, logres descubrir nuevas emociones y te lleve por este gran viaje musical que fue el 2016. No olvides compartirnos cuáles fueron las mejores canciones para ti, usando el hashtag #IRTop50 en Twitter y Facebook.

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Caifanes en El Palacio de los Deportes

Caifanes y el ultimo ritual del año del mono.

Los últimos momentos del 2016 comienzan a notarse con mayor magnitud, año del mono rojo de fuego, según el horóscopo chino. Se va cerrando la agenda de conciertos en nuestro país, pero las alegrías y sorpresas siguen llegando de último momento, aquellas que siendo pasadas por las bocas extasiadas, se van a transmutar en recuerdos que valdrán oro.

En medio del fervor guadalupano que transforma a la capital en un sitio con un solo destino, el cuarteto conformado por Saúl Hernández, Alfonso André, Sabo Romo y Diego Herrera, apoyados por Rodrigo Baills, culminaron una extensa y exitosa gira alrededor del país, siendo la Ciudad de México la fecha más esperada por los aliados del Caifán, aquel que las puede todas, el ser que se adueña de la noche para salir de los lugares mas recónditos del Mictlán.

Así es como comienza el ritual, cuando cae la fría noche y los discípulos de Caifanes comienzan a arribar al gran domo de cobre, compartiendo la misma emoción, como si tuvieran que haber esperado tres vidas para ver en su forma humana a una de las bandas más importantes del rock latinoamericano. Rostros añejos por el tiempo, ansiosos, con brillo en sus ojos y sonrisas extendidas, esas que delatan las ganas de ver a alguien muy querido y hacen que regrese la nostalgia de la juventud. Esos tiempos del rocanrol.

Pero también llegó la ola joven, los que están emocionados como si fuera la primera vez, a los que no les tocó, pero se saben todas las rolas. Marcando las 8:29 pm, tomando como señal la oscuridad y los lúgubres teclados de Diego Herrera, “Los Dioses Ocultos” aparecieron en un escenario repleto, todos de pie, amigos brindando por aquí y por allá. Ahí estaban los Caifanes, volviendo a romper el silencio.

La euforia y el temblor en el suelo no cesaron, “Para Que No Digas Que No Pienso En Ti” y “Te Estoy Mirando” enternecieron los corazones de todos los asistentes, uniéndolos en una sola voz, una de las cosas más bellas que se puede escuchar en un concierto. Con un Saúl Hernández agradecido, arrodillado ante toda la raza, “Nubes” hizo su aparición para invitar a los aliados a dar una vuelta al cielo, que en ese momento se llamaba Palacio de los Deportes. La brutal y arrabalera “Nada” sorprendió y gustó, mientras la oscura “Cuéntame Tu Vida” detonó el recuerdo de las primeras tocadas en Rockotitlán.

La danza del mas allá se apoderó de la audiencia con “Piedra” y siguió con uno de los himnos mas coreados del rock mexicano, “Mátenme Porque Me Muero”. Sin olvidar su mensaje de conciencia, Saúl expresó su deseo de luchar por el bienestar de nuestro país, siendo “Antes De Que Nos Olviden” y “Aviéntame” su carta de presentación.

El misticismo de la cultura mexicana apareció cuando “Perdí Mi Ojo De Venado” libró a la fanaticada de los malos augurios con una limpia musical, que a su vez disfrutó de un tributo que Caifanes ofreció a Oscar Chávez, David Bowie y Juan Gabriel. Sin olvidar canciones como “La Célula Que Explota” y “Nos Vamos Juntos” el cuarteto capitalino no dejó sentar a sus aliados que corearon, lloraron y disfrutaron de cada melodía de aquellos seres que dieron todo arriba del escenario, para que no les faltara nada a esa fiel oleada de almas eternas, tres generaciones de música y recuerdos.

Con los acordes de “La Negra Tomasa”, aquel ritual azteca que comenzó con la invocación a los dioses, estaba llegando a su fin. Como caballeros águila triunfantes, los protagonistas de una noche inolvidable se despidieron, aquellos que dejaron sus vidas en un rosario y en milagros de latón, cerraron el año del mono rojo, en un 11 de diciembre de 2016 con sabor a 1989.

Burial – Young Death / Nightmarket EP

La hipermodernidad musical de Burial.

