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Para continuar con la promoción de su más reciente álbum de estudio, New, Sir Paul McCartney compartió el videoclip oficial correspondiente al sencillo "Early Days".
El audiovisual fue grabado en distintas locaciones entre Mississipi y Louisiana bajo la dirección de Vincent Haycock , y en él, además de ver a McCartney, podemos apreciar un cameo del célebre Johnny Depp.
Tras la sorpresa que fue toparse a Miley Cyrus en la canción "Hunger of the Pine" de alt-J. la agrupación inglesa arriba con un nuevo tema titulado "Left Hand Free", segundo adelanto de su próximo material de estudio, This Is All Yours.
Tito, Miky, Paco y Randy llegaron al Auditorio Nacional, acompañados por el icónico rapero estadounidense DMC (integrante de Run DMC), para celebrar su aniversario número 18 y presentar su nuevo disco, Agua Maldita.
A pesar de los múltiples bloqueos, el tráfico y la lluvia; los seguidores de los 'molochos' encontraron la forma de llegar al Auditorio desde muy temprano para no faltar a la importante cita. El concierto comenzó a las 8:30 de la noche con la actuación de DMC, mientras que el lugar se llenaba.
Con un Auditorio Nacional completamente lleno y un público más que animado que no paro de corear todas y cada una de las canciones que sonaron, incluyendo las del nuevo material. Los asistentes también aprovecharon las pausas para gritar cosas bonitas y finas como “putos los de abajo”, “chichis pa la banda” y otras similares.
Al terminar “Fuga”, Molotov colaboró con DMC en “Again n’ Again” y “La Raza Pura es la Pura Raza”. Luego llegó “Amateur”, la canción que, en palabras de Tito, es la historia de la banda, y al terminar el mismo integrante presentó “Chinga tu Madre”, diciendo “Y esto se lo pueden dedicar a quien quieran en esta bonita y desorganizada ciudad”.
La música siguió con “No Existe”, “Llorari”, “La Necesidad”, “Quien se Enoja Pierde”, “Gimme tha Power”, “Frijolero” y “Hit Me”; Miky aprovechó una pausa para decirles salud a todos los presentes, a quienes les agradeció por estar con el grupo en el festejo de sus 18 años.
El público ya estaba muy prendido y comenzó a moverse de sus asientos hasta llegar al escenario, los pasillos de la zona de abajo del Auditorio también se llenaron de gente que ya no se movió de ahí y algunos aprovecharon el momento para organizar el slam; mientras esto pasaba, se escucharon las dos versiones de “Marciano”, “Changuich a la Chichona”, “Más Vale Cholo” y “Dance and Dense Denso”.
Molotov se despidió, sólo para regresar a los pocos minutos y aventarse un muy buen cover de “Walk This Way” a lado de DMC. Randy le cedió la batería a Paco y aprovechó la ocasión especial para cantar “Molotov Cocktail Party” igual que en sus mejores tiempos.
Al terminar “Mátate Teté”, sonó “Puto”, uno de los temas emblemáticos del cuarteto. El final del concierto llegó con “Rastamandita”, tema en el que algunas fans subieron al escenario para bailar y cantar, lo cual marcó el cierre de una gran fiesta.
Molotov lo hizo muy bien, demostrando que sigue siendo una banda vigente y que todavía tiene mucho que aportar a la escena del rock nacional.
Sin botas no hay diversión
Para llegar a la granja Worthy, la tercera productora de leche del Reino Unido, hay que tomar un avión a Londres, luego un express a la estación London Paddington, un tren a Somerset y finalmente un bus al llamado “site” del festival.
Poco antes de llegar, el camión de doble piso subió una colina, desde la que pudimos tener nuestras primeras impresiones: cientos de toldos de colores, alineados cual campamento militar romano, rodeaban el valle entero.
