Carretera S.O.S.: Un peligro para los shows en vivo

Crimen organizado vs música en vivo.

Estos últimos años no han sido los mejores para la música en vivo, durante dos años, la pandemia fue el gran muro que bloqueaba esa experiencia para todos y ahora que ya estamos empezando a disfrutar los regresos de nuestras bandas favoritas a escenarios, la inseguridad en carretera es otra amenaza para los shows dentro de la República Mexicana.

El robo en carretera no es algo nuevo, la falluca existe desde antes de Cristo, es una de las costumbres más viejas del mundo, ir a comprar cosas robadas porque salen más baratas, pantallas de televisión, celulares, ropa, consolas de videojuegos. Y el robo de equipo de audio en carretera también ya lleva algunos buenos años.

El robo no ve color, razas o religión

Una cosa que es muy cierta, esas guitarras Gibson, esos bajos Music Man, esos amplificadores Mesa Boogie y esas consolas Pearl digitales por si solos no conocen género, una vez robados pueden convertirse en lo que sea… en cumbia, salsa o sonidero como le pasó a Café Tacvba y su equipo siendo utilizado por el Sonido Fania 97. Y ya se saben la historia de su infame Facebook Live que hizo el Sonido Fania 97 saludando a la Cafeta, mientras presumía el equipo y sonaba “Eres”.

Sobre esa misma lógica, no importa si robas a Molotov, Moderatto u otras bandas de rock, de hecho… No solo bandas de rock han sido atracadas en el camino. Proyectos musicales alejados de la escena rockera también han sufrido atracos, como la banda Matute, Ha*Ash o Samo de la extinta Camila. 

Bronco una de las bandas más grandes de toda Latinoamérica, banda grupera que puede ser disfrutada por rockerillos, bellakos y el mundo entero, sufrió robo en carrera por segunda vez en toda su historia en mero 2020. Dentro de ese mismo gremio, La Llegada y Vagón Chicano son algunos de las bandas de grupero que han sido asaltadas en carretera.

¿La música dejará de viajar por carretera?

Pero… Más allá de recuperar el equipo como le pasó a Molotov que encontraron sus cosas un municipio más adelante de donde fueron asaltados o como Moderatto que incluso felicitó y agradeció el trabajo del gobernador de Puebla por la rápida recuperación de su equipo; más allá de eso, una experiencia así de horrenda deja antecedentes que llevan a soluciones poco agradables.

 

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¿Soluciones poco agradables? Pues evitar ir a lugares a tocar por la inseguridad es una de ellas y es algo que ya está pasando. Moderatto lleva más de 10 años sin ir a tocar a Tamaulipas, por ejemplo… Y lo mismo pasa con Reynosa, Matamoros y Nuevo Laredo, y la lista puede seguir creciendo, no solo para Moderatto.

Peligros para la música más allá de la carretera

El robo en carretera no es la única situación de inseguridad que afecta la supervivencia de los conciertos, también ha habido robos en estudios y salas de ensayo, la banda Ramona es un ejemplo de eso.

O las golpizas en conciertos como lo qué pasó en el desafortunado concierto de la Maskatesta en la Terraza Franciscana con amedrentadores de la Unión Tepito. Un hecho completamente fuera del control de los músicos, pero que al final terminó afectando la seguridad y la integridad física tanto de los artistas como del público.

¿Qué demonios está pasando? Solo queremos pasarla bien, ver tocar a nuestra banda favorita, hacer esa comunión de la energía que se desborda arriba del escenario con la emoción del público abajo de la tarima y crear así el ritual perfecto del show en vivo.

Pero si tu banda favorita ni siquiera pisa tu localidad, ¿cómo demonios lo vamos a lograr?

Las soluciones no las tenemos nosotros, ni las mismas bandas y la verdad es que no es algo que este en nuestro control, son los gobiernos de toda la República los que deben de hacer algo para asegurar que el entretenimiento y la cultura no se vean mermados por la violencia o el crimen organizado.