Wet Baes entrevista a SebastiAn

Uno de los mayores exponentes del french house fue entrevistado en exclusiva para Indie Rocks! por Wet Baes, el joven productor mexicano.

SebastiAn, el músico y productor francés, recientemente publicó su primer disco en ocho años titulado Thirst. En exclusiva para Indie Rocks!, el talentoso productor Andrés Jaime, mejor conocido como Wet Baes, lo entrevistó. Hablaron acerca de sus procesos creativos, la época del ego en la que vivimos, cómo es estar en el estudio con un Beatle y más. Lee a continuación la entrevista completa.

Wet Baes: Te tomó ocho años sacar un nuevo álbum (Thirst) y valió la pena la espera, pero ¿recuerdas cuándo empezaste a trabajar en este nuevo proyecto? ¿Fue hace ocho años o fue después?

SebastiAn: No, empecé hace tres años. Estaba produciendo a otros artistas que conozco.

Wet Baes: ¿Trabajar con estos otros artistas afectó de alguna forma este álbum? ¿O son ideas que vienen solamente de ti?

SebastiAn: Producir a alguien más es un proceso de aprender lo que hace otro artista y yo escondo mi propio estilo porque me tengo que enfocar en lo que hace el otro. En mi álbum es lo contrario, lo que veo en otros influye en lo que estaba haciendo, es como si yo reaccionara a lo que ellos hacían.

Wet Baes: Para mí este álbum tiene balance. Tiene ritmos fuertes y rápidos y en segundos puede cambiar a silencio y una atmósfera tranquila, todo cae en el lugar correcto. Es increíble que puedas mezclar tantas sensaciones en una sola canción. ¿Cómo fue el proceso para mezclar?

SebastiAn: Lo hice todo en casa, grabé solamente con la computadora y un micrófono. En donde sea que estuviera o fuera, en la oficina, o la playa grababa varias cosas. Agarré mi computadora y grababa todo el tiempo, así que lo tomé todo y lo mezclé en casa. Generalmente mezclo conforme será directamente. Todos los pasos, el compresor, ecualizador, todo está abierto cuando trabajo, no hago uno por uno, sino que hago todo al mismo tiempo y cuando acabo, es todo, ya está lista la canción.

Wet Baes: Hablando de mezclas, ¿tienes un tablero análogo en tu estudio? ¿Lo mezclas ahí o usas la computadora?

SebastiAn: No, es la computadora y el software. Me gusta más hacerlo con el mouse porque, de alguna forma extraña, me gusta que haya obstáculos, límites, porque cuando no es posible hacer algo de forma técnica, tu cerebro inventa formas de hacerlo diferente. Me obliga a probar cosas nuevas. Entonces, al usar solamente computadora y software, es simple al principio y yo creo mi propia complejidad dentro del proceso. Es mi forma de hacer la vida más loca, distinta.

Wet Baes: Partes de lo simple a lo complejo, me gusta eso. ¿Cuál es tu proceso para hacer una nueva canción desde cero? ¿Prefieres empezar con percusiones o la melodía?

SebastiAn: Usualmente tengo toda la canción en mi cabeza, toda la idea, y normalmente empiezo con el BPM y me sigo con lo básico, como el bajo y la batería. De ahí empiezo a construir todo alrededor. Lo más difícil del proceso es no perder todo lo que tengo en mi cabeza. Es decir, mientras lo voy haciendo, no perder lo que hay en mi mente, y es un reto no perder la idea y construirla al mismo tiempo.

Wet Baes: ¿Cuál es la última parte qué haces en una canción? ¿Las voces?

SebastiAn: No, de hecho, la voz es más o menos de las primeras cosas que hago dentro de la canción.
Normalmente es poner el bajo y las voces directamente, para poner el ánimo. Me enfoco en las melodías y si quiero hacer algún efecto lo escribo y lo vuelvo a cantar encima para tener diferentes voces o versiones. Pero lo último que hago en un track es editarlo todo.

Wet Baes: El proceso que usas en tus canciones, ¿viene desde el principio de tus días de producción o se fue desenvolviendo?

SebastiAn: Bueno, cuando empecé no había computadoras que lo hicieran todo. Tenía una computadora muy vieja llamada Atari y un sampler, un viejo Akai 2000. Luego, cuando llegó la nueva generación de softwares, pude componer, mezclar y crear porque tenía este piano falso, y las cosas empezaron a ser más interesantes, pude ser más libre y empecé a hacer directamente lo que hago ahora.