La bailarina semidesnuda Karen coquetea lanzando miradas como anzuelos. Poco le importa a Rick. Este busca desesperadamente salir del atolladero existencial en el que ha caído. Luces neón en tonos morados, azules y rojos cubren los cuerpos que se agitan sobre pistas de baile. La canción que se escucha de fondo es "Ashtray Wasp", la paradójica mezcla sonora de lo espeso y lo etéreo a toda velocidad. Burial, productor musical inglés, volatilizando las emociones. Rick y Karen junto con un amigo salen del club, corren en las calles de Los Ángeles, viajan a Las Vegas, trepan carros de supermercado y visitan centros comerciales. “Puedes ser quien quieras” le dice ella. “Prueba de todo”, continúa. “Conozco más de la vida que mucha gente”, finaliza. Salen por un tiempo hasta que él se aburre de ella. La escena anterior proviene del capítulo La Sacerdotisa del filme Knights of Cup. La historia va dando saltos, omitiendo sucesos de modo que el tiempo corre a una velocidad diferente y el espectador debe darle coherencia a lo que está viendo. Los diálogos sin mucha lógica pueden llevar a la confusión, no se sabe si son intercambios de palabras o pensamientos que van y vienen como la cantidad de cosas que se pueden imaginar en un recorrido en auto por periférico a medianoche viendo las líneas amarillas suceder unas tras otras. Pero así son los últimos filmes de Terrence Malick. Y así es la música de Burial que va dando tumbos continuamente.

El nuevo EP de William Emmanuel Bevan, nombre real del artista inglés, fue vendido por error durante el Black Friday en Toronto, se agotó en su versión física el día de lanzamiento y en caso de querer escucharlo solo queda adquirirlo digitalmente. "Young Death" más allá de marcar el regreso de este músico a los lanzamientos decembrinos, lo pone como uno de los artistas representantes de la hipermodernidad, la que despoja a los objetos de su función para priorizar la forma y que está vinculada con la era digital, las nuevas formas de comunicación, producción y de consumo. El mundo le ha puesto los ojos a este músico que debutó hace diez años con la disquera Hyperdub sin revelar su verdadera identidad y que mantuvo así hasta 2008. Su música es una cubetada de agua helada en tu rostro. Está anclada en el ambient, el dub, el bass y la experimentación electrónica. Sus temas pueden ser vistos como unidades compuestas por diferentes fragmentos, si estos se deconstruyen se aprecia el sentido de cada uno en textura y volumen, pero no pierden sentido. Las piezas podrían existir separadas como pequeños extractos de audios cinematográficos. Los modernistas miraban al futuro, y los posmodernistas rechazaban tajantemente el pasado para situarse en el presente, los hipermodernistas vinculan los tres tiempos en formas abstractas.

Burial no es el único, como él hay otros tantos –por ejemplo Prurient, Ben Frost, Pharmakon, Andy Stott, Kanding Ray, entre otros más– que se han encargado (difícil saber si por las circunstancias o por decisión) de generar una transformación en los sonidos, sin que ello implique necesariamente la desaparición de lo que ya existe. Hay que acercarse a este inglés para ver que no solo está haciendo música electrónica. Está uniendo el pasado a través de sampleos (recuperando tradición en pastiches) con la velocidad propia del futuro y el presente con su aura de éxtasis propio del rave. El nuevo material solo es el punto final. La consagración de su visión de autor, con una estética propia caracterizada por el lo-fi de una radio AM; los siseos; los zumbidos; el eco; los ruidos metálicos, explosivos; las voces distorsionadas; las ambientaciones de corte melancólico; la ruptura en el mismo track; los giros radicales; la vibra espesa y oscura, y las atmósferas como un eje de todas las emociones.

"Young Death" inicia afirmando "oye chico, siempre estaré ahí para ti", mientras que el ruido de las frecuencias de una radio ensucian la pista. Se asemejan a partículas de películas viejas corriendo en una sala de cine sobre unos pulsos electrónicos. Campo de ensueño con coros, bajos y tintineos que más adelante se vuelven un espeso ritmo, alimentado por respiraciones y atmósferas siniestras. Con un par de líneas Burial nos cuenta una historia: alguien ha muerto. La siguiente frase es "cariño, ahí estaré, te prometo que ahí estaré", pero esta vez, a diferencia de la primera ocasión en que es esperanzadora, se trata de un lamento ante lo irremediable: el viaje a otro sitio. La postura del track coloca al escucha en primera persona.

