Seeed: Desde Berlín, reggae de altísima calidad

Alemania es un país con mucha historia, quizá demasiada. Algunos creen que la gente es fría o que su idioma es fonéticamente muy agresivo; si usted es uno de ellos, está atrapado en el tiempo; los inicios del siglo pasado están muy lejos ya. Como recomendación sugiero que lo olvide, que saque esa idea de su cabeza inmediatamente. Hoy en día, Alemania a liberado de sus entrañas montones de bandas llenas de energía y diversión, de pura buena onda y música agradable a los oídos.

Por primera vez en México, una de las bandas más ruidosas, enérgicas, alocadas, rítmicamente hiperactivas, melódicamente divertidas, ingeniosas y con una calidad musical impresionante, Seeed, acomodó estratégicamente a sus 11 músicos en escena, incluyendo una tornamesa y un guitarrista con uno de los apodos más rifados del universo: "Rudeboy" Rudy, en la tarima del Plaza Condesa.

Con la batería en la cima del escenario, los metales en el costado superior izquierdo, la tornamesa en el costado contrario, las percusiones al frente de todos ellos, formados en pirámide, el ensamble comenzó con un intro instrumental para presentar a los tres vocales.

Peter Fox, Boundzound y Eased salieron al escenario para terminar de incendiar la pista con "Augenbling". Con el público sintiendo fuego en la sangre, aprovecharon para meter un cachito de "Insane" en nuestros vulnerables cerebros y para terminar de rostizarnos, arrojaron combustible a nuestros cuerpos con "Wonderful Life".

La música no paró ni un solo segundo, sólo bastó un momento para que estos tres elegantes muchachos tomaran tantito aire para presentarse y agradecer al público por permitirles provocar tanto caos. Finalmente, dejaron un poco de lado la música de los Balcanes, ragga y el dancehall para darnos una probadita de su más fino y sofisticado reggae con "Music Monks" y calmar tantito las aguas.

A partir del 2005, los vocalistas se dedicaron a hacer de las suyas por separado y dejaron de trabajar Seeed. Fue hasta el 2012, tras un largo tiempo de espera, que sacaron nuevo material y para esta presentación nos dieron la satisfacción de escuchar una pizca de lo que va a venir este año,. Recién salido de la sartén, interpretaron "Cherry Oh" y no se puede decir más que es una chulada.

A pesar de lo que uno cree, parece que el alemán es un idioma que se lleva muy bien con el reggae; "Schwinger", "Alles Neu" y "Schawarz Zu Blau" lo comprueban. Aunque uno no entienda ni una sola palabra, la comunicación es perfecta si nos pone a bailar. Este concierto estuvo lleno de momentos memorables, uno de ellos fue cuando se armó el Harlem Shake y la gente se empezó a quitar las playeras, una completa locura.

Así que sí usted decidió irse a dormir temprano o quedarse en su casa porque hacia frío, déjeme decirle que se perdió de una noche completamente ardiente. No disfrutó de los estruendosos metales, de las tarolas ambulantes de impresionante sincronía y, lo más importante, no se dio la oportunidad de bailar con las y los alemanes semidesnudos de todos tamaños que gozaban de juntar sus cuerpos con los demás a ritmo de reggae.