Arte explosivo: Cai Guo Qiang

Tal vez recuerdes a Cai Guo Qiang, el mismo artista que hace unos meses trajo a nuestro país Resplandor y Soledad, un trabajo que a base de explosiones sobre papel hace un recuento de eventos con creaciones desde los años 90, mostrados como una secuencia de proyecciones a gran escala. ¿No lo recuerdas?

Cai Guo Qiang no sólo hace explosiones asombrosas. Este artista chino trabaja actualmente en La Gran Manzana y es considerado como uno de los mayores exponentes del mundo del arte experimental de la China postrevolucionaria, ya que 1957 y su historia en la provincia de Fujian fueron factores indispensables para que desde muy pequeño se inspirara y así lograr lo que hoy lo tiene en la cima del mundo.

Un artista que se define como un verdadero ciudadano del globo y con una debilidad en cuanto a las barreras culturales que existen a través de él es como , a lo largo de los años, Cai Guo Qiang ha plasmados sus sueños en obras de arte que - hasta hoy -lo mantienen en el ojo internacional gracias a sus exposiciones en solitario que exploran un universo infinito.La explosión de sus dibujos lo ha llevado a grandes escenarios, logrando espectáculos inolvidables para todas las edades.

Este chinito ha estimulado su creatividad con todo lo que le ha parecido interesante: la mitología antigua, la historia militar, las filosofías taoísta y budista, la ciencia cosmológica, la tecnología pirotécnica, la medicina china y los conflictos globales contemporáneos.

Un lenguaje visual y conceptual característico que se resume en un trabajo enteramente libre que ha forjado a un artista en toda la extensión de la palabra. Alguien que en los años 80 se agarró de la espontaneidad para dibujar y lograr composiciones de humo y chispas y obras bidimensionales sobre lienzo y papel, sin imaginar límites.

Desde el principio, Guo Qiang buscó el modo de conectar toda su obra con el mundo oculto, ligándolo a estudios metafísicos y corrientes de energía; trabajando con fotografías, vídeos y dibujos, como obra temporal, pero siempre pensando en la pólvora, la luz intensa y el público.

Su trabajo se traduce hoy en dibujos con pólvora cada vez más complejos, pues emplea con frecuencia hojas de papel japonés - exclusivas para él - con una estructura de fibras resistentes que absorben el impacto de la explosión, constituyendo así, un nuevo medio de expresión artística contemporánea.

Cai y la medicina de fuego no son nada más que la combinación perfecta para lograr la destrucción creativa. Te dejo una muestra de su obra y no olvides que debemos crear cultura. Disfruta.