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25/Nov/2025
Limp Bizkit regresará a la Ciudad de México este 29 de noviembre como parte del Loserville Gringo Papi Tour, con un show masivo en la Explanada del Estadio Azteca. Y, aunque la banda es sinónimo de energía, caos y canciones que marcaron a toda una generación, es imposible hablar de su identidad sin hablar de uno de sus pilares más enigmáticos: Wes Borland.
Conocido por su habilidad para mutar visualmente a través de maquillaje, prótesis y vestuarios conceptuales, Borland ha sido —desde finales de los 90— una figura única en la música alternativa. Pero más allá de la imagen, su aportación como guitarrista ha sido crucial para moldear el sonido abrasivo, bizarro y adictivo de la banda.
Borland no solo es guitarrista: es multiinstrumentista, productor, vocalista y artista visual. Su curiosidad musical lo ha llevado a explorar proyectos paralelos como Black Light Burns —su proyecto industrial y alternativo— y Big Dumb Face, un experimento humorístico y extremo que demuestra su versatilidad sin filtros. También cuenta con discos instrumentales en solitario, entre ellos Crystal Machete, inspirado en los soundtracks ochenteros.
Gran parte del ADN de Limp Bizkit proviene directamente de su forma de tocar: riffs densos, grooves irregulares, afinaciones experimentales y un enfoque casi cinematográfico para componer. Desde Three Dollar Bill, Y’all$ hasta Chocolate Starfish and the Hot Dog Flavored Water, su estilo ha definido una era completa dentro del nu metal.
Éxitos como “Break Stuff”, “My Generation”, “Rollin’” y “Take a Look Around” son prueba de una firma musical que combina agresividad, teatralidad y precisión quirúrgica.
En vivo, Borland transforma el escenario en un universo propio: movimientos frenéticos, capas de sonido complejas y un diseño visual que evoluciona en cada gira. Su presentación en México promete ser una oportunidad única para ver en acción a uno de los guitarristas más influyentes y excéntricos del rock alternativo contemporáneo.
Limp Bizkit llegará a la Explanada del Estadio Azteca este 29 de noviembre, en lo que será una de las noches más explosivas del año.