Suerte Campeón
El Mundo Es un Lugar Horrible Con Detalles Hermosos

Momentos por los que vale la pena escuchar.

La vida sucede de manera tan constante como es juzgada. Es fácil resaltar las virtudes de tal o cual evento haciendo que, en comparación, la cotidianeidad se sienta como un lento desliz sin nada más allá que rutina y poca recompensa. Llegada la muerte, los días mundanos superarán por varios dígitos a aquellos marcados por la euforia, la tragedia o cualquier otra hipersensibilidad. El camino más sensato parece hacerlos valer; tratar de ver la belleza en el torrente de experiencias, apartar la vista de la bruma del día a día y poder sonreír, por la nimiedad de estar vivos.

 

El quinteto peruano da inicio al reciente lanzamiento, bajo la producción de Lucas Rosetto, con la atmósfera distorsionada de “Los Problemas Pasarán”, abriéndose poco a poco llegada la voz de Mateo Vega enmarcada por los sutiles arreglos en guitarra. El tracklist se deja correr persiguiendo el mismo mood de indie prendido fuego en compañía de Karl Neudert y La La Love You en “Tengo Tantas Dudas y Ninguna Respuesta” y “Ay, Qué Dolor”, respectivamente.

Llegados al cuarto track nos encontramos con la primera intención, medianamente clara, de avance sonoro por parte de los sudamericanos, incorporando la distorsión expuesta en los cortes anteriores y balanceándole sin necesidad de colaboraciones externas. “Árboles y Rosas” efervesce así la ya bien dominada fórmula indie, quizá debido al relevo de Vega a Jean Paul Medroa detrás del volante compositivo.

Volvemos a las colaboraciones y con ellas el cambio en la corriente melódica del material, esta vez dando un más que destacable y bien logrado giro de soft folk en compañía de Axolotes Mexicanos, presentando “Estrella de Internet”. El contraste se hace presente con el chispazo de punk lofi inmediato en “Posero” que, si bien captura de mejor manera la energía en vivo de la agrupación falla en el carácter de los arreglos y producción, todo ello con Charlie Parra del Riego en el featuring.

“Los Sueños Que Nunca Se Cumplieron” limpia el paladar valiéndose de la base sónica usada por Suerte Campeón en álbumes como La Edad No Me Deja Pensar, sirviendo de preámbulo para destacar el cambio en la dirección instrumental al correr de “Nunca Podré Hacer las Cosas Bien”. El track parte de la introspección insospechada en el arpegio de guitarra aderezándose con los fills en batería y notas en sintetizador, reventando la crudeza de la letra en lo desprolijo de la ejecución vocal, todo para acabar en un desgarre venido a dulzura en el ocaso del LP.

El Mundo Es un Lugar Horrible Con Detalles Hermosos se despide de nosotros en compañía de Los Planetas interpretando “Tengo un Amigo”, abandonando toda seguridad pop bajo la sensación de blast acústico en “Quemaduras de 3er Grado”, dejándonos con la sensación de un álbum compuesto de momentos memorables y ocasionalmente opacados por la falta de arrojo musical de los integrantes. Suerte Campeón ha madurado desde su debut en 2017, han teloneado para actos como The Drums, han crecido técnica y consistentemente, pero con el cariño que se les ha entregado, la trascendencia de lo hispanohablante y su innegable capacidad melódica es crucial exigir de ellos el trancazo artístico en el que sabemos se pueden convertir. El sonido indie se logró desde el inicio, adelante es la única dirección posible.