Después de recoger nuestras acreditaciones caminamos unos buenos minutos hacia la zona de camping, nos instalamos y fuimos a explorar. Eran ya las 3:30 de la tarde y lamentablemente nos habíamos perdido a Rodrigo y Gabriela, Band of Skulls, Mad Professor, Vintage Trouble, Crystal Fighters, Lily Allen y Wild Beasts.
Mientras tratábamos de entender la dinámica de las calles que llevan a los escenarios, una tormenta estilo verano en el D.F. convirtió el suelo de toda la granja en un lodazal que, en ciertas zonas, cubría los pies completos. Tan fuerte fue la lluvia que, por primera vez en los últimos años, la producción decidió cancelar la actuación de varios músicos.
Como buen novato, arruiné mis tenis y tuve que comprar unas botas. Veinte libras (unos 466 pesos) que, aunque me dolió gastar, me aseguraron la diversión el resto del día, y del fin de semana; las botas son un must, no por nada el logo de la app de Glasto es justo unas botitas de lluvia.
Hablamos con nuestros amigos de Troker, que ya estaban “on site” y fuimos a entrevistarlos en el backstage del West Holts Stage, donde también pudimos ver a tUnE-YaRdS y a Jurassic 5, mientras en otros escenarios, Elbow, Sophie Ellis-Bextor, Tinariwen y Four Tet completaban la tarde.
Cuando salimos del West Holts ya anochecía (a eso de las 9:30 p.m.) y apenas tuvimos tiempo para caminar entre la multitud hacia el Pyramid Stage, en el que el gran cerrador de la noche, Arcade Fire, se llevó las palmas y los gritos de más de 90 mil personas que corearon, saltaron y hasta prendieron bengalas que hicieron juego con algunos fuegos artificiales.
Al mismo tiempo, Skrillex, Kaiser Chiefs, MIA y Metronomy hacián lo suyo en el Other Stage, John Peel Stage, West Holts Stage y The Park Stage, respectivamente.
Poco después de las 12 de la noche nos fuimos a descansar. Nuestro camping, que se encontraba en las afueras de la granja, no escapó a la fiesta: a más de tres kilómetros de distancia, el Bloque 9, que alberga pequeños escenarios de música electrónica, y el Arcadia, un stage que recuerda Mad Max, vibraban al beat del house, techno y trance, aderezados con rayos laser verdes y bolas de fuego que casi alcanzaban el cielo.
De todo y para todos
Sábado. En la granja (y la mayor parte del Reino Unido) amanece a las 5 de la mañana. La fila para bañarse es tremenda, alcanzamos a contar 120 personas, así que obviamos el acto matutino, honrando de cierta forma el espíritu libre, hippie y medieval de esta gran fiesta.
Fuimos a desayunar. Si no les gusta comer mal, Glastonbury no es para ustedes (bueno, Inglaterra no es para ustedes). Nada baja de cuatro o cinco libras (unos 60 pesos) y nada sabe rico, pero qué importa cuando el primer acto del día incluye a Kelis, que con un vestido rosa inició covereando a Nina Simone en el Pyramid Stage.
Acto seguido, Warpaint en el Other Stage, frente a unas 35 mil personas. Cuando nos dirigíamos a The Park Stage para presenciar el soporífero acto de Nina Persson (ex The Cardigans) echamos un vistazo a Arcadia, que estaba vacío pero tenía un show de car smashing, y Glade (donde tocaba Alexis Taylor).
También pasamos por el Acoustic Stage y la zona para niños, un lugar con juegos y un pequeño escenario, porque vale la pena destacar que Glasto es un festival 100% familiar, incluso tiene una zona de camping exclusiva para familias.
Justo al lado de The Park hay una colina en la que montaron la palabra Glastonbury, muy al estilo de Hollywood. Subimos y tuvimos, por fin, una visión completa de la magnitud de este festival. Justo en ese momento, Lana del Rey comenzaba a tocar en el Pyramid. Escuchamos un par de canciones al final de su show, que muchos alabaron. De regreso hacia la carpa de prensa, alcanzamos a escuchar un poco de Kodamine. Después, un poco del legendario Robert Plant en medio de la lluvia, que no bajó los ánimos de nadie para presenciar el acto del vocalista de Led Zeppelin.
