Algo sucedió en el Metropólitan: Julieta Venegas abarrotó.
La noche de ayer, el centro de la CDMX se puso norteño con la presencia de la tijuanense Julieta Venegas, que deleitó a los presentes al Teatro Metropólitan durante dos horas con una selección exquisita de canciones de su más reciente producción Algo Sucede, así como los éxitos de Limón y Sal, el MTV Unplugged y aquellas rolas que le dieron la fama de la que hoy goza feliz. El Algo Sucede Tour promete tener una segunda vuelta para afianzar lo que ya parece tener un lugar en la historia de la música local.
Con un perfil bajo apareció Julieta Venegas tras una breve aparición de los teloneros Yo Camaleón. Enfundada en un atuendo festivo y elegante en dorado y negro pero con el toque mexicano que la activista tijuanense logra imprimir a su imagen, salió con “Algo Sucede” como la canción de apertura y ya con el acordeón acuñado a su piel, la mexicana interpretó “Ese Camino” y sentenciaba a los presentes: ‘todos somos iguales; debemos ser más inocentes, como cuando éramos niños’.
Sin titubear, durante todo el concierto pasaba de la guitarra, al piano y al acordeón sin enfado, siendo este último el favorito del público reunido en el teatro. Sentada al piano y con una cámara que dejaba ver a Venegas al descubierto cantó “Prefiero Amor” y “Limón Y Sal”.
Visiblemente preocupada por la situación política y económica que se vive en nuestro país, aprovechó para expresar su sentir sobre el estatus actual del gobierno: ‘México pasa por un momento difícil y el mundo también. Amo y me duele México. ¿Cuándo vamos a volver a brillar y a ser un país sin violencia ni corrupción?’; tras una enorme ovación por las palabras, dedicó “Buenas Noches, Desolación” y la desgarradora “Una Respuesta”.
Las de antaño llegaron con “Me Van A Matar” y “Casa Abandonada” y el momento nostálgico cuando Julieta lamentó la sorpresiva muerte del divo de Juárez e interpretó un pequeño remix con “Querida”,“El Noa Noa” y la dolida “Podría Volver”, dándole el ambiente de septiembre que se esfuma de a poco.
Con los abrigos fuera por el ambiente cálido que la artista creó con su música, se escucharon “Lento” y “Tu Calor”. Invitando a todos a bailar sonó “Algún Día”, canción que escribió para su hija Simone y a quién dedicó a lo lejos. El público no podía creer que la sencillez de la artista la hubiese llevado a tocar casi treinta canciones y tras “La Despedida” y “El Presente”, dejó el escenario, augurando una pronta retirada. En el esperado encore subieron junto con la intérprete, la hija y la sobrina de esta con decenas de niños del público, invitados por la propia Venegas para bailar al ritmo de “Andar Conmigo” y terminar la noche especial con “Me Voy”.
El lleno total en el Teatro Metropólitan presagiaba un show lleno de recuerdos, de música del folclore mexicano de la nueva era y la presentación que marcará el inicio del cierre del Algo Sucede Tour por los grandes escenarios de la república mexicana y Latinoamérica.
