El místico sonido de Igor de Carvalho

Originario de Recife, Brasil, el joven cantante y compositor Igor de Carvalho ha logrado colarse en el gusto de la gente que se identifica con su música, goza de sus presentaciones y le otorgó a su debut altas ventas e innumerables descargas digitales.

La trayectoria de Igor se remonta tres años atrás, cuando formaba parte de la agrupación Zé Bonina, cuyo papel principal era escribir la mayoría de las canciones que conformaban su repertorio y, al mismo, encargarse de la voz.

En 2011 decidió abandonar la banda para dar rienda suelta a su carrera en solitario y en agosto de ese mismo año publicó su primer EP, conformado por seis canciones que fueron defendidas y bien aceptadas por las personas que se interesaron en él.

El proceso de grabación de dicho material fue totalmente independiente, no existió apoyo o patrocinio alguno, pero sí hubo una hermandad entre amigos y otros compositores que abrazaron el proyecto y colaboraron en él. Posteriormente llegó el primer álbum de larga duración de Igor titulado A Lâmpada e o Opaxorô, el cual, sin mayor promoción, fue colgado en internet.

El sonido que ofrece este brasileño tiene referencia en géneros como el manguebeat, tropicalismo y bossa nova; además de que está presente la escuela de Caetano Veloso, Gilberto Gil y Tom Zé. Igor de Carvalho afirma que parte de su inspiración se basa en la religión africana y la contemplación del universo sagrado, uno de los mayores pilares de la cultura brasileña.