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Una mirada holandesa en este GIFF 2012
Una mirada holandesa en este GIFF 2012

Una mirada holandesa en este GIFF 2012

22/Jul/2012

La cinematografía holandesa es el invitado destacado de esta edición del Guanajuato International Film Festival. Una cinematografía con una historia tormentosa pero al mismo tiempo bastante constante.

Una industria a la que en su momento le faltó apoyo y que últimamente (a través del EYE Film Institute Netherlands) se ha caracterizado por dar un ligero empujón a muchos cineastas emergentes de Latinoamérica; de México a Chile. El cine en Holanda tuvo un comienzo un tanto tormentoso: surgió tardíamente, alrededor de 1950 con sus primeras películas de ficción, de muy bajo presupuesto. Luego vinieron sus documentales, empatando con la ola de documentalismo despegaba en Europa.  En 1952, algunos de sus cineastas fueron premiados en Cannes, entre ellos Bert Haanstra, Max de Haas, Ytzen Brusse y Herman van der Horst. Esta escuela holandesa de documentales fue legendaria, fue su primer despunte.

    Más tarde, casi en los 60 vendría la primera ola de cine holandés, inspirada en la Nouvelle Vague de Francia. En la que destacaron realizadores como Pim de la Parra y Wim Verstappen. Un poco después salta a escena una saga de documentalistas experimentales de la que surgieron piezas famosas como la controversial The Reality of Karel Appel (1962) de Jan Vrijman.

El año 1971 marcó una nueva época para el cine de esta nación; el ascenso de Paul Verhoeven y sus piezas Diaro de una prostituta y  Delicia Turca (1973). Hasta la fecha este realizador ha sido uno de los más populares de la historia holandesa; quien incluso ha realizado varias cintas en Estados Unidos, entre ellas la popularísima película de ciencia ficción RoboCop (1987), Basic Instincts (1992) y la satírica Starship Troopers (1997) entre otras.

Después del influjo de Verhoeven esta cinematografía cambia gradualmente con las nuevas generaciones de directores entre los que destacan Ate de Jong, Orlow Seunke, Jos Stelling. Al final de los 90 el gobierno holandés (porque no todo en la vida es pambol) mejoró el apoyo a la industria cinematográfica del país. Durante esa época se llevaron a cabo caras producciones como The Discovery of Heaven (2001) por Krabbé.

En los recientes años el cine de Holanda se había concentrado en recrear casos reales por medio de la cámara. De allí surgió el cine de Van God Los y el del genial Theo van Gogh, quien fuera asesinado por un extremista islámico en 2004. Los conflictos sociales de la Holanda del nuevo siglo fueron el lienzo sobre el que este Van Gogh cineasta dejó plasmados sus pocos pero invaluables filmes. Tal es el caso de la corrosiva Cool! (2004).

Datos históricos, logros y cifras de los que de hecho se habló en la charla del Foro Bilateral Holanda + México de este GIFF 2012. Al mismo tiempo los holandeses invitados al festival también se mostraron muy interesados en el cine de mexicanos como Carlos Reygadas y Amat Escalante; realizadores a los que consideran dos focos importantes del actual cine mexicano. Como detalle adicional, en este GIFF el Eye Film Institute Netherlands ha traido una muestra de lo más interesante de su cinematografía: desde una selección de cine silente, cortometrajes –en especial los terroríficos The Origin Of The Creatures (2010) de Floris Haayk y Rumoer (2011) de Jon Doense–, piezas del archivo fílmico Holandés como la película recién descubierta y restaurada De Bertha que será musicalizada en vivo por Babak Kamgar, el estreno de novedades holandesas como Kauwboy (2012) de Boudewijn Koole, entre otras sorpresas.

Holanda explota en miradas y ensoñaciones en medio de la ciudad de Guanajuato; visiones que no dejan de provocar la gestación de nueva creatividad; un cine amparado por una industria sólida que, en estos días, busca generar lazos con otras cinematografías, en este caso, con la mexicana. Un cine que invita siempre a hacer más cine.