176618
The Cribs — Night Network

8

The Cribs
Night Network

Sonic Blew / 2020

Artista(s)

The Cribs

Con frenesí, el trío londinense reanuda su camino musical en un viaje directo a los 70.

La desilusión por un terrible enfrentamiento legal, hizo que The Cribs entrara en un paro musical de tres años. Los percances que la banda tuvo con su antiguo representante lograron que el proyecto de los hermanos Jarman se cuestionara diariamente si realmente merecía la pena volver a la industria. No fue hasta hace poco, que el líder de Foo Fighters, Dave Grohl, les tendió la mano ofreciéndoles grabar en los Studios 606. La oferta se aceptó de inmediato y fue en ese lugar donde la banda pudo concebir su anhelada octava duración: Night Network.

Lanzado vía Sonic Blew, este material engloba en 12 pistas el amor que Gary, Ryan y Ross tienen por sus fanáticos, mostrándoles una carta en la que renacen y se desprenden de sus antiguos problemas. No hay tiempo para estancarse. Los de Wakefield dan inicio a esta era con “Goodbye”, un tema que bien pude servir como una especie de prólogo en la que se despiden de sus contratiempos y saludan a quienes siempre han estado ahí para ellos. Un inicio misterioso, melancólico y tranquilo. La fuerza comienza casi hasta el final para poder levantar los ánimos y recibir a “Running Into You”, una canción que desde el primer segundo te llena de alegría; un reflejo del entusiasmo que sintieron a la hora de volver al estudio y grabar. Bajo el rápido sonido de la guitarra y la batería, el trío le canta a esa persona que no puede olvidar.

El cambio de ritmo es evidente en “Screaming in Suburbia”, una pieza sencilla que de igual manera se ve envuelta por el fiel sonido de la guitarra y la constante batería. No es tan enérgica como la anterior, pero el ritmo se mantiene. Al escuchar esta canción se podría volver fácilmente a For All My Sisters (2015). En esta larga duración, The Cribs apuesta por una gran variedad de sonidos y “Never Thought I’d Feel Again” es una muestra de ello, pues esta canción se escribió con el objetivo de hacer algo bailable y positivo; su intento por hacer una rola pop. Un contraste musical de lo que presentó la banda anteriormente con 24-7 rock star shit (2017).

La influencia hacia la música de los años setenta es muy evidente en este material. Se siente la energía con la que fue construido, sin ser necesariamente sofocante. Un reflejo de ello “Deep Infatuation”, una pista más lenta y con voces ahogadas que se apoya mucho de lo que se avecina “I Don’t Know Who I Am”, un single en colaboración con Lee Ranaldo, guitarrista de Sonic Youth, con quien en conjunto presentan un tema orgánico e incluso abstracto. El sonido de la guitarra te embriaga y te lleva a cuestionar lo que ellos plantean: los roles de género y las estructuras sociales ¡Intercambia opiniones sobre la masculinidad!

La idea de crear canciones más cohesivas es algo que también se muestra en Night Network. “She’s My Style” nos vuelve a levantar el ánimo entregando una atmósfera de dulzura, amor y esperanza, en compañía de la misma batería constante que lo da todo en esta nueva era. De la mano, The Cribs presenta “Under The Bus Station Clock”, un track sereno que derrocha alegría; algo que tanto le hace falta a la población este 2020. La melodía termina y da paso a “The Weather Speaks Your Name”, un tema que hace un contraste sonoro al arrastrar los ritmos enérgicos que con anterioridad se habían escuchado, dejando una pista lenta y hasta cierto punto pesada.

“Siren Sing-Alone” retoma la fortaleza de este material con un toque de carisma nostálgica que solo The Cribs podría realizar. Definitivamente una de las mejores canciones de este material que no deja de sorprender para su final, pues para “Earl & Duke” la banda nos presenta un tema con tintineos dulces y delicados donde la voz se vuelve el instrumento principal.

El final de Night Network llega con “In The Neon Night”, una muestra de la energía y sutileza con la que fue realizada el material. La influencia a The Beatles es evidente sobre todo en esta canción en la que sobresale por primera vez el sonido de un piano que se complementa a la perfección con los efectos de sonido galácticos.

Aunque el disco no fue realizado bajo un concepto, se entiende que los hermanos Jarman lo construyeron como una muestra de que sí existe una luz al final del túnel; mostrando una faceta sublime, honesta, y adecuada para estos tiempos complejos en los que uno solo quiere dar vuelta a la hoja, retoñar y seguir avanzando. El trío británico está entusiasmado de poder presentar esta larga duración.