Después de una mala comida, nos lanzamos al William’s Green para checar a Fujiya & Miyagi, que aunque tuvo poco quórum, prendió. En el camino hacia el Pyramid, para ver a Jack White, vimos un rato a los Manic Street Peachers y luego nos topamos con un quiosco en el que estaba tocando Spoctet, un septeto de jazz/balcan/folk muy divertido.
White, como era de esperarse, abarrotó el escenario principal y saludó a los asistentes con un: “sé que llevan sentados en el lodo todo el día, y que eso no es digno, pero ya estoy aquí”. Frente al escenario, ondeaban varias banderas mexicanas.
Por cierto, mucha gente lleva banderas en astas flexibles, con distintos pendones o artículos en la punta, para identificar sus grupos. Aunado a esto, el festival coloca banderas en la mayoría de los escenarios y carpas, lo que le da un aire medieval al evento. Y si le sumamos el lodo (volvió a llover este día), el flashback es casi perfecto.
Para cerrar la jornada nos lanzamos al DJ set de Pillowtalk en el Beat Hotel, donde la fiesta no pudo ser mejor; luego un poco de Pixies, que hicieron valer su condición de ídolos; y finalizamos con el obligado de la noche: Metallica, cuyo show inició con un video en el que Lars y compañía están vestidos de osos que cazan a los cazadores (nos imaginamos que por toda aquella polémica que hubo de James como cazador). Luego, poder absoluto frente a miles y miles de personas que encendieron bengalas, corearon y jugaron con pelotas negras que la banda lanzó. Un digno cerrador que, cuenta la leyenda, ya moría por tocar acá.
Sunday/funday
Tercer y último día. La gente siempre con la mejor actitud. Además, para nuestra fortuna, el sol salió y, aunque las nubes amenazaban con soltar otra lluvia, eso no sucedió. El lodo se convirtió en una masa dura y caminar era más fácil.
Del camping nos fuimos directo al West Holts Stage, uno de los más importantes del festival, donde a las 2:30 p.m. tocaría Troker. Parte de nuestro viaje fue para seguir su camino en Glasto, así que una vez más los saludamos en backstage y disfrutamos su concierto. Ante unas 1500 personas, los de Jalisco demostraron por qué repitieron por segundo año consecutivo en la granja. Energía, interpretación exacta y todo el poder mexicano en el escenario.
Decidimos pasar buena parte del día detrás del West Holts, donde pudimos ver a los chicos de Disclosure jugando unas retas de ping pong, e incluso una parte del México – Holanda con Troker. (Sí, amigos, no era penal, pero déjenlo ir).
Disfrutamos a Public Service Broadcasting (que invitaron a Tibu y Gil de Troker al escenario), luego a The Lee Thompson Ska Orchestra, con toda la esencia de Madness y a The Wailers (pura buena onda).
También alcanzamos un par de canciones, a lo lejos, de The Black Keys, y mientras Ellie Goulding, Bonobo, Chance the Rapper y James Blake se presentaban en los otros escenarios principales, nosotros nos preparábamos para el gran cierre con Kasabian y Massive Attack que, como profetas en su tierra, volaron las expectativas de sus fans.
Para cerrar con broche de oro, regresamos al backstage del West holts, donde un bar perfectamente adornado con motivos mexicanos (hasta un altar de día de muertos) recibió a Troker por segunda ocasión en el día. Ellos fueron los elegidos para amenizar la fiesta de la producción, que fue un éxito rotundo.
