Foro: Teatro de la Ciudad

Feist en el Teatro de la Ciudad de México

Feist: Un placer en la oscuridad.

La cantante canadiense nominada al Grammy, Feist, eligió a México para la presentación mundial de Pleasure (2017), su más reciente producción discográfica. El Teatro de la Ciudad Esperanza Iris fue la sede para arrancar su gira internacional con, no una, sino tres fechas: 30 de abril; 1 y 2 de mayo.

El domingo 30, la gente comenzó a llegar con hasta tres horas de anticipación. Un público callado, en su mayoría integrado por gente joven, empezó a formarse tranquilamente en la calle hasta las seis de la tarde, cuando se pudo entrar al recinto.

Las llamadas teatrales comenzaron a las siete de la noche. La primera sonó a la hora; diez minutos más tarde, la segunda. La tercera se tardó todavía más y, cuando llegó, la gente ya estaba impaciente. Algunos comenzaron a silbar y a aplaudir para presionar a la producción. Media hora de espera sirvió para que los últimos en llegar ocuparan sus lugares. Lo que en principio parecía un auditorio medio vacío, resultó un lleno a casi toda su capacidad.

A las 19:30 H, Leslie Feist salió a un escenario parcialmente oscuro. Interpretó con su acompañamiento instrumental de manera perfecta Pleasure, su más reciente disco.

Después de algunos chistes en español, la primera canción en sonar fue, justamente, “Pleasure”. El tema mostró a una Feist más oscura y más experimental en comparación con sus pasados conciertos. Saltaba al ritmo de la música mientras dominaba su guitarra con ritmos y efectos un poco más tirados hacia el grunge o el garage. Todo, sin dejar el estilo que la caracteriza. Es evidente y clara su evolución musical.

Comentó que tocarían el disco entero, de cabo a rabo, ya que estaban celebrando su concierto número 200 en tres años. El público enloqueció; agradecido, no paró de entregar su energía a los músicos durante todo el evento.

Fue acompañada de tres multiinstrumentistas. Uno con violín y percusiones; otro, con bajo y voz (entre otras cosas); y, el último, en la batería. Ella no se quedó atrás en armamento; utilizó dos guitarras (acústica y eléctrica) y añadió varios efectos a su voz.

Canciones como “I Wish I Didn’t Miss You”, “ Get Not High, Get Not Low” y “Lost Dreams”, se escucharon en el orden del disco. También interpretó “The Bad in Each Other", track cuyo videoclip se grabó en México.

La capacidad de interacción de Leslie Feist con el público siempre ha brillado en sus conciertos. Logra entretener a los asistentes al grado en que cooperan en cada juego que les propone; los deja queriendo más. Construye una atmósfera única que dura toda la noche.

La última media hora, Feist la dedicó a temas ya clásicos como My Moon My Man” y Mushaboom”. Con este encore, dejó a la gente coreando la canción y, salió del escenario para no volver. El público quedó totalmente seducido por su magia. 

Feist regresa a la Ciudad de México

La cantautora canadiense Feist se presentará en el Teatro de la Ciudad “Esperanza Iris” de la CDMX el próximo 30 de abril, 1 y 2 de mayo.

Feist dio inicio a una gira con shows íntimos por varias ciudades del mundo, en los que presentará su nuevo material Pleasure, el cual está muy cercano a estrenarse (28 de abril). La gira de la cantautora nominada al Grammy llegará en el marco los 99 años del Teatro de la Ciudad “Esperanza Iris”, este consagrado espacio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La preventa de boletos será este jueves 6 de abril desde el sitio oficial de Feist y la venta general iniciará el viernes 7 a las 11:30 H a través del Sistema Ticketmaster.

Pleasure es el cuarto álbum de larga duración y el primero en seis años en la carrera de Feist, este ya puede ser adquirido en preventa y de esta forma recibirían el track que le da título al disco, “Pleasure”, así como el más reciente sencillo “Century” en el participa el legendario Jarvis Cocker.