"Nightmarket", segundo y último track de este EP, abre las puertas con la frase “ven conmigo” hacia un entorno difuso, intervenido con sonidos espaciales, sirenas y ruidos irregulares. Más adelante hace la invitación de nuevo: "ven conmigo". La misma frase del principio. Una lluvia de synths irrumpen como sonidos apocalípticos. "Estoy aquí...", finaliza el tema. ¿Quién lo dice? ¿El que hacía la invitación o quien va entrando a este sitio? Lo más seguro es que se trate del segundo.

Burial ha relatado una historia abierta: ¿Cuál es el principio? ¿Quién desaparece? ¿Quiénes participan? ¿Quién le habla a quién? ¿A dónde llega? ¿Cuál es el final? ¿Por qué? Con pocas frases detona un guión que se mueve continuamente. Sí, ambas canciones se reinventan a sí mismas, porque queda negada la evolución de los tracks al tratarse de una autodestrucción continúa, entonces la letra es lo que permanece, lo que une los temas y no deja que se separen sus diferentes partes. Habría que preguntarnos si Bevan presenta canciones o algo más, un tipo de artefactos que las ubica en un entorno adecuado para apreciarse como ejemplo de una era que parece ya culminada como lo es la hipermodernidad. Algunos hablan ya de la ultracontempóraneidad, la transmodernidad o la digimodernidad, cuya característica es la hipertextualidad. Tratándose de canciones, estas tendrían que ser compuestas al mismo tiempo entre músico y público en una plataforma digital pero no como una técnica artística. Pregunta obligada, después de Burial qué sigue...

Entrevista con Los Amigos Invisibles

Previo a su presentación en El Plaza Condesa, platicamos con José Rafael de Los Amigos Invisibles.

“Es un lugar que se presta para una fiesta, una pachanga”, dice José Rafael Torres, bajista de Los Amigos Invisibles, una banda cachonda y llena de fiesta cuando se le pregunta sobre su próxima presentación en México en El Plaza Condesa. “Ya hemos estado en El Plaza y lo hemos pasado muy bien, ojalá la gente nos acompañe. Nos gusta mucho porque no es ni muy grande ni muy pequeño, es del tamaño justo para el cachondeo”, explica José.

La banda viene presentando un nuevo sencillo: “Dame El Mambo”, mismo que vendrá incluido en su próximo disco que tiene pensado salir en el mes de febrero. Para este álbum, los venezolanos no se intentaron romper la cabeza, ni descubrir el hilo negro, después de más de dos décadas de existencia, tienen bien claro su sonido y sus objetivos. Sin embargo, José adelantó una colaboración que puede resultar interesante: “Lo más innovador que hicimos es una colaboración con Los Auténticos Decadentes en la que hablamos de un tema muy importante para la sociedad, la canción se llama: 'Aquí nadie está sano'. Quedó una mezcla muy interesante porque se aleja del sonido de ambas bandas, como en un territorio neutro”.

Esta unión no resulta extraña, ambas bandas son frecuentes en muchos conciertos y festivales a lo largo y ancho de América. Las dos son legendarias, las dos mezclan ritmos anglo con lo latino y ambas comparten un público similar: “Nosotros siempre nos encontramos con los Decadentes en festivales. Cuando realizamos el demo y nuestro manager escuchó la canción nos recomendó a los Auténticos y al contactarlos aceptaron de inmediato y, la verdad, salió bien chévere, va a ser el próximo single y ya tenemos el video que esperamos salga en marzo, después del disco”, cuenta José.

Además de presentarse en México, Los Amigos Invisibles tiene planeado hacer una gira por Estados Unidos, el país que recientemente acaba de elegir a un presidente anti migrante, mismo que dio voz a los racistas y xenófobos de la unión americana. Esto no parece preocuparle a José, quien se mantiene con una mentalidad optimista: “Mira, yo te puedo decir que, si viste las elecciones te das cuenta de que el voto popular lo ganó Hillary, pero al final se trata de un país dividido con una mitad conservadora y retrógrada y otra muy liberal e incluyente. Nosotros afortunadamente siempre hemos tratado con la mitad liberal y ojalá eso no cambie. La inquietud es válida, pero creo que hemos girado tanto por Estados Unidos y nos hemos dado cuenta que la gente que nos ve son en su mayoría latinos, entonces me cuesta mucho pensar que nos vaya a afectar.”

