125268
Entrevista con Death By Unga Bunga

Entrevista con Death By Unga Bunga

Foto: Marius Eriksen

Siendo apenas unos adolescentes, Death By Unga Bunga inició su largo recorrido musical influenciado por los sonidos del rock de los sesenta y setenta.

Integrado por Sebastian Ulstad Olsen (guitarra, voz principal); Preben S. Andersen (teclados); Stian S. Gulbrandsen (guitarra, voz); Even Rolland Pettersen (bajo) y Ole S. Nesset (batería); Death By Unga Bunga es un proyecto nacido en Noruega que desde hace poco más de una década se dedica a confeccionar una suerte de garage rock mezclado con power pop, surf y toques de humorística psicodélia.

“Somos una banda noruega de un pequeño pueblo llamado Moss situado justo en las afueras de Oslo. Comenzamos a tocar desde que estábamos en la secundaría y por alguna razón, desde entonces, nos hemos mantenido juntos… Somos geniales ¡realmente, realmente buenos!”.

No podemos negar que Noruega está asociada con cierto tipo de sonido frío y obscuro, así es que si se preguntan de qué manera un proyecto como DBUB pudo florecer ahí, he aquí la respuesta.

En Moss, desde finales de los setentas se comenzaron a formar muchas bandas de punk rock que más tarde emigraron hacia el power pop. Por otro lado, a principios de los noventa, hubo un revival del rock de los sesenta, de manera que los proyectos generados de esas dos oleadas terminaron convirtiéndose en los mentores que introducirían al quinteto de jóvenes a un sonido fuertemente influenciado por bandas americanas del que más tarde se nutrieron. “Nuestro sonido va directo y a la cabeza, no nos preocupamos por tener esas largas y Pink Floydescas partes en las canciones, nos parecen aburridas. Somos más como una patada voladora que golpea tus bocinas mientras alguien ríe histéricamente. Una divertida y rápida patada en tu cara”.

Su peculiar nombre fue tomado del ultimo álbum editado por la banda de garage californiana The Mummies, además de ser el punchline de una vieja broma sobre aborígenes. Comenzaron a grabar discos y tourear desde el 2007, hace una década el garage no era un sonido común en Oslo, por lo que de manera lenta, pero con seguridad se hicieron de una base de fans que los llevó a considerar vivir de la música.

Foto Nick Malte

La totalidad de su primer álbum Juvenile Jungle (2010), se compuso de los únicos diez temas que llevaban tocando durante años. En ese entonces los chicos eran tan jóvenes que el productor Bjarne Stensli tenía que enviar permisos para que pudieran ausentarse de clases y así asistir al estudio de grabación. “En ese entonces no sabíamos nada acerca de de grabar, sin embargo esas fueron las primeras canciones que escribimos juntos. Todo era nuevo, desconocido, aterrador y excitante a la vez. Pensábamos que solo íbamos a grabar un par de demos, pero terminamos haciendo un álbum y consiguiendo un contrato. Ahora grabamos todo nosotros mismos. Nos hemos convertido en todos unos geeks”.

Le siguieron The Kids Are Up To No Good (2012) y You're An Animal (2013). En 2016 editaron Pineapple Pizza, álbum de estructuras sólidas y accesibles en donde lograron crear una infecciosa continuación de su pasión por el sonido de los sesentas y setentas. Este año regresan con So Far So Good So Cool, su quinto material de estudio que se estrenará el próximo 6 de abril vía Jansen Records.

“Grabamos el nuevo disco nosotros mismos en el estudio donde ensayamos, así es que este material ¡es completamente nuestro! Hacerlo de esta manera implicó un esfuerzo grande, pero creemos que salió perfecto. Líricamente cantamos acerca de la desesperanza romántica, el sentirse perdido y la sensación de querer escapar de cualquier forma. Pero también abordamos temas muy importantes como beber cerveza fría con tus amigos o de que manera ser completamente cool”.

Sus presentaciones son caracterizadas por un alto nivel de energía en donde la barrera que divide el escenario de la audiencia se diluye, y la mayoría del tiempo los músicos terminan codo a codo con su público. “Es un subidón. Nos divertimos mucho tocando, es muy adrenalínico compartir nuestra música con la audiencia. Grande o pequeña no importa, la energía es siempre es buena”.

Si tu curiosidad se ha despertado, écha un vistazo al video de “Into the Night” para que termines de enamorarte.