Recordemos que han sido varias veces que Feist nos visita, Ciudad de México ocupa un lugar especial en su corazón, por esta razón ha decido presentar al mundo su nuevo disco en nuestro país.

Precios con cargo:

Luneta: $1,403
1PSLAT $1,174
ANFITE y GALERI $937

#FeistEnMéxico

Los Tres se presentarán en el Teatro de la Ciudad

Los Tres celebrarán el 20 aniversario de su Unplugged en el Teatro de la Ciudad.

La banda chilena Los Tres, se encuentra celebrando el 20 aniversario de la grabación de su disco MTV Unplugged, álbum que obtuvo cuádruple Disco de Platino por sus ventas y que lo llevó a ser el disco más vendido en Chile en el año de su estreno.

Es por esto, que la agrupación decidió que nuestro país era un buen lugar para recordarlo y presentarlo en su totalidad, siendo en uno de los recintos más elegantes de la CDMX, el escenario que eligieron para realizar este viaje en el tiempo.

Después de un memorable concierto el pasado mes de octubre en el Teatro Metropólitan, Los Tres regresarán a nuestro país el próximo viernes 17 de junio para presentarse en Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, donde una lluvia de éxitos como "Amor Violento", "Tírate", "Déjate Caer" y "He Barrido el Sol", sonarán igual que en aquel lejano 1995. Un día antes, Los Tres también presentará este show en el Teatro Diana de Guadalajara.

Los boletos ya se pueden conseguir a través del sistema Tickemaster y en las taquillas del Teatro de la Ciudad con los siguientes precios:

  • Galería y Anfiteatro: $350
  •  Luneta y 1er Piso: $650

Los Tres también continúan con la promoción de lo que hasta ahora es su más reciente álbum Por Acanga, con el cual se presentarán en las próximas semanas en el Machaca Fest en la ciudad de Monterrey.

Yo La Tengo en el Teatro de la Ciudad

Una nueva experiencia con Yo La Tengo.

Es muy delgada la división entre un acto interdisciplinario y un espectáculo. En un terreno se ponen a dialogar distintas áreas de las artes, el riesgo de obtener un resultado vacío es latente. El Festival Ambulante, programando la proyección –“ejecución” sería un término más pertinente– de The Love Song of R. Buckminster Fuller para este sábado en el Teatro de la Ciudad, consiguió disipar este prejuicio, numerosas veces confirmado en torno a las presentaciones que buscan unir los parámetros de diversas prácticas. Las posibilidades informativas del documental quedaron trastocadas con una obra espoleada por la ternura y una reflexión histórica que, aunque ideológicamente sospechosa –la apología a las bondades de la producción tecnológica es sumamente cuestionable en tiempos de espionaje, drones y venta de datos privados–, logra construir un retrato fiel de uno de los hombres que reunió todas las preocupaciones y utopías de la segunda mitad del siglo XX: Buckminster Fuller. Arquitecto e inventor, Fuller funcionó como una caja de resonancia de las búsquedas estéticas de su época –es conocida su amistad con John Cage y el coreógrafo Merce Cunningham, artistas que pusieron en el centro al binomio arte y vida–, traduciéndolas a sus propias áreas de creación, que sostuvo manteniendo como punto de partida la relación entre la funcionabilidad y la ética. Fuller consideraba que el diseño industrial y la arquitectura debían estar al servicio del bienestar humano, y esta idea lo llevó a ser un nombre clave para las visiones utópicas de los sesenta.

A través de materiales de archivo y entrevistas, el cineasta Sam Green trazó un retrato de Buckminster Fuller que consideró aspectos tanto biográficos como ficcionales. Como todas las leyendas, Fuller fue causa de rumores cuya veracidad no está científicamente comprobada, pero que complementan la visión documental del también ingeniero y filósofo. Aunque los límites de Green no permanecieron en la narrativa del cine. Provocando una tensión eficaz con lo escénico, el autor narró en vivo datos sobre la vida y obra de Fuller, además de abordar su entusiasmo personal con las ideas y las construcciones de las que el estadounidense fue responsable.