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Foto: Niñapapalote Barbosa para Indie Rocks!

Esta es la confianza que solo los años te pueden dar, al fin y al cabo estamos hablando de una banda que ha rodado por el mundo por más de 20 años y esto, además de confianza te da madurez y profesionalismo: “Mira, los años no pasan en vano y nunca se deja de aprender. Los discos, giras, videos, se hacen con mayor profesionalismo. Lo que no ha cambiado es el objetivo principal: hacer las mejores canciones y divertirnos en el proceso, esa es la fórmula”, explica José.

Sí diversión, como ya se explicó, esa parte es fundamental en la banda. Cachondeo, arrimones, bailar pegadito. ¿Cómo puede una banda tocar estos temas por tanto tiempo y mantenerse vigente en el público?: “Nos sentimos afortunados de que el público que se conecta con nosotros cada vez es más joven. Esto creo que se debe a que conforme la gente madura se va retirando de la fiesta. Ahora hay mucha gente que conectó con nosotros con ‘Mentiras’ y que apenas están descubriendo a la banda. Digamos que el público se va renovando con los años”, concluye José.

Los Amigos Invisibles es una banda cachonda, llena de fiesta, buena pa’l arrimón. El próximo 16 de diciembre se presenta en El Plaza Condesa, un lugar perfecto para disfrutar su música con tu pareja y “darle al mambo".

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Fishlights estrena video para "Cosmos"

Mira esta bonita pieza de animación para el acompañamiento visual de "Cosmos" de Fishlights.

Fishlights, el proyecto alterno del productor mexicano e integrante de The Plastics Revolution, Fernando Heftye, lanzó en febrero de 2013 su EP debut a través del sello Dos Pelícanos. Ahora, casi cuatro años después, decide darle nueva vida al proyecto convirtiéndolo en una banda.

Serpientes es el título de su segundo EP en el cual se puede apreciar una esencia más orgánica pero a la vez dinámica; notable en el primer sencillo de este material “Hunting”.

fishlights vid

Hace unos días, Fishlights estrenó el video musical para su canción “Cosmos”, un clip animado escrito, dirigido e ilustrado por Proceso Inútil, en el cual podemos ver a un viajero que se aventura a través del espacio con el fin de encontrar a un hechicero oscuro capaz de regresarlo al camino del bien. Mira el visual aquí abajo.

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Descendents en Carpa Astros

El enorme debut de Descendents en México.

La noche del 10 de diciembre del 2016 será recordada como la noche en la que la legendaria banda de punk, Descendents tocó por primera vez en la Ciudad de México. Una de las bandas que le dio identidad al hardcore punk, influenció a agrupaciones como Blink 182, NOFX, Green Day, Pennywise, Rise Against y The Offspring y es considerada como pionera del punk pop. Los oriundos de California escogieron el humilde escenario de la Carpa Astros para demostrar, 39 años de carrera después, el porqué son tan importantes en la historia del punk. Los afortunados que pudieron estar presentes saben que fueron testigos de un momento épico.

Karl Alvarez (bajo), Bill Stevenson (batería), Stephen Egerton (guitarra) y el gran Milo Aukerman (voz,) conforman está versión de Descendents desde 1986 y andan de gira con su séptimo álbum de estudio: Hypercaffium Spazzinate.

En una noche con un clima frío, la Carpa Astros estuvo a la mitad de su capacidad. Algo que no debe sorprender a nadie: el punk siempre ha sido un género que se mueve en espacios pequeños ante un público no muy numeroso en general. Playeras y sudaderas de la banda eran las prendas que muchos usaban. La mayoría eran jóvenes. Como telonera estuvo la banda mexicana de punk GULA y los neoyorkinos After The Fall. Ambos actos pasaron sin pena ni gloria sobre el escenario. No fueron ovacionados, pero tampoco fueron abucheados. Cumplieron con su papel.

