Es un poco complicado recordar cómo era la vida hace ocho años, sobre todo si se pasa entre guitarrazos y bombos poderosos, pero en aquel entonces nació Indie Rocks!, suficiente motivo para que casi 2 mil 20 días después de aquel lejano 2006 se armara una celebración digna de semejante evento.
Como parte de una serie de conciertos, los encargados de la banda sonora de la fiesta de anoche fueron OFF!, banda de punk liderada por el legendario Keith Morris, acompañada por el hardcore de Última Víctima.
Una noche fría pero no demasiado, en la que se cumplió el adagio decadente "el silencio anuncia el ruido de la calma que antecede al huracán" gracias a la intensa lluvia que cayó horas antes en varios puntos de la ciudad, no era nada comparado a lo que se viviría adentro del Foro Indie Rocks!
El reloj rebasaba las 21 horas cuando, sin preámbulos, Última Víctima tomó el escenario para dar un show rápido, en el que cada parón la banda aprovechaba para dar un mensaje de unidad, pidiendo que se acaben los prejuicios y abogando por la alianza de las escenas. Se escucharon “Sublime” y “Muertes sin Razón” para que en “Squalo”, el vocalista abandonará el entarimado y organizara el slam, dejando un show con un buen sabor de boca.
Gracias a esta gran entrada se podían respirar las ansias de la gente por ver salir a la banda californiana. El primero en subir fue Keith, los gritos no se hicieron esperar y en cuestión de segundos la banda estaba montada. Después de un "Hola, ¿Cómo está usted?; Muy bien ¿y usted?" con un atropellado español, y un “We are OFF!" se desató el frenesí: “Void You Out” convirtió el recinto en un manicomio.
Entre golpes, sudor y euforia llegaron “Hypnotized”, “Now I'm Pissed” y “Poison City”, entre otras. Por momentos, Morris interactuó con el público de manera muy particular y no paró de agradecerles por haber asistido a su primer concierto en tierras mexicanas. Mientras las cervezas volaban y la temperatura se elevaba llegaron “Wrong!”, “Wiped Out” y “Panic Attack”, para que posteriormente Dimitri Coats, Steven McDonald, Mario Rubalcaba y Keith abandonaran el escenario.
Fue un show enérgico, nadie esperaba menos; incluso, se desató una pelea que no pasó a mayores. Finalmente, la banda regresó a ponerle la cereza al pastel (cumpleañero) con “I Don't Belong” y “Upside Down”, cerrando un set largo que se fue como agua.
Afuera, una ligera lluvia despedía a los asistentes asentando que también, después de la tempestad viene la calma, pero sólo por un momento porque los festejos no han terminado.
