85403
LOVE

10/Dic/2015

Un amor tortuoso y sexo explícito en 3D en Love de Gaspar Noé.

Años después de haber causado impacto en la cinematografía a nivel mundial con su ópera prima Irreversible, y de generar toda clase de críticas con su segundo largometraje Enter the Void, Gaspar Noé regresa con Love, una nueva película que muestra —con el ya característico estilo narrativo del director argentino— la forma en la que un amor hermoso se transforma hasta convertirse en algo que solo provoca sufrimiento.

Love es la trágica historia de amor de Murphy, un joven cineasta estadounidense, y Electra, una chica francesa que aspira a convertirse en artista; ambos son inestables, volátiles y autodestructivos, al mismo tiempo que son apasionados y que se entregan por completo el uno al otro. Se trata de una pareja casi única, condenada al fracaso desde un principio, a pesar de que para ellos todo comienza como algo muy parecido a un moderno cuento de hadas.

A lo largo de un día que parece ser igual que todos los demás en la vida monótona de Murphy, este se pone a recordar varios de los momentos que pasó al lado de su gran amor, Electra, y hace un recuento de lo bueno y lo malo que sucedió durante la aparentemente bella relación que mantuvieron por dos años en los que, la mayor parte del tiempo, parecía que lo suyo duraría para siempre y tendría un final feliz.

A través de diferentes flashbacks conocemos mejor a los dos personajes principales, y poco a poco Gaspar Noé nos lleva de la mano por un relato plagado de promesas que nunca se cumplieron, excesos de ambas partes, juegos sexuales que no siempre salen bien, y diversos errores que llegan como consecuencia directa de las malas decisiones, así como por dejarse llevar por el deseo. El sexo es una parte fundamental en la historia, ya que este va ligado al amor, mostrando que uno depende del otro; es por eso que el director no duda en mostrar muchas escenas de sexo explícito, aunque estas no tienen el efecto deseado y algunas incluso se sienten de más, pues parece que solo están ahí como una mera herramienta provocativa que no aporta algo realmente.

Desde que Love se anunció dentro de la programación de la pasada edición del Festival de Cine de Cannes, mucho se habló acerca del hecho de que se filmó en 3D. Incluso se especuló sobre lo que podría aportarle dicho formato a la historia, pero al final resulta un tanto innecesario y se siente que se debieron haber cuidado más otros detalles de la cinta, como el desarrollo de sus personajes —que se sienten planos— o la estructura de un guion que en ciertas partes se siente incompleto.