El cineasta también dialogó con la música. Con un score ejecutado en el escenario por Yo La Tengo, la banda, aún cuando fue dirigida por el cineasta, logró imprimir su sello a las imágenes del primer automóvil propuesto por Fuller o a las entrevistas de aquellos que conocieron a uno de los personajes más pastoriles de uno de los países más tecnocráticos del globo. Como nos mencionó Ira Kaplan en entrevista, la intención era formar un documental que demandara la atención de las personas. Además de que Yo La Tengo causó expectativa entre el público, el score que ejecutaron –suave al tiempo que potente, como las mejores producciones de la banda– abrió una nueva posibilidad para Yo La Tengo como agrupación compositora de música para películas, iniciada en The Sounds of the Sounds of Science.

The Love Song of R. Buckminster Fuller es una selección acertada del Festival Ambulante, evento que, además de poner en la superficie la labor social del documental, ha abordado al género también como un formato artístico. Por otro lado, podemos considerar aisladamente la presentación de Yo La Tengo: un concierto sutil, alejado de aquellos espectáculos que, por buscar lo interdisciplinario, no alcanzan otra cosa más que el entretenimiento vacío.

HOPPO! en el Teatro de la Ciudad

El folk de HOPPO! llega a la Ciudad para recordarnos nuestras raíces.

En 2010, Rubén Albarrán (vocalista de Café Tacuva) y Rodrigo "Chino" Aros consolidaron, junto con Carlos Icaza, Juan Pablo "Muñeco" Villanueva y Giancarlo Baldevenito, un nuevo proyecto llamado HOPPO! –palabra de la lengua Iakota (una de las lenguas amerindias) que significa "vamos"-. Esta banda chilena ya cuenta con tres discos, los cuales se rigen bajo un mismo concepto y filosofía: regresar al origen acústico de los pueblos latinos.

"HOPPO! es música que une e integra a quienes la hacen y a quienes la escuchan. Es lo que la banda ha demostrado en sus tres discos de estudio y ahora viene a la Ciudad de México a presentarse para iniciar una ola latina imparable" comentó Rubén Albarrán.

Su sonido puede definirse como folk sin rutas establecidas o fijas, razón por la cual han compartido su música en Argentina, Ecuador, Chile y Estados Unidos. Además de presentarse en la edición chilena de Lollapalooza y Cumbre Tajín en 2012.

Este año, el Teatro Esperanza Iris, mejor conocido como Teatro de la Ciudad, recibe a HOPPO! el 13 de abril para gozar del folk latino que hace vibrar a la sangre latina. La cita es a las 8:30 en Donceles 30 Col. Centro en la Ciudad de México. Y si te quedas con ganas de más, puedes seguirlos al Foro del Tejedor en el Péndulo de la Roma (Av. Álvaro Obregón 86) al día siguiente, es decir, el 14 de abril.

Yo La Tengo en el Festival Ambulante

Yo La Tengo musicalizará un documental sobre Richard Buckminster, inventor del domo geodésico.

Richard Buckminster Fuller fue un arquitecto, diseñador e inventor estadounidense, responsable de la cúpula geodésica, estructura sostenida en principios de la geometría y las matemáticas. The Love Song of R. Buckminster Fuller es un documental de Sam Green que aborda el pensamiento de Fuller. El arquitecto planteó tempranamente problemas de sustentabilidad e impacto ambiental para la construcción y el diseño.

Como parte de la Gira de Documentales Ambulante, se proyectará el documental en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris , musicalizado en vivo por nada más y nada menos que Yo La Tengo. La proyección busca construir una experiencia uniendo la música en vivo con el cine.

Yo La Tengo se presentó en agosto en El Plaza Condesa, presentando su placa Fade, de 2013. La agrupación publicó el año pasado su disco de covers Stuff Like That There, que contiene versiones de The Cure The Parliaments.

yo la tengo

PROMO: Manda las respuestas correctas de las siguientes preguntas con tu nombre completo, a promos@indierocks.mx

1.¿Qué artista del comic realizó la portada del disco Murdering the Classics?
2. ¿En qué año se estrenó el documental The Love Song of R. Buckminster Fuller?

