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Sharon Van Etten: el amor en todas sus facetas

Sharon Van Etten: el amor en todas sus facetas
Sharon Van Etten: el amor en todas sus facetas

Artista(s)

09/Jun/2014

Sharon Van Etten

Are We There

Jagjaguwar

2014

Después de un par de años, Sharon Van Etten retorna con su cuarta placa de estudio, Are We There, cuya producción estuvo a cargo de Stewart Lerman, con quien trabajó para el segundo soundtrack de la serie de HBO Boardwalk Empire.

En este material, Etten pasa de lo acústico a una composición más elaborada que hace juego con su voz, misma que conserva una tonalidad colorida, variada para cada canción. El viaje inicia con “Afraid Of Nothing” ejecutada a piano y violín, con letras esperanzadoras para todo aquello que continúe después de lanzarse hacia una relación amorosa.

Cabe mencionar que los discos de la cantautora siempre han tenido al amor como tema imperante, que si bien puede sonar a cliché, lo lleva a través de diversas rutas, pues los idilios no se mantienen estáticos; hay un antes, un durante y un después, por lo que Sharon adopta una nueva perspectiva, los comprende y refleja en 11 tracks.

Para “Taking Chances” maneja un órgano que fondea a partir de la mitad y que incluso rememora a “Auburn and Ivory” de Beach House, sin dejar de lado los loops y batería, mientras que “Your Love Is Killing Me”, tema seleccionado por Pitchfork como la ‘Mejor Canción Nueva’, es el más largo y sobresaliente de todo el material. La manera en que Van Etten juega con su voz es impresionantemente desgarradora; evoca un profundo dolor al desencuentro, una agonía casi enloquecedora.

Por otro lado, “Our Love” y “Tarifa” son canciones mucho más relajadas, baladas, mejor dicho. Ambas dejan sumergirse calmadamente en la melancolía de los buenos recuerdos y del por qué de la separación, mientras que “I Love You But I’m Lost” es la culminación de una entrañable desnudez adoptada por la solista, quien deja entrever la situación de cambio, decepciones y aceptación justo a mitad del disco.

El crescendo va de la mano con “You Know Me Well” y “Break Me”, en las que retoma fuerzas y las transforma en un “You Will Never Change” y “I Know”, cuyo contenido, tal como los títulos lo dicen, no hay nada más que hacer, el amor está roto. En ésta última, muy al estilo Nick Cave (pues es sabido que ella lo teloneó en varios shows y efectivamente, algo aprendió de él), se sienta en su banquito y toca el piano acompañado de su voz.

“Every Time The Sun Comes Up” es el tema de cierre para una travesía plagada de altibajos, con la cotidianeidad como factor especial para la construcción de un asunto que si bien no es importante, afecta en gran medida la vida.

Sharon Van Etten recoge las piezas de su renovado panorama hacia el amor y lo convierte en un álbum digno de quedar en la posteridad, cuya escucha se puede dar en cualquier tarde, bebiendo una taza de café, reflexionando lo que ha sido la vida y como es que se ha llegado hasta allí.