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Roma, el proyecto más íntimo de Alfonso Cuarón

Roma, el proyecto más íntimo de Alfonso Cuarón

31/Ago/2018

Indie Rocks! conoce en voz de sus creadores el origen de la cinta.

En la época de esplendor del imperio romano “todos los caminos llevaban a Roma”, por lo menos 400 vías comunicaban a Roma con los sitios más importantes de su imperio. Era una estrategia militar y comercial. Recientemente un equipo alemán de investigadores desarrolló el proyecto Roads to Rome con el cual pretendían comprobar la veracidad de la famosa frase “todos los caminos llevan a Roma”. El origen del dicho se encuentra en el Miliario de Oro, el monumento que erigió el emperador César Augusto muy cerca del Templo de Saturno y el cual era el punto de partida para todos estos caminos. La conclusión del estudio es que por lo menos para Europa, en casi 500 mil rutas, efectivamente, todos los caminos llevan a Roma. Y para el cineasta Alfonso Cuarón todos los caminos apuntaban a Roma, su nuevo proyecto cinematográfico que finalmente será estrenado a finales de año a nivel mundial y antes en diferentes festivales de cine, pero el camino del estreno no ha sido trazado en línea recta, acaso de forma sinuosa.

Sobre Roma se conocía muy poco hasta hace unos días en que un grupo de periodistas tuvimos acceso a una parte del filme, así como al adelanto del mismo y a la voz del propio Alfonso Cuarón y dos de los productores, Gabriela Rodríguez y Nicolás Celis, sobre lo que implicó este proyecto. Pero el misterio que ha cubierto esta historia casi se desvela en mayo de este año cuando el filme comenzó a señalarse como uno de los candidatos a participar dentro del festival de Cannes, pero la pelea entre Netflix y los exhibidores de Francia impidió que se incluyera en la selección oficial. Un aguerrido encuentro que empezó el año pasado con la cinta Okja. El propio director artístico de Cannes, Thierry Frémaux, pidió a la plataforma que cediera a exhibir el filme en los cines de Francia o que lo pusiera fuera de la competencia, pero Netflix se negó acusando que iba contra su modelo de negocio. La ley en Francia exige que las cintas se exhiban en televisión hasta después de tres años que han sido estrenadas en salas comerciales del país o de lo contrario no pueden participar dentro del certamen. Y eso no sucedió. En medio de la controversia Roma se impuso sobre este incidente y fue anunciado como uno de los filmes más esperados dentro de “La Mostra”, el festival de cine de Venecia en su edición 75 –ubicado entre los tres más importantes del mundo y el más antiguo de hecho–, en el que Cuarón ya fue bien recibido con Gravedad. La prensa y la crítica lo han ovacionado tras su primera exhibición a nivel mundial en dicho certamen llamándolo su mejor trabajo hasta ahora.

Así que en medio de una terrible curiosidad por saber exactamente qué es Roma se apagan las luces, se escuchan los ruidos minúsculos que el “silencio” impone, esa oscuridad compartida parecida a la intimidad de los elevadores, alguien guarda algo en sus bolsas, la gente se acomoda en la butaca, los broches de mochilas o chamarras recorren los extremos del cierre, algún “cuchicheo” y comienza el filme. Tres, dos, uno…un poderoso blanco y negro baña el lienzo blanco que se esconde debajo de la luz y el sonido, pues otra cosa puede hacer con este primer plano tan hipnotizante.

La trama de Roma así como su sentir, el clímax, el ritmo, el montaje, la fotografía y las actuaciones continúan en misterio, porque del avance y algunos extractos del filme es imposible tomar una opinión sobre la cinta en su conjunto, lo que queda claro es que se trata del proyecto más íntimo de Alfonso Cuarón como él lo señala después de la exhibición. Entra a la sala del lado de los productores en medio de aplausos por parte de los periodistas porque Cuarón, el ganador del Óscar a mejor dirección y mejor montaje está de vuelta en las pantallas luego de cinco años. “Este film se empezó a gestar hace 10 años, justo después de Niños del hombre, tenía la intención de venir a México y en ese momento se complicó por cuestiones personales, creo que fue para bien porque aunque tenía la semilla del proyecto, requirió todos estos años para madurar lo que terminó siendo Roma”.

Es una historia que germina en la memoria y en los sentimientos del cineasta, en los recuerdos que lo perseguían hasta que los convirtió en un guión; un año en la vida de la familia de Cuarón y de cómo las mujeres a través de un matriarcado moldearon su infancia, dos empleadas domésticas, Cleo y Adela, así como su madre Sofía, mientras el país atraviesa una de los tantos giros políticos, económicos y sociales que acostumbra dar. “Era una necesidad que empezó a palpitar, hablar de estas mujeres, pero también acerca de este país, la película es tanto la historia de esta mujer en el contexto de este seno familiar, como la historia de ella en el contexto del país, lo que es muy hermoso por un lado y aterrador por otro es que muchas de esas cosas no cambian, me refiero a la parte amorosa, la parte hermosa de un núcleo familiar y de un país, pero por otro lado las inmensas llagas que pueden producir las familias y los países”, afirma Cuarón.

El México de los setenta y su reconstrucción visual y sonora es uno de los aspectos que destacan de las imágenes que pudimos atestiguar, un diseño de producción que a quienes no lo vivimos, nos lleva a ese México por momentos ignorado como ignoramos el pasado y su importancia en el presente, y a quienes formaron parte de él, los guiará en sus recuerdos. Gabriela Rodríguez, productora del filme, cuenta algunas de las dificultades de esa reconstrucción. “La casa fue muy compleja, hacerla que funcionara, no solo para la época sino para la ficción de Alfonso y que funcionara para filmar en sus espacios”. La casa original en donde creció Cuarón durante su infancia no estaba en condiciones óptimas para el rodaje, así que construyeron una dentro de un estudio, con las medidas exactas de su casa, con el mismo azulejo, la misma herrería, las mismas columnas, los mismos muebles que encontraron en cinco estados de la República, las paredes y los son techos movibles para tener control de la iluminación.

“El otro reto fue la Ciudad de México”, indica Nicolás Celis, productor del filme, “tantos elementos que se fueron recreando de la mano de Eugenio Caballero, Insurgentes es un set espectacular”. El director del film agrega. “Esta película está en 90 por ciento de memorias que yo fui testigo, parte de la obsesión de esta película era reproducir estos objetos a detalle, tratar de absorber la esencia de esos lugares, rodar en donde esta historia sucedió, Caballero construyó el set más grande que se ha hecho en mi carrera, que son cuadras de esa avenida”.

En Venecia, Cuarón confirmó que la plataforma exhibirá el filme también en salas comerciales aunque no ha especificado si será simultáneamente, finalmente “todos los caminos llevan a Roma” incluso de una manera metafórica, porque si leemos al revés el título de esta obra dice Amor y es de ahí de donde surge el filme, como la vida misma, del amor.