180621
Entrevista con Balthazar

Entrevista con Balthazar

A la espera de una nueva era.

Han pasado dos años desde que Balthazar presentaba su disco Fever, una placa que les devolvía el éxito en su país y en diversas partes de Europa. Pese al éxito de su propuesta, la agrupación de origen belga se dio un descanso y sus integrantes se embarcaron en proyectos solistas; hoy regresan con un nuevo disco Sand título que evoca lo difícil que representa esperar en plena pandemia, pero con la firme esperanza de que esta será la puerta que los traerá de vuelta a los escenarios, como comenta Maarten Devoldere en entrevista para Indie Rocks! 

Ahora todo es muy difícil, quizá sea cierto, pronto todo va a estar abierto y todos van a querer salir de gira, pero también creo que mucha gente va querer asistir a los conciertos y celebrar la vida; así que después de un año y medio, quiero creer que esto va a regresar un poco a la normalidad. En estos momentos es difícil en cuestión económica, pero esperemos que para el verano podamos finalmente salir de gira”.

Si bien la situación no ha sido fácil, la pandemia se convirtió en una especie de nuevo integrante para la banda, pues debido a las restricciones causadas por el COVID-19, la agrupación comenzó el proceso de creación vía online, lo que llevó al uso intensivo de samplers de batería, dando un sonido más electrónico. ¿El resultado?, cerca de 40 demos que terminaron en los 11 temas de esta nueva producción. 

“Somos muy afortunados de tener mucho tiempo siendo una banda, entonces nos entendemos muy rápido, con pocas palabras. Creo que sería muy difícil hacer un disco debut de esta manera (risas), pero en nuestro caso funcionó, creo que tiene que ver con el hecho de que nos gusta sentirnos retados y crear a partir de la búsqueda de soluciones; para nosotros fue emocionante porque teníamos restricciones lo que te obliga a ser lo más creativo posible en estos casos”.

Esa creatividad también se puede percibir en otras áreas dentro del disco: en general hay una sensación de baile melancólico, que ellos relacionan con la búsqueda constante de escapismo. Además de jugar con las voces del disco; algunas cantadas en falsete y algunas inspiradas en las voces corales que grabaron en algunos temas.

Esa dualidad de emociones se percibía en sus anteriores trabajos a través de sus letras, esta vez no es diferente; si bien, hay un hilo conductor, la distancia y el encierro hicieron que fuera difícil empatar las historias de Devoldere y su compañero Jinte Deprez, quienes no se dieron cuenta de la temática del disco sino hasta la etapa final.

Descubrimos que había un tema constante en el álbum. Durante el proceso por lo general, nos dedicábamos a escribir temas muy personales, principalmente de amor. Esta vez nos dimos cuenta que estábamos escribiendo canciones acerca del tiempo, acerca de esperar, o de no querer hacerlo, sobre la impaciencia que eso causa, por eso el título del disco, por ser la arena que transita en un reloj de arena.”

En la actualidad, la banda cuenta con ciertos apoyos por parte del gobierno, para los artistas y gente que perdió su empleo a causa de esta enfermedad. Aunque no considera un apoyo importante lo generado por plataformas de streaming, entre eso, y lo generado por salir en la radio son herramientas que los han mantenido a flote.

La esperanza de volver a tocar es el pensamiento actual de la banda, desde hace unas semanas se encuentran ensayando para un futuro set, que incluirá músicos en vivo, por lo que esperan darle nueva a vida a esta producción. Sobre si han hecho el mejor disco de su carrera para Devoldere es solo una meta más en la historia del proyecto.

“Nunca sabes la verdad, pero llega un punto de nuestras vidas en el que tenemos que hacer el disco que queremos hacer, nunca pensamos que vamos a hacer el mejor trabajo de nuestras vidas, pero creo que esa es la meta para algunas bandas, pero en nuestro caso siempre pensamos que hacemos nuestro mejor disco, igual es una manera de motivarnos a hacerlo mejor en la siguiente aventura”.