Pasadas las 9:30, Descendents salió al escenario. “Hola, México” dijo Milo, el respetable explotó lleno de júbilo. Tanto Milo como Stephen notaron los celulares y dijeron, en tono de broma, que tomaran fotos mientras pudieran y después hablaron del tiempo que les tomó venir a México. Milo se acercó al baterista y antes de iniciar dijo: “Here we go. Todo Chupa, which means ‘Everything Sux’”. Con esta rola dio inicio un concierto de 33 canciones y  dos horas de duración.

La experiencia y la emoción de vivir un concierto de Descendents tal vez se compare con la de ser lanzado en un cohete al espacio, o manejar un Ferrari a máxima velocidad, o saltar en paracaídas. El comienzo es explosivo y vibrante, el trayecto es una locura sin respiros y el final es intenso. La adrenalina fluye por todo tu cuerpo de principio a fin. Milo recorre el escenario, brinca, se baja del templete e interactua con la audiencia, les avienta agua; Stephen es una máquina, agita su cabeza, hace poses y ataca con furia su guitarra; Bill golpea su bataca sin tregua y Karl ataca su bajo con furia. A pesar de ser hombres de mediana edad, tienen una energía digna de unos adolescentes.

Canciones como “Sour Grapes”, “Pervert”, “Silly Girl”, “Bikeage”, “Clean Sheets” y “Hope”—clásicos de la banda—pusieron el ambiente propicio para el slam. El mosh pit atraía a todos como la gravedad. El ambiente era de lo mejor. Brincos, cerveza por los aires, empujones y el clásico crowd surfing no podían faltar. Era una fiesta de locura. “Mexico, I want to be stereotype, I want to be classified”, recitó Milo para iniciar “Suburban Home”. Le siguieron “Shamless Halo”, “I’m The One”, “When I Get Old”. De su nuevo álbum sonaron “Without Love”, “On Paper”, “Victim of Me”.

El escenario era sencillo: solo luces, nada de proyecciones, lonas o humo. El sonido estuvo a la altura, aunque a veces los músicos daban la señal de que subieran ya sea el volumen del micrófono o los instrumentos. Ese sonido crudo y estridente es intrínseco del punk. A nivel de producción estuvo bien, a secas. La actitud de la banda era de pura diversión y desenfreno. Apenas se tomaban unos segundos entre canciones. Nunca bajó la intensidad.

“Descendents” sonó antes de que la banda saliera del escenario para regresar para el primero de dos encores. “One more song!” gritaba el público ante un escenario oscuro. “Gracias por rockear con nosotros. ¿Estamos listos?”, dijo Bill antes de empezar el primer encore con “Feel This”. Para finalizar el encore tocaron “Smile”. Nuevamente salieron del escenario para regresar en pocos minutos. “Uno o dos más, posible tres. Ustedes parecen que tienen que dormir”, dijo Bill para después cantar “Cuando calienta el sol aquí en la playa” a petición de Milo, lo que desató las risas antes de iniciar el segundo encore con “Testosterone”. En la cola sonaron “Spineless and Scarlett Red” y para finalizar “Catalina”. “That was awesome, thank you guys. ¡México, hasta mañana! Well not mañana ¡Hasta la Vista!”, dijo Milo antes de despedirse.

El primer concierto de Descendents en México, estuvo increíble y superó todas las expectativas. Tocaron sus canciones más emblemáticas con mucha entrega y pasión, la cual aumentaba con cada canción. No hubo nada que reprocharles, al contrario, agradecerles el que hayan venido y esperar que regresen pronto, porque este primer concierto estuvo increíble.

Jump and Jive CDMX en el Foro Indie Rocks!

Todo está en el baile, el desmadre y el clásico Rock & Roll.

La cultura rockabilly fue reflejada en el encuentro Jump and Jive CDMX, un manifiesto que pisó por primera vez nuestro querido Foro Indie Rocks! a través de diferentes actividades como talleres de maquillaje y peinado pin up, clases de baile, estudio de tatuajes, venta de merch, ropa y accesorios varios.

En la música estuvo presente Vince de Rebel Cats con un DJ set ad hoc para iniciar desde la tardecita del día con la actitud de celebrar la permanencia de este estilo de vida que muchos han acogido para pasarla bien o tener una propuesta y personalidad diferente a lo que día con día se nos presenta como moda e imposición a través de la red.

