Sin miedo y con los pantalones bien puestos, Little Jesus se paró en el escenario de El Plaza Condesa y como los grandes triunfó poniendo las canciones. El público, la magia.
La tarde era lluviosa, fin de quincena, gris. Nada de eso impidió el sold out en el recinto de la colonia Condesa. Nadie se quería perder la presentación del segundo disco de Little Jesus. La fiesta estaba como para no faltar, la banda empezó el año siendo noticia luego de ser escogidos para abrir el concierto de The Rolling Stones en nuestro país para después sacar uno de los mejores discos de rock nacional en lo que va del año. Teniendo esos factores en cuenta, no fue sorprendente la noticia que se daba horas previas a su concierto: ¡boletos agotados!
Todo empezó tranquilo. Ela Minus, cantante, músico, intérprete y “todóloga”, fue la encargada de abrir la noche. Ella armada con un conjunto de sintetizadores y su voz, puso el soundtrack perfecto para iniciar la fiesta. Nada como un poco de electropop para poner el ambiente. Aunque su música no acabó por encantar al público, que impaciente quería ver a los estelares, el proyecto trata de una propuesta bastante interesante a la que no hay que perderle la pista.
La expectativa crecía conforme pasaban los minutos, El Plaza, que ya se encontraba lleno, tenía una vibra especial. Cuando las luces se apagaron y el sintetizador marcó el acorde prolongado que sirvió de introducción para “Nuevos amigos”; si bien es cierto que la canción, que también abre el disco Río Salvaje, es una melodía tranquila, sin embargo eso no impidió que el recinto temblara. Sobre todo en el momento en que la batería entró, haciendo estallar toda la energía acumulada.
A partir de aquí todo fue risas, risas y buenos tiempos. El objetivo del show era presentar en vivo su nuevo disco y lo hicieron, casi, perfecto. “Mala onda” sonó con madre, lo mismo que “Niña Bien”, incluso en “Río Salvaje”se dieron el lujo de invitar a Los Románticos de Zacatecas, lo cual le dio un plus a su presentación. Quizás lo más débil fue la interpretación de “TQM” –canción que cierra el disco y que se grabó junto a Ximena Sariñana y Elsa y Elmar– voces que no pudieron suplir correctamente y que le dio un bajón al mood del lugar. Aunque ese tropiezo fue fácilmente olvidado luego de escuchar su nuevo hit, “La Magia”.
Pero no todo fue el nuevo disco, la banda también interpretó canciones de su primer disco las cuales fueron aún mejor recibidas. “Sur” –de la mano de Vaya Futuro–; “Norte” acompañados por la abridora Ela Minus; “Truco”, “Cruel” y “Pesadilla” pusieron a todos a cantar, y cómo no, si se trata de canciones que ya todos conocen y que han clavado en el corazón de sus seguidores.
La noche terminó con “Azul”, la más pedida y coreada del concierto, aquí fue donde la verdadera magia se hizo presente. Es mágico el hecho de ver crecer una banda a este grado. Muchos dudaron del talento de estos muchachos cuando los eligieron para abrirle a The Rolling Stones, considero que los que lo hicieron, simplemente no se han dado el tiempo de escucharlos.