Un encuentro de nicho, una fiesta de todos

En vísperas de la mega marcha, y a sólo unas cuantas cuadras del zócalo, el hermoso y elegante Teatro de la Ciudad fue el escenario perfecto para el show de jazz-improvisación que inauguró la serie de conciertos que conforman la segunda edición de Bestia.

Este encuentro musical busca convertirse en un universo sonoro que da espacio a propuestas arriesgadas que representen lo mejor del rock, el hardcore, el metal, el jazz y la improvisación. Para esta noche, el festival seleccionó un lineup espectacular conformado por los talentosos Han Bennink, Terrie Ex, Marc Ribot, Ray Anderson y Bob Stewart.

El concierto comenzó puntual, sin embargo, durante los primeros veinte minutos aún había gente que entraba y salía o se cambiaba de lugar, lo cual fue un poco molesto ya que al hacerlo hacían ruido que perturbaba la atmósfera.

Los primeros en apoderarse del escenario fueron Ray Anderson y Bob Stewart, que dieron una cátedra de jazz y demostraron un carisma bastante tierno interpretando temas como “Sugar Finger” y “Monk's Mood”, original de Thelonious Monk, de quien ambos músicos son grandes admiradores.

Un momento para recordar fue cuando Stewart contó que un día escuchó una tuba en el Spanish Harlem de Nueva York que lo sorprendió y que posteriormente descubrió lo que era la música banda y comprendió todo.

Para finalizar interpretaron la alegre “Someday” del Sweet Chicago Suite de Anderson y su Pocket Brass Band. El tema hizo que la gente los despidiera con fuertes aplausos y rechiflas, envueltos en una atmósfera completamente alegre.

Tras no más de cinco minutos, en los que se apagaron y prendieron las luces, apareció Marc Ribot vestido completamente de negro. Su presencia generó fuertes aplausos y se alcanzó a escuchar la voz de un hombre emocionado que gritaba ¡Marc Ribot! ¡Marc Ribot! cual adolescente fanática de Justin Bieber o cualquier otro teen idol producto de la mercadotecnia.

El músico se mostró ensimismado, pero a pesar de su nulo contacto con el público, su talento hizo que la interacción no se extrañara. Prueba de ello es que tras finalizar su show acústico, muchos le dieron una merecida ovación de pie.

Para terminar la noche, la propuesta más experimental de la jornada se apoderó del escenario del teatro que estaba prácticamente lleno y fue así que Han Bennink y Terrie Ex mostraron de qué están hechos; bastó el sonido de su batería y su guitarra para que el público ahora si dejara estallar la emoción. Su interpretación fue por mucho la memorable de las tres.

Globos y Hamburgesas: Javiera Mena

En nuestro país, la carrera de Javiera Mena ha crecido a pasos agigantados desde su debut en el 2006 con Esquemas Juveniles, que casi pasó de noche. A pesar del éxito obtenido con la pegajosa "Sufrir" y recientemente con Otra Era, además sus participaciones en festivales como el Vive Latino y Pal Norte, a la cantante chilena todavía le falta sentir un poco más de ese amor mexicano, pues el Teatro de la Ciudad se encontraba cuando mucho a la mitad de su capacidad para el concierto del pasado viernes.

Eran pocos pero dedicados los que esperaban ver a su artista preferida sobre el escenario del recinto porfirista y para cuando ésta apareció con gafas blancas en la consola para la primera rola, “Otra Era”, se pararon para bailar como mejor se podía entre los asientos inamovibles. “Quiero que seas mi novia” y “hazme un hijo” le gritaban las chicas, provocando algunas risas antes de que la gente que probablemente se quedó pensando cómo iba a ser ésto último posible.

Para “La Joya” saltaron al escenario tres chicas en converse y daisy dukes para ambientar las rolas más movidas como “Hasta La Verdad” y el cover a la canción hecha famosa por Daniela Romo, “Yo No Te Pido La Luna”. Las bailarinas se contoneaban como coristas de Robert Palmer, haciendo ademanes cursis que acompañaban el humor de Javiera al parodiar este éxito ochentero.

