Only God Forgives: Un viaje hacia las sombras

Only God Forgives

Nicolas Winding Refn

Ryan Gosling, Kristin Scott Thomas, Vithaya Pansringarm

Dinamrca / Francia / Tailandia / EUA / Suecia, 2013

A Grand Elephant / Bold Films / Film I Väst

Muchas veces, la experiencia cinematográfica se trata más de sensaciones y percepciones que de entretenimiento. Hay quienes disfrutamos de una película por lo que la vida cotidiana no nos hace sentir, pues nos aleja de la rutina y nos acerca nuevo conocimiento sobre cosas que jamás imaginaríamos presenciar. El cine de vanguardia, principalmente, busca exaltar las sensaciones en los espectadores.

Only God Forgives regala a sus espectadores un viaje metafórico al inframundo; no es la primera ni la última, pero si destacada y muy popular. En la corrida de festivales dejó a todos polarizados entre abucheos y alabanzas; Nicolas Winding Refn había propuesto una película completamente contraria a Drive (2011), ya no más Hollywood ni cultura pop. Only God Forgives regresa a las entrañas de la venganza y la violencia llegando a límites pornográficos que, reflexionando un poco, no es nada que no hayamos visto antes.

La película habla de la no venganza, cuyo protagonista es un hombre pasivo e inactivo que solo reacciona bajo órdenes. Un hombre reprimido por un pasado escabroso del cual sabemos poco, excepto por destellos que presumen violencia y ruptura con su familia. Vive en las sombras y es ahí donde nos encontramos con él.

Bangkok, sede de la historia, se vuelve un laberinto tortuoso donde la sangre y los líquidos de la prostitución corren libremente por las calles. Un mundo donde su humo nos ahoga, sus neones rojos sofocan, su música es entonada por aquellos que añoran la libertad y el amor. Un espacio que nos encierra sin darnos aire para respirar.

Julian, un Ryan Gosling contenido en todo momento, vive gracias a los personajes caricaturizados que lo rodean. Nada nuevo en el trabajo de Winding Refn que recuerda al cine negro por sus secundarios exagerados, mismos que mueven la historia que Julian va frenando, promoviendo con violencia la no violencia.

Al final, Winding Refn agradece a Alejandro Jodorowsky(también lo hizo en Drive, pero de una forma más sutil) y con esto los espectadores tienen la clave para desencriptar el rompecabezas que acaban de experimentar. Los símbolos son claros y obvios, los colores y la música de Cliff Martinez cobran sentido.

La película es completamente alegórica y simbólica, es una cinta que se debe de sentir y no juzgar por la falta de acción por parte de nuestro “héroe”. Only God Forgives es atrevida al no contar nada, sino exponer de forma experimental y vanguardista un concepto, pero esto no justifica que un filme se base en metáforas sobre la violencia y la melancolía. Recuerden que todos gustan de ver lo prohibido y lo tabú.

Only God Forgives forma parte de la selección que se presenta actualmente en la 55 Muestra de la Cineteca Nacional cinetecanacional.net