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Cuando cae la noche brillan las sonrisas de las parejas de novios o grupitos de amigos que llegan al foro. Como en toda escena, todo espectro, varios se conocen, les da gusto verse. Observo la felicidad en los rostros de una pareja de enamorados y pienso: ¿qué los hace tan felices? Me acerco a preguntarle a una de las parejas rockabilly que no pararon de bailar ni un segundo, ¿cómo es que son tan felices? Me responden: el truco está en el baile; bailar lo es todo.

La parte musical de este movimiento no podía faltar. El primer acto corrió a cargo de Los Calavera, quienes arrancaron con mucha energía soltando su buena vibra, incitaron a bailar de inmediato, ya se veían volteretas impresionantes en la pista de baile. Los metales (trompetas y sax) fueron importantes en este match de bandas que representan al rockabilly. Entonces llegó Casino Manhattan a comprobar que el jazz y el ska también son parte del rock and roll, su sonido invadió las almas desesperadas por hacer brillar el piso.

Un vocalista que canta como Elvis, pero en mexican style, que tiene actitud punk, que sabe tocar las maracas y se planta bien en el escenario, que se acompaña de su grupo de Moustros amigos. Ellos llevan varios años tocando y bailando rockabilly en su show, saben prender al público siendo creativos con su mezcla de ritmos y con sus pasitos de baile con todo y su maneqquin challenge, el mejor descubrimiento de este año si estuviste ahí y no le entras mucho a la onda rockabilly de los cincuenta.

Los Gatos llegaron ronroneando canciones como “Berta Lú” y “El Gato”, pero le quitaron el toque romántico a la atmósfera, haciendo alusión al no matrimonio, aunque igual todos seguían bailando, enamorados o no.

Los Monstruos_1

No me decido entre Los Moustros del Espacio Exterior o Frantic Rockers, porque sin temor a equivocarme fueron los actos que más gustaron al público, que hicieron reír y gozar al máximo, aún cuando el cansancio ya se estaba apoderando de los bailadores empedernidos. Frantic Rockers emana sencillez, carisma y talento sin igual, su estilo es más apegado al blues pero con frenesí de por medio, no por nada el público pedía una tras otra, hasta tenían su grupo de fans en frente, haciendo peticiones; evidentemente su set se alargó con todas las de la ley para recibir por fin a Lil’ Mo and the Dynaflos.

Ya desde antes, se veía entre el público a los integrantes de Lil’ Mo and the Dynaflos tomándose selfies, bebiendo un trago, muy a gusto de estar por primera vez en México. Para cuando era su turno de pisar el escenario, el foro estaba lleno y las parejas de baile parecían pirinolas sin freno. El ambiente con su música estuvo bastante divertido, con bromas y coreografías bien armadas. Excelente propuesta para esta primera edición.

Lo clásico no deja de ser, es un modo de vida para músicos, artistas y personas que aman el baile en pareja. Jump and Jive nos dejó con ganas de más felicidad en forma de baile.

Reyno en el Auditorio Blackberry

Reyno y una noche llena de lágrimas.

“Ojalá y nunca me dejes, se me termina la vida. Ojalá y no me abandones, solo respiro a través de tus labios”, balbuceaba una adolescente mientras limpiaba las lágrimas que corrían precipitadamente por su rostro e intentaba abrirse paso entre la gente para llegar al frente del escenario donde Reyno interpretaba “Nunca me dejes”.

Conoció a su exnovio en El Plaza Condesa hace un año cuando Christian Jaen y Pablo Cantú festejaban que en ese mismo recinto 365 días antes habían iniciado su aventura sobre los escenarios como banda telonera de León Larregui. Dos movimientos de traslación, dos discos y un corte de cabello de Christian los plantaron en el Auditorio Blackberry frente a 4000 personas. En su mayoría corazones rotos o en proceso de sanación. 

Salvador Sahagún a.k.a Salvador y el unicornio fue el telonero de la noche, quien presentó “Agua de coco” y “Carolina”,  temas que se desprenden de una colección de canciones que grabó a principios de este año bajo la producción de Pipe Ceballos y formarán parte de su primer disco.

El cantautor tapatío que define su música como “una mezcla de proto-garage y psicodelia brasileña de los 60” este año también fue telonero de León Larregui junto a Love La Femme en los conciertos que el vocalista de Zoé ofreció en el Teatro Metropolitan. Sus canciones que de coros fáciles y repetitivos aminoraron la espera. También Tercerojo, proyecto de rock psicodélico que surgió el año pasado encabezado por Rodrigo Llaguno interpretó temas como “Sueño ritual” y “Espejismos”.  