El momento reflexivo de la noche llegó y Mena se sentó frente al teclado para interpretar “Sol De Invierno” de Esquemas Juveniles, “Un Audifono Tú, Un Audifono Yo” y curiosamente un cover de Grupo Mojado, “Piensa En Mí”. Sí, esa rola.

"Al cabo es viernes, ¿no?", preguntó Javiera trayendo de vuelta el ambiente festivo e invitando al escenario a su amiga Marcela Viejo, a quien vimos hace poco celebrando diez años de trayectoria con Quiero Club. “Mis recuerdos de esta ciudad son de estar comiendo a las seis de la mañana”, dijo Javiera, incitando a su público a seguirla toda la noche.

Tras abandonar el escenario por algunos minutos, la chilena regresó para brindar el momento surrealista de la noche. En medio de sus bailarinas y de botargas vestidas como huevos, tocino, papas fritas y una hamburguesa, interpretó una prendida versión de “El Amanecer”.

Javiera ya pensaba en el desayuno, pero el desmadre estaba bueno, así que subió al escenario su amigo Ulises de Chile y Marcela Viejo de nueva cuenta para bailar entre las botargas. El público, más animado que nunca, disfrutó de lo que sabía era los últimos momentos de un memorable concierto.

Cadencia andina que estremece corazones: Gepe

En sus canciones, Gepe algo de enigmático y oculto, incluso esotérico como él mismo lo acepta, por lo que la noche de brujas resultó el marco perfecto para dejarnos hechizar por sus ritmos, el baile y sus letras.

La gente superó el lento tránsito, el frío y lo concurrido del transporte público, por lo que las butacas del Teatro de la Ciudad fueron llenándose, mientras que globos y pulseras de neón recorrían entre los asistentes para preparar el ritual de uno de los artistas chilenos más queridos en este país, algo que pocos minutos después quedaría más que confirmado.

Un poco antes de las 21 horas, Gepe saltó al entarimado con sus tres músicos y soltó de un solo golpe, “Amigos y Vecinos”, “Bacán tu casa” y “Con un solo zapato no se puede caminar”, donde bajo del escenario para sentir el calor del respetable y detonar la felicidad del mismo.

El chileno tiene la habilidad de cantarte al oído, de hacer sus shows íntimos, no importa que tan grande sea el recinto, la gran mayoría de los asistentes se sentían en la sala de su casa, la interacción con su público lo hace especial, parece contar secretos y explica sus canciones como si debiera explicaciones, un acto que todos agradecemos.

Fue una noche con pequeñas sorpresas y detalles emocionantes; canciones que hace mucho no sonaban y algunas que nunca habían sonado; llegaron “Platina” el estreno de “Marinero Capitán”, “Campos Magnéticos”, además aprovechó para leer un recado procedente del público y dedicar “Fruta y Té”.

El escenario fue abandonado para que él con su guitarra y montado en la batería interpretara una versión acústica de “La Bajada”, “Estado de Visita” y “Ayelén”. De nuevo con banda completa y sus bailarines que entraban y salían, llegó el éxtasis de la fiesta con, “No te mueras tanto”, “Bailar Bien, Bailar Mal”, el estreno de otra pieza llamada “Melipilla”, “Alfabeto”, y “Bomba Chaya” donde por fin salieron los globos guardados y el teatro se convirtió en una pista de baile que hizo olvidar el tremendo frío que se vivía en las afueras.

El ritual ya podía considerarse un éxito, sin embargo, si algo puede salir puede salir bien, saldrá mejor. El escenario fue abandonado de nuevo y el cantante postrado en una silla estremeció almas con “Un Gran Vacío”, para después con la integración de un charango interpretara “Las Flores” de Café Tacvba, arrancando gritos de emoción, y sonó “En la Naturaleza” para cerrar con broche de oro el embrujo de una noche que apenas empezaba.