Sébastien Tellier
Domesticated

Sébastien Tellier es el único capaz de hacer que lavar los trastes suene sexy; eso es Domesticated.

Sebastien Tellier, l'enfant terrible del pop francés finalmente fue domesticado y eso se nota en su más reciente producción Domesticated. Una oda a la vida en familia y las labores del hogar que no podía caer más que bien en esta época en la que estar dentro de casa es nuestra nueva normalidad.

Tuvieron que pasar seis años para que Sébastien volviera a tomar los sintetizadores y le diera forma a este álbum que mezcla sonidos de la música disco y new wave con un toque sexy, muy a la Tellier.

A lo largo de ocho tracks, el francés hace un recorrido sonoro perfecto para acompañar las labores del día a día. Ejemplo de eso es “Stuck in a Summer Love”, que por momentos recuerda a su éxito “La Ritournelle” con la diferencia de que ésta tiene un ambiente más denso que te invita, como él ha dicho, a encontrar lo extraordinario en cosas tan simples como limpiar el tostador.

Sébastien Tellier es el único que puede hacer que canciones sobre estar todo el día en casa, esclavo de los quehaceres del hogar suene y te haga sentir sexy. Tal y como sucede al escuchar la canción que lleva ese nombre, “Domestic Tasks” que mezcla sintetizadores típicos de la década de los 90 con las vocales distorsionadas que siempre han caracterizado al francés.

La oda al nuevo sentimiento que le da a Tellier el ser “hombre de casa” queda claro no sólo en la portada del álbum –un retrato del francés adornado con esos guantes de plástico que usas para lavar los platos– sino en el nombre del álbum sugerido por la directora de cine Sofia Coppola al ver que la vida hogareña le sentaba bien al que una vez fue considerado el salvaje del pop francés.

El álbum cierra con “Won”, un track cargado de vibra noventera gracias a los sampleos y sintetizadores que bien podría caer en la categoría de chillwave. Si bien Domesticated no se acerca al gran trabajo que Tellier hizo en Sexuality o L'incroyable vérité, sí nos deja ver esta nueva faceta que el francés, a sus 45 años, ha adoptado: disfrutar de las cosas simples de la vida como estar en casa sin perder de vista que su música es un buen pretexto para sacar tu lado salvaje ya sea en una pista de baile, en la sala de tu casa o en la intimidad de tu recámara junto a tu pareja.