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#OnTheRoad: Fui a Estocolmo para ver a Kent en vivo por última vez

#OnTheRoad: Fui a Estocolmo para ver a Kent en vivo por última vez

Diego Figueroa
@Halofive


@Halofive

11/Ene/2017

Una fecha no es suficiente para despedir a Kent, por eso asistí a sus tres conciertos en Estocolmo.

Música non stop

Formados en 1990, Kent rápidamente logró colocarse como la banda más importante de Suecia. Con sus primeros dos discos: Kent y Verkligen, comenzó a llamar la atención del público, pero con cada lanzamiento posterior, la importancia de la banda crecía, logrando ser un fenómeno llena estadios en toda Escandinavia. Para 2016, podía presumir una carrera de 12 discos de estudio, 11 de ellos número 1 en su país natal; 21 premios Grammi, el equivalente sueco al Grammy; y más de 3 millones de álbumes vendidos.

Somos para siempre

El 16 de marzo de 2016, un video publicado por la banda anunciaba de manera muy emotiva que después de 26 años de carrera, su 12º disco, Då som nu för alltid (Como antes y ahora, por siempre) sería el último disco del grupo, el cual presentarían en una última gira que concluiría el 17 de diciembre. Los boletos para los últimos conciertos se agotaron en poco menos de una hora, incluso las fechas extra que se fueron agregando de manera instantánea después de algún sold out. En total, fueron 28 fechas en 20 ciudades de Noruega, Finlandia, Dinamarca y Suecia, pero el alcance de la noticia fue mundial para los fans de la banda que se encuentran fuera de Escandinavia. Nos enteramos de gente de Brasil buscando boletos en reventa con planes de ir, una fan de Sudáfrica fue a la fecha en Kiruna, la ciudad más al norte de Suecia ubicada en el círculo polar ártico, y desde México, planeé todo para ir a las tres últimas fechas en Estocolmo.

Todo tiene su tiempo

La gira, que comenzó el 23 de septiembre en Linköping, llegaba a su ronda final el 15 de diciembre en la Tele2 Arena de Estocolmo. El ambiente era emotivo, pero también frío; no solo por el clima sino por el hecho de estar frente al inicio del fin de nuestra banda favorita. Además, el público sueco no suele ser muy expresivo. Durante el concierto, y en varios más, según me contaban otros fans extranjeros que han vivido varios años allá, el público solo acompaña con aplausos la canción. Rara vez cantan efusivamente, o saltan o se expresan de otra forma. Un claro contraste a la forma en que los mexicanos nos comportamos. Un contador en la pantalla principal del escenario nos advertía que faltaba media hora para el inicio. Un momento curioso fue que al marcar los 7 minutos con 47 segundos restantes, el contador cambiaba de color a rojo, una referencia a la canción "747", de las más importantes en la historia de Kent. Al llegar el contador a 0:00, resonaba el redoble de tambor que acompañó el video que anunció la muerte del grupo. Después de 2 horas y media terminaba la primera de las tres últimas fechas, con un concierto en el que hasta presentaron una canción inédita, demostrando que a pesar de estar cerca del fin aún tienen cosas por entregar.

Antes de que todo termine

16 de diciembre, penúltimo concierto y en una opinión personal, el favorito de los tres. Más allá del hecho de que se iban llenando los caprichos personales en cuanto al setlist, con las canciones que quería escuchar. Pude presenciar a una banda que durante 14 años pensé imposible ver en vivo, y por ende, logré fotografiarlos. Estar en el pit me dio no solo la oportunidad de trabajar en suelo ajeno, sino de sentir la conexión entre banda y público y estar en el epicentro de las emociones. Ver los rostros de los fans que veía únicamente por Instagram, pero que una vez más, al igual que en toda la gira, seguían en la barricada frente a sus ídolos. El setlist tuvo pocas variantes, pero ya se percibía un poco más de ánimo en el público, consciente de que le quedaban pocas horas de existencia a la banda. El escenario se componía por una pantalla central, cuatro a los costados y dos de frente al público, siendo imponente con la calidad de los visuales que acompañaban a todas las canciones. "En Jag Ser Dig" (Te veo) se leía en las pantallas que le hicieron honor al nombre de la canción al presentar en ellas a muchos de los asistentes en primera fila y una toma abierta del público. Joakim Berg, vocalista, veía hacia la cámara mientras cantaba el coro. En "747", un sol enorme surge del fondo del escenario para revelarse completo a media canción, y acercarse nuevamente mientras todo el público agitaba los brazos de un lado a otro.

La última canción

Unos meses atrás, un grupo de fans organizó para el último concierto, un desfile/caminata que partió de Medborgarplatsen, una de las plazas más grandes de la ciudad. La convocatoria se estimó en 5 mil fans que caminaron desde dicha plaza hacia la Tele2 Arena, todos con una bandera en mano con la leyenda “Juntos en camino hacia el último concierto de Kent”. El ambiente era el de una procesión fúnebre, y no era para menos. El día anunciado como el final, aquel 17 de diciembre que parecía muy lejano cuando se nos informó del fin, había llegado. Algunos fans se maquillaron como y parecían músicos de la muerte. Tal vez los suecos son muy fríos en su actitud durante el concierto, pero con este evento, no podemos decir que son distantes, sino todo lo contrario. La pasión que tiene este país por Kent puede no reflejarse en los conciertos, pero sí en la trascendencia que dejó en todos y cada uno de sus fans, quienes acudieron a despedirlos de esta forma.

Al acercarse al estadio, unas cruces brillantes invitaban a la gente a acercarse. Algunos dejaban flores, otros contemplaban la escena, decorada con veladoras y una proyección de velas que se encendían virtualmente al enviar un SMS. Las pantallas alrededor de la arena mostraban cruces y la pantalla que rodeaba el estadio anunciaba en letras mayúsculas “Sista konserten någonsin” (el último concierto para siempre). Al entrar, una vez que todos nos quitábamos las más de dos chamarras para aguantar el frío, veíamos como todos usaban ropa blanca armando sin querer un dresscode para la ocasión. El setlist transcurría normalmente como el resto de la gira, pero poco a poco los momentos especiales fueron apareciendo. En uno de los pocos discursos que daba Berg, el público lo interrumpía constantemente con gritos para dejarlo casi hasta llegar al punto de la lágrima. Otro momento sobresaliente fue cuando comenzaron una versión alterna de "Socker" (Azúcar) que en cuanto sonó el riff característico, fue una de las ovaciones más grandes de la noche, comparable únicamente con el gran final, con "Den Sista Sången" (La última canción) con la cual los 4 de Eskilstuna se despidieron por última vez del público que los siguió por 26 años, en incontables conciertos a lo largo de toda Escandinavia, y algunos cuantos más que emprendimos el viaje para el funeral de Kent.