Wet Baes: Como productor, sé que te gustan todas las canciones que haces, pero siempre hay una o dos que repites todo el tiempo. ¿Qué canción de este álbum es tu favorita, o fue la que más disfrutaste hacer?

SebastiAn: Me gusta mucho “Yebo”, con Allan Kingdom del último álbum, porque fue muy simple hacer la canción, pero Allan la transformó de una forma que no estaba esperando. Me gusta mucho el giro que le dio al track porque, si se lo hubiera dado a alguien más no hubiera sido lo mismo. Pero de la que estoy más orgulloso de los que hice antes es probablemente “Ross Ross Ross” porque es de las primeras que presenté a Pedro Winter. ¿Sabes cuál es el mejor sentimiento? Cuando no sabes que tú hiciste el track. Es como si alguien más lo hubiera hecho, escuchas una canción tuya y es como si fuera de alguien más, como si fuera un buen recuerdo.

Wet Baes: Sí, sé lo que quieres decir, un amigo me enseñó una vieja canción mía y no podía creer que así fuera como sonaba. Es bueno ver cómo has ido evolucionando, no eres el mismo que hace ocho años. En este álbum podemos escuchar tu sonido, pero a la vez, es un SebastiAn diferente, más maduro. ¿Cuál fue el elemento que marcó tu sonido, que es tu firma, y siempre pondrás en tu música, aún si cambias o evolucionas?

SebastiAn: Trato de poner un puente para entender algo que viene del primer álbum, pero sigue en el segundo, y así conectas los dos. Ese track sería definitivamente “Beograd”, que podría ser una canción del viejo álbum, pero no quería que fuera exactamente lo mismo, y al final cambia y nos trae de regreso al nuevo y es la mejor forma de explicar entre lo que hacía antes y ahora.

Wet Baes: La portada de Thirst me trae muchas preguntas, como si hubiera alguna historia entre el primer álbum y el segundo. ¿Cuál es el significado?

SebastiAn: Algo que siempre supe desde que hice la portada del primer álbum es que haría algo como una película. El primero era irónico acerca de los artistas que se aman a sí mismos y el ego. Era serio e irónico al mismo tiempo, como una broma en cuanto a los artistas en general. Me puse a mí mismo como la representación del odio propio. Recuerdo que fue alrededor del inicio de Facebook y todos empezaban a mostrar su ego. Ahora con Instagram o Twitter, por ejemplo, si te halagas mucho al final puede ser contraproducente.

Wet Baes: Acabas de resumir lo que es el mundo ahora. Entonces, ¿esta nueva portada sería la muerte del ego o el artista enojado consigo mismo?

SebastiAn: Sí, justamente.

Wet Baes: Haces lo que te gusta todo el tiempo, tienes muchas ideas y puedes trabajar en ellas y tener más. Finalmente, ¿cómo es estar en el estudio con un Beatle? ¿Cómo fue tu experiencia con Paul McCartney?

SebastiAn: Amo esta pregunta, nadie esperaba que él estuviera en el estudio. Estábamos en Nueva York en Electric Lady Studio y de repente llegó. Fue realmente bueno, una persona increíble. Me dijo “llámame por teléfono y podemos hablar de guitarras, estoy aquí para ti”. Fue un sentimiento increíble.

He trabajado con mucha gente de la nueva generación y no estoy criticando, pero algunas veces, están llenos de ego, tal vez por inseguridad. Pero cuando Paul McCartney llega, sientes que es alguien que no tiene nada que probar, no hay ego ahí porque quiere trabajar en la música. Y eso fue lo más loco para mí, una vez que estás en la habitación con él, ya no piensas en quién es, es solamente trabajar, bromear. Cuando te vas, cuando ya no está ahí, y estabas con él todo el día, conviviendo es que te das cuenta de que acabas de pasar todo el día con un Beatle.

Wet Baes: Wow, esa es una experiencia única en la vida.

SebastiAn: Sí, y realmente es una persona muy graciosa, le pregunté acerca de un track suyo, “Temporary Secretary”, que es una canción bastante futurista, y me dijo algo muy loco: “Ah, sí, alguien me trajo un sintetizador nuevo y no sabía cómo usarlo, solo lo presioné y empezó a funcionar, y lo puse, pero no sabía qué era”.

 

Créditos: 

Entrevista: Wet Baes

Traducción: Geraldine Flores

Redacción: Jairo Valencia