Reyno hizo un recorrido por sus dos producciones Viaje por lo eterno (2014) y Dualidad (2015) en donde hasta las “canciones románticas” como “Química" y “Dos mundos” fueron cantadas con melancolía y añoranza. En el auditorio casi no había parejas romanceando. Abundaban los forever alone y los grupos de amigos solteros. Que sí, iban a ver a su banda favorita, pero también a cantarle al desamor.

Christian agradeció a sus fans, amigos y familiares por el apoyo. Además anunció que estaban festejando cuatro años de la banda y por tal motivo esa presentación serviría para grabar un disco en vivo.

Después del encore invitaron al escenario a Matilde Sobrino de Matilde Band para interpretar “Viaje por lo eterno”, canción que grabaron con la participación de Natalia Lafourcade y a “su baterista favorito” Rodrigo Guardiola para interpretar  “Control”.

El dúo concluyó con “Ahrimán”, que aunque no fue del agrado para la mayoría de sus fans por no ser una de sus canciones más reconocidas, acercó al cielo con los ojos abiertos a esos atormentados que necesitaban liberarse de sus demonios internos. Porque como decía el dramaturgo francés Victor Hugo: “la música expresa aquello que no puede decirse con palabras pero no puede permanecer en silencio”.

Pete Doherty hace covers de Oasis y Leonard Cohen

Pete Doherty y The Puta Madres interpretaron canciones de Oasis, Leonard Cohen y The Velvet Underground durante un concierto en Inglaterra.

Desde sus múltiples presentaciones en Argentina, hasta la reapertura del Bataclan, mucho se puede decir de este peculiar tour, pues el cantante ha dado espectáculos íntimos y acústicos, además de sorpresas como el video que armó para Jack Jones, vocalista de la banda Trampolene. Pero ahora, Pete Doherty sobrepasó sus limites durante un concierto en Kentish Town.

Pete Doherty kENTISH

El músico no sólo tocó algunos de sus éxitos con Babyshambles, pues también interpretó canciones de The Libertines, incluyendo “You’re My Waterloo” con Carl Barât. Pero eso no le bastó a Pete Doherty y decidió tocar tres covers de diferentes artistas. Lo primero que pudimos escuchar fue “Ride Into The Sun” de The Velvet Underground, debemos recordar que este es un gran amigo de John Cale, incluso han compartido escenario más de una vez. Justo después se escuchó “Don’t Look Back In Anger” de Oasis. Un dato curioso es que tanto Pete como Liam Gallagher tienen un hijo con la cantautora Lisa Moorish.

Pete Doherty Carlos Barat

El concierto no pudo cerrar de mejor manera, pues Doherty y su banda The Puta Madres se despidieron con un homenaje al fallecido Leonard Cohen. El grupo de músicos, con la ayuda de Barât, tocaron “Hallelujah” ante el aplauso de los asistentes.

At The Drive In revela nuevo tema

At The Drive In confirma nuevo disco y estrena la canción "Governed By Contagions".

Después de su regreso a los escenarios, aunque sin el guitarrista Jim Ward, la banda originaria de El Paso, Texas, estrena nuevo material. El primero en ser escrito y grabado por la banda desde el lanzamiento de su álbum Relationship of Command en el año 2000. Un disco que destacó por la participación de Iggy Pop.

At The Drive In

La nueva canción de At The Drive In se llama “Governed By Contagions” y formará parte de un álbum de larga duración, el cuarto en la historia del grupo. Este será producido por ORL y Rich Costey, este último ha trabajado con artistas como Muse, Franz Ferdinand y Death Cab for Cutie. El tema puede ser por el momento descargado sin ningún costo en la página de la banda, pero escuchado en youtube.

El disco de At The Drive In fue anunciado meses atrás junto a la mención de una gira promocional por todo el mundo. Este tour incluirá festivales como el Reading and Leeds, además de las fechas que cancelaron en junio del año pasado por los problemas que tuvo Cedric Bixler con sus cuerdas vocales. Keeley Davis, integrante de Sparta y exvocalista de Engine Down, se mantendrá como guitarrista de la banda en sustitución de Ward.