Para nosotros, el final de una experiencia irrepetible. Como bien escribió Gruff Rhys en el programa de mano oficial de Glasto: “aquí no tienes que ver bandas para pasarla bien”. Y es cierto, porque la gente, tanto asistentes como voluntarios (todos los que trabajan en el festival lo son), no tiene pretensiones, pero sí una gran actitud.
Cabe destacar que en Glastonbury no hay marcas, no ves escenarios brandeados ni exclusivas, y esto le da una magia especial, independiente y real. Aunado a esto, puedes ver a Noel Gallager o Jamie xx paseando por las calles enlodadas de la granja y la oferta musical y de arte es tan diversa como el mundo. A mí nunca me han gustado las granjas, pero a ésta hay que regresar.
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Esta cobertura fue posible gracias al apoyo de la Embajada Británica en México.
Tras compartir algunas imágenes y sorpresas a través de sus perfiles en diferentes redes sociales, Avenged Sevenfold publicó el videoclip para "This Means War" dirigido por Rafa Alcantra, sencillo que forma parte de su más reciente entrega, Hail To The King, lanzada el año pasado.
El video recoge algunas escenas del tour que ofrecieron por América Latina, el cual incluyó una fecha en México.
Engendrada en Barranquilla, Colombia, 69 Nombres es una banda de rock que surgió hace casi 15 años por la iniciativa de Jose Carlos María, Hans Bolívar, Orlando Donado y Oliver Camargo. Como muchos, empezaron tocando en su garage; afortunadamente, con el paso de los años han crecido dentro de la escena latinoamericana y con esta tercera entrega, cuyo título es homónimo al nombre de la agrupación, quieren colocarse como un fuerte exponente del rock en español.
En entrevista para Indie Rocks!, Hans (guitarrista) y Orlando (baterista)compartieron sus impresiones sobre el nuevo disco y su experiencia en la industria musical.
Si bien el inicio de cualquier agrupación no es fácil, la época durante la que se formaron era bastante complicada: "Empezaba a calmarse un poco el tema del narco, las peleas entre cárteles y toda esa maraña pública. Finalizaba esa etapa dolorosa para Colombia y, gracias a Dios, se comenzó a alivianar la cosa mientras estábamos por nuestro lado haciendo música", comentó Hans.
Su propuesta contrastaba con la oferta de aquel entonces en su país, en la que artistas como Shakira eran estrellas u otros que mezclaban sonidos más tropicales y de fiesta. "Siempre hemos sido como bichos raros porque, en realidad, la mayoría de las bandas en Colombia fusiona su música con ritmos latinos. Podemos atrevernos a decir que somos una de las bandas de rock en español que realmente hace eso: rock en español", añadió.
Sobre el nombre de la banda, Orlando dijo que coincidió con que durante su formación, tenía un logo de dos lagartijas haciendo un 69, lo propuso a sus compañeros y éstos aceptaron. Posteriormente, el logotipo se convirtió en un símbolo de unidad y solidez; en algo cíclico que les ha permitido seguir unidos.
"Lanzamos nuestro primer disco, Alba, en 2002; éramos unos chamacos y todos estábamos estudiando: Orlando, publicidad; yo, comunicación social y José, administración. Nos conocimos a los veintitantos gracias a la música y todo ha fluido muy bien hasta el sol de hoy" declaró Hans.
A raíz de esto, ofrecieron conciertos en Colombia con bandas como Café Tacvba y Molotov, después se tomaron un breve descanso con la intención de replantear su giro musical, hecho que los llevó a contactar a Phil Vinall, actual productor de Zoé y que también trabajó con bandas como Placebo y Pulp.
"Después de ese descanso comenzó una nueva etapa: empezamos a buscar productores porque nos cuestionábamos qué haríamos con la banda y el sonido; queríamos hacer algo nuevo para el siguiente disco. Fue cuando contactamos a Phil para que nos dirigiera; sorpresivamente le entusiasmó el proyecto y ya tenemos cinco años trabajando juntos", añadió el guitarrista.
