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Bitácora: Descartes a Kant en Centroamérica Pt. 1

Bitácora: Descartes a Kant en Centroamérica Pt. 1

26/May/2014

Hemos regresado a casa sanos y salvos, y hemos logrado disfrutar las adversidades como en pocos viajes en familia, poco a poco ese sueño que se veía a kilómetros de distancia comienza a materializarse.

Panamá nos recibió con un calorcito particular, el reggeton se hacía presente y nuestro acento era el raro. “¡Qué pedo con el hotel!” Realmente espectacular: 70 pisos de una fiesta interminable. Era el Hard Rock; casinos y tiendas de música, muchos colores con ambiente nocturno, pantallas con conciertos de rock clásico entre mostradores del lobby, barras llenas de buenos vinos y cerveza, gente de diferentes nacionalidades conociéndose a las 3 de la tarde con tragos en la mano…

El 4 de abril era el día, nos dirigimos al bar Onplog en el mero centro de Panamá en el barrio Casco Antiguo o Casco Viejo. El calor se dejaba venir con todo, los ventiladores prendidos nos esperaban y sin pensarla dos veces empezamos a armar para hacer prueba de audio, afortunadamente llevábamos a nuestro ingeniero Adán “Chiquitiko”, porque sin él hubiera sido un proceso bastante lento y quizá desastroso.

El cartel era realmente muy bueno, lo encabezaba Ana Tijoux, Standstill, Descartes a Kant y los panameños Luci & The Soul Brokers, que chingonería, proyectos que necesitarían urgentemente visitar México pues tienen todo para divertir y deleitar al más exigente. Fue un gran concierto, la gente estaba realmente sorprendida de nuestro trabajo, pronto comenzaron a solicitar nuestros discos y darnos sus impresiones del show, intercambiamos contactos y posamos en la cámara junto a los nuevos fans.

Los días siguientes nos pusimos en contacto con Señor Loop, a quienes conocimos en México en su visita y participación en Vive Latino 2013, para que nos llevaran a dar un tour por toda la ciudad y sus rincones. El último día recibimos un mensaje de uno de los asistentes al show del día anterior, pues era su cumpleaños y había organizado un asado y cervezas con los amigos, fuimos pues a ser parte del festejo. Luego tomamos el camión a Costa Rica.

Llegamos a Costa Rica, pasaron por nosotros a la central para llevarnos al hostal y ahí empezó mi comprensión de que estábamos en tierras ticas: pericos por todos lados, y en libertad. El segundo día en Costa Rica fue para los medios de comunicación y para hacer un mini tour nocturno por la ciudad.

Llegó el último día: llegamos por partes al Jazz Café Escazú, un bonito lugar para hacer conciertos de calidad, un foro bien presentado, PA de sobra para el venue, camerinos bien planeados. “¿De quién es este foro?”. Es “el búnker del holandés”. Todo pintaba para que fuera una gran noche y así lo fue.

Descartes salió a escena y empezó nuestra fiesta. La gente se iba apretujando hasta abarrotar los espacios que quedaban con la vista al escenario. Para las últimas tres canciones, Dafne y Sandra pidieron, mediante la voz de Braulio, despertaran e hicieran lo que nosotros conocemos como el slam. Alguien gritó: “¡quieren mosh!”; hombres y mujeres por igual se dieron con todo, nuestra presentación había terminado. Había que partir a Nicaragua, aún nos aguardaban muchas sorpresas.

Cuando llegamos a Nicaragua, a los minutos nos dimos cuenta, por conversaciones y gente alarmada que había temblado muy cabrón en Managua. Al ratito llegó Chema, nuestro anfitrión, y nos dijo lo que más temíamos: el show de hoy ya está cancelado, no hay luz en el lugar y es muy posible que la gente ya no asista por miedo.

Ni hablar, nos dirigimos directamente a su casa para replantear todo, había otro serio problema: la gente estaba tan asustada que huyo del país a diferentes lados por lo que ya no era posible viajar todos juntos al siguiente destino que era El Salvador, simplemente no había boletos disponibles, teníamos que separarnos por primera vez y llegar por partes dividiéndonos en equipos: Chiquitiko y Jorge, saldrían a las 12 de la noche hacia la frontera con Honduras para buscar alguna salida, Memo, Dafne y yo teníamos los tres únicos boletos a nuestro nombre y salía nuestro camión a las 5:00 AM, Cristy y Sandra buscarían salir en el camión de las 10:00 AM para llegar con el tiempo justo al show.

Llegamos a El Salvador solo Memo, Dafne y yo. El equipo 1 había sufrido un contratiempo y Sandra y Cristy estaban a 6 hrs de llegar.. se nos venía la noche encima. No podíamos darnos el lujo de perder 2 shows de 5 en Centroamérica.

Memo, Dafne y yo nos presentamos en el lugar con el equipo, haciendo el intento por rescatar la fecha. Jorge y Chiquitiko habían llegado a base de raites desde la frontera con Honduras; ya solo faltaban dos integrantes, la esperanza seguía, decidimos hablar por el micrófono y explicar la situación, ya habían pasado dos horas desde que tocó la última banda. Logramos contener a un 30% de la gente que había originalmente. Descartes empezó a tocar a la 1:30 AM, con un set más corto para hacer más ágil el concierto. Terminamos con un final bastante feliz, la gente que pudimos contener se quedó hasta el final. Siguiente parada, Guatemala.

Nos recibió Ritza Palú en su auto. Llevamos todo el equipo al venue “The Secret Garden” para hacer el soundcheck, después nos iríamos a comer y toparnos con Gerry Rosado, que se encontraba en ese país pues están en plena producción del disco de una súper banda llamada Coctel, con la que tocaríamos esa noche.

Una vez comidos y descansados, nos dirigimos al Garden, donde sería el último concierto, la gente ya estaba abarrotando el lugar. Muchísimos jóvenes con look playero, shorts, sandalias, lentes de sol y camisas hawaianas, vestidos sexys y sombreros coquetos, me sentía en Mazatlán.

Comenzamos con el set bien memorizado, los aplausos y caras de asombro no se hicieron esperar, la gente empezó a subirse a diferentes plataformas para poder ver que ocurría en el escenario; había un árbol con una rama horizontal que pronto fue poblada para alcanzar a ver qué ocurría, el mosh/slam hizo de las suyas y fue una noche más de éxito y éxtasis para cada uno de nosotros, la gira había terminado y todo el estrés acumulado lo intercambiaríamos por risas, abrazos, fotos y unas cervezas con los fans, la tiendita de la merch rápidamente se abarrotó y pronto empezaron a circular nuestros discos para ser firmados, estábamos satisfechos por lo realizado, escuchábamos que habíamos dejado un buen sabor de boca.

Hemos llegado a la Ciudad de México sanos, salvos y completos, con muchas experiencias bonitas y semillas que dejamos germinando para volver quizá el próximo año de nuevo a Centroamérica. Esperamos contar con mucha salud para seguir este camino, ¡nos vemos pronto!

Aquí la Pt. 2

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