En 2009 publicaron Tiempo, EP con un pequeño tiraje que no tuvo una distribución física como tal porque era algo exclusivo para las conciertos. La canción “Tiéntame”, incluida en ese material, sirvió de soundtrack para una telenovela colombiana, hecho que le dio popularidad y provocó que la banda decidiera incorporarla en su más reciente álbum, junto con los demás temas del EP, más ocho tracks inéditos.
Las oportunidades de crecer en un país que parece no interesarse en este género son pocas, por lo que sobresalir como una banda independiente como ellos es prácticamente imposible. Debido a esta situación, la banda se refugió en México, cuna de grandes exponentes que han emigrado de Sudamérica para hacer promoción aquí.
“El último año hemos tenido la oportunidad de tocar en México junto a Zoé, Fobia, Julieta Venegas, DLD; y nos hemos presentado en Rock al Parque desde 2010, la única plataforma para música como la nuestra", afirmó Hans.
Hans y Orlando sostuvieron que el público mexicano ha sido muy receptivo y a pesar de no conocerlos totalmente, los han recibido con los brazos abiertos y su cantidad de fans se ha multiplicado, razón por la cual decidieron hacer todo el proceso de promoción y lanzamiento del disco en nuestro país. Muy pronto podrás encontrar 69 Nombres en iTunes y disfrutar el video de su primer sencillo “Espiral”.
La agrupación regiomontana Mississippi Queens continúa promocionando su álbum debut, En los Tiempos de la Bola, del cual fue publicado el sencillo "Los Gitanos" y ahora comparten "Los Días Felices", acompañado de un videoclip dirigido por Marcelo Quiñones.
De acuerdo con la banda, este tema habla sobre los patrones, reglas, ideologías, costumbres y prejuicios que la sociedad impone al individuo desde que nace y cómo éste, conforme va creciendo, va descubriéndolos.
Desde 1982, cuando el mundo entero se rindió ante The Smiths, el personaje que se mostraba al frente de la banda ha enamorado corazones y hasta salvado vidas.
Es innegable la influencia de Morrissey en la música contemporánea y su impacto en el estilo de más de un compositor; pero su importancia no sólo radica en la industria musical, sino en la estrecha relación y conexión que mantiene con sus fans.
Entre extractos de canciones, portadas de álbumes, su nombre y hasta su rostro, miles de personas alrededor del globo portan orgullosas tatuajes de Mozzer y aprovechan cualquier oportunidad para demostrar su cariño y devoción.
Para no dejar que los mensajes de amor y apoyo ante el actual estado de salud de Morrissey se pierdan en el frío mundo cibernético, fue creado el sitio letterstomoz.com, en el que, como su nombre lo indica, puedes compartir todo lo que tengas atorado en la garganta y quieras hacerle llegar a Mozz.
La página fue presentada al público hace apenas unas horas y ya fueron publicadas varias cartas, así que no dejes pasar más tiempo.
El multi instrumentista y productor Geoff Barrow, también integrante de Portishead, se unió al actor y compositor Ben Salisbury para la creación de la banda sonora correspondiente a la cinta Ex Machina, la cual fue escrita y dirigida por Alex Garland.
Anteriormente, Barrow y Salisbury trabajaron juntos para el soundtrack de la película Dredd (2012), mismo que por distintas razones no se utilizó y posteriormente fue lanzado como el álbum Drokk: Music Inspired By Mega-City One.
Se espera que esta película llegue a las pantallas de los festivales de cine de otoño, aunque su estreno en salas comerciales está programado hasta el próximo año.
En un mes llegará a las tiendas Television Man, el esperado nuevo álbum del trío Naomi Punk, sucesor de su gran debut, The Feeling, editado en 2012.
Hace unas semanas, Travis Coster (voz y guitarra), Neil Gregerson (guitarra) y Nic Luempert (batería), estrenaron el sencillo que le da nombre al disco y hoy arriban con el segundo adelanto, "Firehose Face".
